Diferencias étnicas y raciales en el estado de salud autorreportado por adultos con o sin discapacidades
Las estrategias para reducir desigualdades de salud raciales deben también mejorar la salud y el bienestar de las personas con discapacidades.
La prevalencia de discapacidades (número de casos de una enfermedad en un grupo definido de personas durante un período específico) entre los adultos estadounidenses varió de 11.6% en los asiáticos a 29.9% en los indoamericanos y nativos de Alaska. En cada grupo racial o étnico, los adultos con discapacidades tenían mayor probabilidad de reportar un estado de salud regular o malo en comparación con los adultos sin discapacidad, con una diferencia que oscila entre 16.8 % en los asiáticos y 37.9% en los indoamericanos y nativos de Alaska.
En general, los adultos con una discapacidad tenían menor probabilidad de notificar un estado de salud excelente o muy bueno y mayor probabilidad de notificar un estado de salud regular o malo (40.3 contra 9.9%), comparado con los adultos sin discapacidades (Tabla 2). Entre los encuestados sin discapacidades que calificaron su salud como buena o excelente, los adultos blancos tuvieron el porcentaje más alto (66.9%), mientras que los de la raza negra representaron el 49.9%. Los adultos con discapacidades que reportaron un estado de salud regular o malo eran mayoritariamente hispanos e indoamericanos o nativos de Alaska (55.2% y 50.5%, respectivamente) y con menos frecuencia eran asiáticos (24.9%).
El BRFSS es una encuesta telefónica en la que se eligen los números telefónicos en forma aleatoria para entrevistar a la población civil de los Estados Unidos de 18 años de edad o más que no está internada en centros sanitarios. En los años 2004, 2005 y 2006, aproximadamente 1 millón de personas de todos los 50 estados, el Distrito de Columbia, Puerto Rico y las Islas Vírgenes de EE.UU participaron en la encuesta BRFSS. *En consonancia con la definición de discapacidad de Gente Saludable 2010, a los encuestados se les preguntó lo siguiente: "¿Está usted limitado de alguna manera en cualquier actividad debido a problemas físicos, mentales o emocionales?" y "¿Tiene usted algún problema de salud que requiera el uso de equipo especial como bastón, silla de ruedas, una cama o teléfono especial?" A los participantes que respondieron que "sí" a cualquiera de las preguntas se les clasificó como personas con discapacidad. Para evaluar el estado de salud autorreportado, se les preguntó a los participantes: "¿Usted describiría su salud en general como excelente, muy buena, buena, regular o mala?"
FUENTE DE LOS DATOS: Racial/Ethnic Disparities in Self-Rated Health Status among Adults with and Without Disabilities — United States, 2004–2006. MMWR 2008:57(39);1069-1073.