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Notas de prensa

Declaraciones del Embajador Solomont sobre la cumbre EE.UU.-U.E., 2 de febrero de 2010

El embajador de EE UU en España, Alan D. Solomont, pronunció hoy estas breves declaraciones en Madrid en respuesta a varias preguntas durante un encuentro con los medios de comunicación.

Me gustaría aclarar varias cosas. Primero, que Estados Unidos no tiene un aliado más importante que Europa. Una Europa fuerte, una Europa unida es extremadamente importante para nuestra agenda común.

Segundo, que nuestra relación con España ya es muy sólida. Confío en que durante mi tiempo como embajador esta relación sea todavía más profunda. Cualquier observador tendría dificultad en encontrar un periodo en el que nuestros dos países hayan trabajado más estrechamente que el último año. El presidente Obama y el presidente Zapatero se han reunido en tres ocasiones y se volverán a encontrar esta semana y, como es bien sabido, el Rey visitará la Casa Blanca en febrero. Hemos presenciado también varias visitas de miembros del gobierno y de un elevado número de altos cargos de EE UU a España como también de España a EE UU. Tenemos un número importante de intereses comunes por los que me he comprometido a seguir trabajando con España.

El presidente Obama, la Casa Blanca, se han enfrentado a una difícil decisión sobre los viajes del presidente. Creo que es justo reconocer que durante su primer año de presidencia Obama ha trabajado mucho para restaurar la posición de Estados Unidos en el mundo, y en especial, para realizar un acercamiento hacia Europa. Ha venido seis veces a Europa durante el primer año de su mandato y ha dedicado gran parte de su tiempo a cambiar la imagen de Estados Unidos y a cambiar la orientación estratégica de nuestra política exterior.

Como es bien sabido, en este momento la agenda doméstica en Estados Unidos, igual que en España, es muy amplia. Trabajamos con ahínco para volver a la senda de la recuperación económica. El discurso sobre el Estado de la Unión fue un muy buen ejemplo de los temas en los que el presidente quiere centrar su atención durante el futuro más próximo.

Con toda sinceridad, creo que debemos centrar menos la atención en una reunión y analizar más el fortalecimiento de nuestros contactos y el nivel de interés mutuo que ya existe. La decisión de la Casa Blanca, francamente, no tiene nada que ver con nuestros contactos, con nuestros sentimientos de cercanía y de alianza hacia España o, por extensión, hacia la Unión Europea. Simplemente se trata de ordenar las prioridades del presidente en un programa de viajes complicado pero que de ninguna manera demuestra las prioridades del presidente en cuanto a su interlocución con Europa o España.

Trabajo al más alto nivel y con mucha cercanía con el gobierno español. Siento el mayor respeto por el deseo de este gobierno de tener una asociación fuerte con Estados Unidos y por las muestras de proximidad que este gobierno ha dado a Estados Unidos.

Haríamos todos bien en mirar el trabajo que realizamos juntos en vez de ver qué oportunidades hay para realizar una reunión. En términos de relación bilateral, para mí es mucho más importante que nuestros dos países sean capaces de identificar cuáles son nuestros intereses comunes: la lucha contra el terrorismo, la recuperación económica, los derechos humanos y el estado de derecho. En todos estos importantes y críticos asuntos internacionales, Estados Unidos y España trabajan codo con codo y continuarán haciéndolo. España seguirá siendo un socio crítico de Estados Unidos en la profundización de estos objetivos de interés mutuo.