Despierte la pasión con la ciencia ciudadana

Por: Grace Robiou

La ciencia ciudadana nos está obligando a re-pensar cómo se hace la ciencia, para quién es la ciencia, y cuál es su rol en nuestra sociedad.

En esencia, se refiere a la participación del público en las actividades de investigación científica. La meta central es lograr la participación ciudadana para que personas no expertas en las ciencias aporten sus ideas y evaluaciones a los esfuerzos científicos. Básicamente, la ciencia ciudadana motiva a los no científicos a desarrollar un nuevo conocimiento que contribuye hacia un mejor entendimiento del rol de la ciencia en nuestra sociedad. De igual forma que ha ido ganando relevancia a lo largo de los años el concepto del periodismo ciudadano – con blogs y tuits, difundiendo las noticias del momento– la ciencia ciudadana está ganando terreno. La mayoría de las disciplinas de la ciencia pronto tendrán algunos elementos de participación de la ciencia ciudadana en sus investigaciones.

En la actualidad, en Puerto Rico existen varios proyectos de ciencia ciudadana. El Programa Ciudadano Científico que opera Para La Naturaleza, una unidad del Fideicomiso de Conservación de Puerto Rico, es bastante avanzado. Ellos realizan investigaciones en arqueología, botánica, costas, aves, el juey común y murciélagos. Hasta el momento, el programa ha involucrado a más de 2,100 ciudadanos científicos en la recopilación de datos y el manejo de diferentes aspectos de los proyectos investigativos.

También se destacan el Programa del Estuario de la Bahía de San Juan con su monitoreo de calidad de agua; el Sierra Club – Capítulo de Puerto Rico que ha logrado, con mucha tenacidad, preservar el Corredor Ecológico del Noreste; BasuraCero, una iniciativa para lograr cero desperdicios en la Isla; y la Sociedad Ecoambiental que efectúa actividades con los estudiantes de ciencias naturales en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras. Por su parte, Junte Ambiental, Mi Puerto Rico Verde, y el Instituto Estudios del Caribe también promueven la ciencia ciudadana.

Cuando un niño o un adulto analiza una muestra de agua del río que queda a la vuelta de la esquina de su casa o emprende un paseo en la naturaleza para identificar las especies, una transformación personal ocurre en ese individuo. La participación pública en la ciencia concientiza a esos individuos acerca de sus alrededores y los convierte en defensores de nuestro medio ambiente.

La ciencia es y debe ser una pasión compartida entre los miembros de la sociedad. La ciencia puede cambiar el mundo. Mediante la ciencia ciudadana, usted puede participar. ¿Quiere unirse a nosotros?

 

Acera del autor: Grace M. Robiou es la directora de la Oficina de Estándares Nacionales de Calidad de Agua de EPA. Una abogada de profesión, ha laborado en la EPA por más de 26 años.