Las algas son pequeñas plantas sin raíz que crecen en el agua y son una parte importante de la red de alimentación marina. En su mayoría, las especies de algas son inocuas. Las flores de algas son dañinas cuando provienen de especies tóxicas que crecen rápidamente y forman agrupaciones que dan un color rojizo o marrón al mar. A veces se les llama “marea roja” o “marea marrón”.

Las flores de algas pueden bloquear la luz solar que necesitan otros microorganismos marinos. Cuando son extremadamente grandes pueden agotar el oxígeno en el lecho de los lagos, estuarios y ambientes costeros. Pueden causar daños a la industria pesquera, la calidad del terreno de la costa y la economía local.

Algunas especies de algas pueden producir toxinas que son dañinas para la vida marina, los peces, otros animales y el ser humano y aun llegar a causar la muerte. Los consumidores de mariscos contaminados con flores de algas pueden sufrir intoxicación, a veces muy grave, y afecciones respiratorias. Los departamentos de salud locales emiten advertencias cuando existen flores de algas dañinas. Siga los consejos que den sobre las actividades permitidas en la costa y el agua y sobre la inocuidad de los mariscos.

Esta descripción se basa en la información encontrada en los enlaces virtuales citados en la versión en inglés de este tema.

Última actualización: 9 noviembre 2012