• Una manera fácil de ahorrar es pagarse a sí mismo primero. Esto significa que cada período de pago, antes de que se sienta tentado a gastar dinero, comprométase a poner una parte en una cuenta de ahorros. Vea si puede arreglar con su banco para que le transfieran automáticamente cierta cantidad de su salario o su cuenta corriente a la cuenta de ahorros cada mes.
• Las personas que hacen seguimiento a sus ahorros a menudo llegan a ahorrar más, porque lo tienen en mente. Hay nuevas aplicaciones telefónicas disponibles para ayudar a las personas evitar las compras que realmente no necesitan: ¡Puede que desee probar una!
• Si va a realizar inversiones, es bueno consultar con un profesional calificado acerca de sus planes. Antes de adquirir inversiones, asegúrese de crear un fondo de ahorros de emergencia para cubrir sus necesidades durante por lo menos tres meses. Mantenga los ahorros en una cuenta asegurada de banco o cooperativa de crédito a la que pueda acceder si necesita el dinero.
• Muchos profesionales se hacen llamar “asesores financieros”. Si usted contacta a uno, pídale una descripción de los servicios ofrecidos. Un buen lugar para comprobar las credenciales de un asesor de inversiones es la oficina de protección al consumidor de su estado o la oficina del Fiscal General del Estado.

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