El controlar los mosquitos y el proteger las abejas: Tenemos que hacer ambas cosas

Por Jim Jones

¿Sabía que en el 1906, más del 85% de los trabajadores en el Canal de Panamá fueron hospitalizados por padecer malaria y la fiebre amarilla, ambas enfermedades transmitidas por mosquitos? Fue una crisis de salud pública de extrema gravedad. ¿Acaso no conocemos a alguien personalmente que ha padecido los impactos devastadores de la enfermedad de Lyme o del virus del Nilo Occidental?

Babosa en un haba de soya. Foto tomada por Nick Sloff

Babosa en un haba de soya. Foto tomada por Nick Sloff

A veces necesitamos insecticidas para controlar las plagas y prevenir las enfermedades para así proteger nuestra salud. Sin embargo, a veces algunos de estos insecticidas pueden ser peligrosos para las abejas, que son tan necesarias para producir las cosechas y asegurar un abastecimiento de alimentos sanos y saludables.

¿Cómo protegemos la salud pública de la amenaza de las enfermedades propagadas por los mosquitos, mientras a la misma vez protegemos a las abejas? ¿Cómo se establece un balance entre la necesidad de usar plaguicidas para controlar las plagas que perjudican nuestros cultivos y se toma acción para prevenir las consecuencias no intencionadas a nuestra salud y nuestro medio ambiente?

Estos son algunos de los dilemas en los cuales el MIP, o las prácticas para el Manejo Integrado de Plagas, nos pueden ayudar. El MIP se enfoca en la prevención a largo plazo de plagas y su daño al manejar el ecosistema. Y los proyectos de subvenciones MIP de la EPA nos ofrecen unas soluciones más rápidas y complementan las restricciones sobre el uso de plaguicidas que tenemos en vigor en la actualidad.

Anunciamos tres subvenciones para proyectos de MIP para reducir los riesgos de los pesticidas, maximizar la salud pública, velar por la salud de los cultivos y la producción de cosechas, mientras se ahorra dinero.

 

Administrador adjunto de Seguridad Química y Prevención de Contaminación, Jim Jones, se reúne con personas responsables de los proyectos subvencionados

Administrador adjunto de Seguridad Química y Prevención de Contaminación, Jim Jones, se reúne con personas responsables de los proyectos subvencionados

Administrador adjunto de Seguridad Química y Prevención de Contaminación, Jim Jones, se reúne con personas responsables de los proyectos subvencionados

·         El proyecto de la Universidad Estatal de Luisiana se enfoca en minimizar los impactos a las abejas provenientes de los insecticidas usados para el control de mosquitos mediante las prácticas MIP. El control de mosquitos es un asunto crítico para la salud pública y las abejas son esenciales para la producción agrícola y un suministro de alimentos sanos.

 

·         El proyecto de la Universidad Estatal de Pensilvania buscará proteger a las abejas y cultivos al reducir la dependencia en el tratamiento de las semillas con plaguicidas neonicotinoidas y explorará los beneficios de producir las cosechas sin usarlos. Estos recubrimientos de semillas son usados para prevenir que las babosas dañen las cosechas al alimentarse de las hojas. Sin embargo, estos tratamientos de las semillas podrían perjudicar a las abejas, así como a los animales que se alimentan de las babosas que han ingerido partes de las plantas que han sido tratadas con estas semillas.

 

·         La meta del proyecto de la Universidad de Vermont consiste en reducir las aplicaciones de herbicidas y fungicidas por un 50% para reducir el mildiú lanoso, una enfermedad que afecta las plantas, mientras a la misma vez se aumenta el rendimiento de cultivos en 75 acres de lúpulo en el nordeste mediante el uso de métodos intensos de MIP. El 96% de los cultivadores de lúpulo informan que las malas hierbas y las enfermedades reducen el rendimiento de sus cultivos. El lúpulo tradicionalmente requiere varios tratamientos de fumigación con pesticidas, pero su uso excesivo puede ocasionar problemas con la calidad del agua y las escorrentías y también perjudicar a insectos beneficiosos.

 

Espero que estos proyectos MIP continuarán produciendo soluciones innovadoras de sentido común para proteger nuestra salud y el medio ambiente, y asegurar una abundancia de alimentos saludables de los cuales podamos disfrutar en el nuevo año y generaciones venideras.

Jim Jones es el administrador adjunto de Seguridad Química y Prevención de Contaminación de la EPA.