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¿Cómo afecta la
MDMA al cerebro?
La MDMA afecta el cerebro aumentando la actividad de por lo menos tres neurotransmisores (los mensajeros químicos de las células del cerebro): la serotonina, la dopamina, y la norepinefrina. Al igual que con otras anfetaminas, la MDMA produce la liberación de estos neurotransmisores de sus sitios de almacenamiento dentro de las neuronas, lo que resulta en una mayor actividad neurotransmisora. En comparación con el poderoso estimulante metanfetamina, la MDMA produce una mayor liberación de serotonina y una menor de dopamina. La serotonina es un neurotransmisor que juega un papel importante en la regulación del estado de ánimo, sueño, dolor, emociones, apetito y otros comportamientos. La liberación excesiva de serotonina causada por la MDMA probablemente produce los efectos de elevación en el estado de ánimo que sienten los usuarios de esta droga. Sin embargo, al liberar cantidades grandes de serotonina, la MDMA disminuye significativamente las cantidades de este importante neurotransmisor en el cerebro, contribuyendo así a los efectos negativos posteriores en el comportamiento que los usuarios frecuentemente experimentan por varios días después de haber tomado MDMA.
Varios estudios en animales han demostrado que la MDMA puede dañar las neuronas que contienen serotonina y algunos de estos estudios han comprobado que estos efectos pueden ser de larga duración. Esto sugiere que este daño también puede ocurrir en los seres humanos. Sin embargo, con la tecnología actual, es más difícil medir el daño en la serotonina de los seres humanos. Los estudios han demostrado que algunos usuarios crónicos de MDMA experimentan confusión, depresión y daño selectivo en la memoria de trabajo y en los procesos de atención, que persiste por largos períodos de tiempo. Se han asociado estos deterioros en la memoria con una disminución en los metabolitos de serotonina u otros marcadores de la función de la serotonina. Estudios de imágenes neurológicas en los usuarios de MDMA han mostrado cambios en la actividad del cerebro en las regiones que involucran la cognición, la emoción y la función motora. Sin embargo, se necesitan mejores tecnologías de imágenes neurológicas para confirmar estos hallazgos y explicar la naturaleza exacta de los efectos de la MDMA sobre el cerebro humano. También hay que tomar en cuenta que muchos usuarios de éxtasis pueden estar tomando otras drogas vendidas como éxtasis sin saberlo, o pueden estar intencionalmente consumiendo otras drogas como la marihuana, que podrían contribuir a estos efectos sobre el comportamiento. Además, la mayoría de los estudios en seres humanos no tienen medidas conductuales previas al uso de drogas, por lo que se dificulta el poder descartar condiciones pre-existentes en los usuarios. Ciertos factores como el sexo del usuario, la dosis tomada, la frecuencia y la intensidad del uso, la edad en que comenzó el uso de la droga, el consumo de otras drogas así como factores genéticos y ambientales, pueden jugar un papel en algunos de los déficits cognitivos que resultan del uso de MDMA, lo que debería ser tomado en cuenta al estudiar los efectos de la MDMA en los seres humanos.
Dado que la mayoría de los usuarios de MDMA son jóvenes y en edad reproductiva, es posible que algunas de las usuarias puedan estar embarazadas cuando toman MDMA, sea sin darse cuenta o intencionalmente debido a la percepción equivocada de que no es una droga peligrosa. Los posibles efectos adversos de la MDMA sobre el feto en su fase de desarrollo constituyen una grave preocupación. Los estudios conductuales en animales han encontrado efectos adversos importantes en las pruebas de aprendizaje y memoria resultantes de la exposición a la MDMA durante el período de desarrollo equivalente al tercer trimestre en los seres humanos. Sin embargo, los efectos de la MDMA en los animales en un período de desarrollo más temprano no están claros, por lo que se necesitan más investigaciones para determinar cuáles son los efectos de la MDMA sobre el sistema nervioso humano en etapa de desarrollo.
Efectos potencialmente letales |
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¿Puede causar adicción la MDMA?
Para algunas personas, la MDMA puede ser adictiva. Una encuesta de adultos jóvenes y adolescentes usuarios de la MDMA encontró que el 43 por ciento de los que informaron usar éxtasis cumplían con los criterios de diagnóstico aceptados para la dependencia, según se evidencia a través de los efectos del síndrome de abstinencia y de la tolerancia (respuesta disminuida a la droga) o por continuar el uso de la droga a pesar de tener conocimiento de los daños físicos o psicológicos; y que el 34 por ciento de los usuarios cumplían con los criterios de diagnóstico para el abuso de drogas. Casi el 60 por ciento de las personas que usan MDMA informan tener síntomas del síndrome de abstinencia, incluyendo fatiga, pérdida de apetito, síntomas de depresión y problemas de concentración.
La MDMA afecta a muchos de los mismos sistemas de neurotransmisores en el cerebro que son afectados por otras drogas adictivas. Los experimentos han demostrado que los animales prefieren la MDMA sobre otros estímulos placenteros, de manera parecida a lo que ocurre con la cocaína, lo que constituye una característica distintiva de la mayoría de drogas adictivas.
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