¿Por qué es el agua potable un motivo de preocupación?
El agua potable proviene de fuentes de agua subterráneas, pozos, ríos, lagos, arroyos y represas. Los habitantes de las ciudades suelen beber agua de los lagos, ríos y represas que se filtra y se limpia en las plantas de tratamiento de agua. La población de las zonas rurales a menudo toma agua bombeada de un pozo particular.
Cada sistema de abastecimiento de agua potable se ve afectado por las actividades realizadas en los alrededores y a muchos kilómetros de distancia. Toda el agua contiene algunas impurezas. La Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA) fija los límites aceptables de más de 80 contaminantes que pueden existir en el agua potable y acarrean un riesgo para la salud humana.
El agua potable puede contaminarse por condiciones naturales y actividades de recreo, entre ellas, el uso de puertos deportivos y barcos. Puede contaminarse por pesticidas, fertilizantes, desechos de origen animal, sistemas de pozos sépticos dañados, tanques de almacenamiento de sustancias químicas en lugares subterráneos, donde se producen escapes, rellenos sanitarios, explotación minera y emisiones industriales al aire y al agua. El agua potable también puede contaminarse por la escorrentía de las granjas, tormentas e inundaciones en las zonas urbanas y en los sitios industriales o de construcción. También puede haber perturbadores endocrinos en el agua potable.
Las enfermedades transmitidas por el agua son un motivo de profunda preocupación para la salud humana porque muchas personas pueden verse afectadas si se contamina una fuente de agua potable. Las bacterias y los virus pueden causar efectos inmediatos o a corto plazo para la salud humana si se encuentran en el agua potable en altas concentraciones.
Pueden presentarse efectos crónicos más graves para la salud si las personas consumen por muchos años un contaminante en el agua potable en concentraciones superiores a las establecidas en las normas de la EPA. Entre los contaminantes con posibles efectos para la salud a largo plazo están los disolventes, los elementos radiactivos y los minerales como el arsénico. El agua potable contaminada puede causar efectos crónicos para la salud, tales como cáncer, afecciones del hígado o de los riñones y trastornos reproductivos. Esta descripción se basa en la información encontrada en los enlaces virtuales citados en la versión en inglés de este tema. Enlaces virtuales desde MedlinePlus (Biblioteca Nacional de Medicina) Agua potable Contaminación del agua Criptosporidiosis Enfermedades parasitarias Enfermedades transmitidas por alimentos Envenenamiento con plomo Infecciones por Escherichia coli Infecciones por Giardia Salud del viajero Seguridad con los alimentos
Enlaces adicionales Agua de beber (Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos) (PDF — 362 KB) Agua: Preguntas frecuentes (Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos) Calidad del agua potable (Organización Mundial de la Salud) Desinfección de emergencia del agua potable (Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos) El agua del grifo: lo que usted debe saber (Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos) (PDF — 1.63 MB) El agua potable y la salud: lo que usted debe saber (Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos) El medio ambiente y su salud: El agua potable (Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos)
Sustancias químicas en el agua potable ¿Se encuentran estas sustancias químicas en mi comunidad? Acetona Amoníaco Arsénico Benceno Bifenilos policlorados (BPC) Bisfenol A (BPA) Cloro Cloruro de polivinilo (PVC) Compuestos orgánicos volátiles (COV) Contaminantes orgánicos persistentes (COP) Cromo Diesel Disolventes Estireno Éteres difenílicos polibromados (PBDE) Formaldehído Ftalatos Gasolina Mercurio Perclorato Percloroetileno (PCE, PERC) Perturbadores endocrinos Pesticidas Plomo Propano Radón
Última actualización: 12 julio 2012
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