Complicaciones del embarazo

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Aunque la mayor parte de las mujeres tienen embarazos sanos con sólo algunas molestias leves, nunca está de más conocer las señales de las condiciones que pueden causar problemas graves de salud para usted y para su bebé. Existe una amplia gama de síntomas que puede experimentar durante y después del embarazo, desde molestias leves como las náuseas y los calambres en las piernas, hasta problemas más graves como las hemorragias. Sin embargo, cada mujer y cada embarazo es diferente, y hasta hay algunas mujeres que tienen una experiencia de embarazo libre de problemas. No obstante, debería estar preparada para notar cualquier cambio en su cuerpo a medida que su embarazo alcanza progresa.

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Problemas sin síntomas

Algunos de los problemas de salud que puede tener durante el embarazo no tienen síntomas. Uno de ellos es la infección del Estreptococo Grupo B (GBS, por sus siglas en inglés). La infección del GBS es una infección común que rara vez enferma a un adulto. La bacteria vive en el sistema gastrointestinal, junto con muchas otras bacterias inofensivas. Entre un 10 y un 30 por ciento de las mujeres embarazadas llevan el GBS en su vagina y su recto. Sin embargo, si el GBS se transfiere al bebé durante el parto, puede causarle problemas graves de salud al recién nacido, tales como pulmonía, infecciones de la sangre, o infección en los tejidos que rodean al cerebro.

Debido a que el GBS no tiene síntomas, deberá ser analizada por su médico entre las 35 y las 37 semanas de embarazo. Esta simple prueba consiste en tomar con un algodón una muestra de células de la vagina y el recto, que es enviada a un laboratorio para detectar el GBS. Si está infectada, se la tratará con antibióticos intravenosos (IV) durante los trabajos de parto y el parto mismo, para asegurar que el bebé esté protegido.

Otro problema es la anemia, o tener niveles de hierro en la sangre inferiores a los normales. El hierro es necesario para la hemoglobina (una proteína de la sangre que ayuda a llevar el oxígeno a los tejidos del cuerpo para generar energía y crecimiento) para usted y su bebé. El hierro también ayuda a desarrollar los huesos y los dientes. La mayor parte de las mujeres no muestra síntomas de anemia, pero algunas pueden tener fatiga extrema. Su doctor verificará si hay señales de anemia mediante los análisis de sangre de rutina que se llevan a cabo en distintas etapas de su embarazo. Si padece anemia, se le darán suplementos de hierro para que tome una o dos veces al día. Ayude a prevenir la anemia consumiendo más alimentos ricos en hierro, como papas, pasas de uva, brócoli, verduras de hoja verde, panes integrales y cereales fortificados con hierro.

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Actualizado octubre 2004