La democracia en el mundo | La voz de los ciudadanos
03 diciembre 2008
La gente utiliza redes sociales para luchar contra la violencia y el extremismo
Conferencia en Nueva York reunirá a grupos juveniles internacionales
Washington – Oscar Morales decidió que estaba harto.
Al igual que muchos otros colombianos, Morales había seguido de cerca las noticias a fines de 2007 de que tres rehenes secuestrados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) iban a ser puestos en libertad el 24 de diciembre. Según los informes de prensa, dos rehenes fueron puestos en libertad, pero las FARC mintieron sobre el paradero del tercer rehén, un niño de tres años.
Resulta que el niño ya no estaba retenido por las FARC, y había sido abandonado y se encontraba en un hogar de guarda en Bogotá.
“Eso causó enorme frustración y rabia”, dijo Morales. “Sentimos como si nos hubieran dado una bofetada. Fue la gota que colmó el vaso”.
Así que Morales decidió hacer algo. “Sentí la necesidad de hacer algo en mi propio espacio”, dijo. Como usuario de Facebook.com, a principios de enero de 2008 creó un grupo en Facebook denominado Un millón de voces contra las FARC, donde instó a otros usuarios a que expresaran sus opiniones.
“No podemos seguir aguantando las crueldades y las mentiras y todo este terrorismo”, recordó haber pensado en ese momento.
Morales no podría haberse imaginado la respuesta. Según relata, en doce horas se apuntaron 1.500 personas al grupo; al día siguiente, otras 4.000 personas, y al tercer día, 10.000 personas más.
“En el foro de debate se desbordaban las propuestas e ideas para concretar este movimiento cada vez mayor”, dijo. “Así que el tercer día elaboramos una propuesta para organizar una protesta en las calles, fuera de los límites de Internet, para que fuera real”.
El grupo decidió darse un mes para organizar la protesta. Cinco manifestantes entregados a la causa se ofrecieron como voluntarios para servir como comité organizador central. Pocos días después, habían encontrado a 40 personas dispuestas a ser coordinadoras en más de 50 ciudades. Mientras tanto, el tamaño del grupo había aumentado a 150.000 personas.
Morales, que es desarrollador web, creó una página web dedicada a la manifestación, para que los medios de comunicación pudieran ver lo que el grupo estaba haciendo. El grupo también aprovechó otras tecnologías, como blogs y foros de debate para difundir su mensaje.
Aunque el crecimiento del movimiento surgió a partir de los nuevos medios de comunicación, Morales sabía que los medios de comunicación tradicionales, como los periódicos y la televisión, desempeñarían un papel clave en la difusión de la noticia al resto de Colombia y a la comunidad internacional.
Los medios de comunicación “se maravillaron al descubrir que jóvenes sin experiencia previa y sin intereses políticos estaban obligando a que se realizara esta protesta”, dijo Morales. “Se maravillaron aún más de que [se estaba haciendo] a través de Facebook y la tecnología”.
Pero incluso el mejor de los planes no podía haber preparado a Morales y a los demás organizadores de lo que debían esperarse. “Llegamos al 4 de febrero sin saber con certeza lo que iba a suceder. No teníamos ningún modo de calcular el tamaño que iba a tener”, dijo Morales.
Ese día, doce millones de personas en casi 200 ciudades en 40 países protestaron contra las FARC. “No podía creer la solidaridad que hubo”, dijo Morales.
En cuanto a la protesta y la organización, Morales dijo que la experiencia supera las palabras. “No se puede describir”, dijo. Como organizador de base en Barranquilla, pensó que estaría al frente de una multitud de 10.000 personas; pero el 4 de febrero, Morales calcula que se presentaron 300.000 personas. “Estaba muy nervioso y realmente entusiasmado con esto”, dijo Morales. “Tuve que gritar en el micrófono”.
“Sabíamos que la protesta asestaría un golpe muy fuerte a las FARC, tanto en el plano político como ideológico”, explicó. “Antes del 4 de febrero creían que tenían algún tipo de apoyo popular. Lo que hicimos fue demostrar matemáticamente que Colombia no apoya a las FARC”.
Las manifestaciones han provocado miles de desmovilizaciones, o deserciones, de las FARC. El 20 de julio, Día de la Independencia en Colombia, se realizó una segunda marcha para celebrar la liberación de más rehenes cautivos, entre estos la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt.
APROVECHAR REDES SOCIALES PARA PONER FIN A LA VIOLENCIA
Del 3 al 5 de diciembre, Morales y personas de otras 16 organizaciones internacionales que tienen presencia en Internet y que se dedican a lucha contra la violencia y el extremismo se darán cita en la Cumbre de la Alianza de Movimientos Juveniles en la ciudad de Nueva York para compartir experiencias.
Jared Cohen, funcionario que integra la plantilla de planificación de políticas del Departamento de Estado y que ha escrito extensamente acerca de la juventud y la tecnología, dijo en una charla electrónica en America.gov que el objetivo de la Alianza de Movimientos Juveniles buscar cómo grupos como Un millón de voces contra las FARC han utilizado Internet como una herramienta contra la violencia.
“Los medios en Internet, móviles y digitales ofrecen herramientas que se pueden aprovechar para lograr objetivos relacionados con la libertad de reunión y la libertad de expresión”, dice Cohen. “Permiten la libre circulación de información, pensamiento crítico y oportunidades para que la gente se conecte con otros más allá de aquellos que están en su círculo inmediato de contactos”.
La conferencia, que tendrá lugar en la Facultad de Derecho de la Universidad de Columbia, reunirá a socios del sector privado y el sector público de EE.UU., entre estos el Departamento de Estado, la Universidad de Columbia, Facebook, Google, la cadena de televisión MTV, AT&T Inc, Howcast Media Inc, y Access 360 Media.
Al final de la conferencia, Howcast publicará un manual en Internet para otros grupos que deseen crear un movimiento de facultación de jóvenes contra la violencia que aproveche la web.
“Creemos que en todo el mundo los jóvenes utilizan Internet para hacer retroceder la violencia de forma novedosa, mediante la creación de redes sociales, la convocación de grandes grupos para tener conversaciones, básicamente, para compartir información”, dijo James K. Glassman, subsecretario de Estado para Asuntos Públicos y Diplomacia Pública. “Creemos que la tecnología que existe hoy en día está de nuestro lado, no del lado de los extremistas”.
Y tal como lo demostraron Oscar Morales y otros doce millones de personas en febrero, a veces la herramienta más poderosa no es la tecnología que se utiliza para comunicar el mensaje, sino el mensaje mismo. “No somos el ejército, no utilizamos armas”, dijo Morales. “Somos sólo la voz de la sociedad”.
Para más información, véase el grupo Un millón de voces contra las FARC, en Facebook, y la página web de dicha organización.
