Terminación prematura de estudios clínicos
La mayoría de los estudios clínicos se llevan a cabo de principio a fin según lo planificado. Pero algunas veces, los estudios terminan antes de lo esperado. Por ejemplo, el IRB y el DSMB pueden suspender un estudio si los participantes sufren efectos secundarios graves e inesperados, o si existe una evidencia clara de que los daños son mucho mayores que los beneficios.
En algunos casos, se puede suspender un estudio por las siguientes razones:
- Su avance es muy bueno. Si existe pronto una evidencia clara de la efectividad de una intervención o de un tratamiento nuevo, se puede interrumpir el estudio para que el nuevo tratamiento se ponga a disposición del público en general lo antes posible.
- No se pueden reclutar a suficientes participantes.
- Se publican los resultados de otros estudios que responden la cuestión o que la hacen irrelevante.