Nueva York, NY- El Congresista Charles Rangel, agradeció hoy al Consejo Municipal de la Ciudad de Nueva York por aprobar una resolución que pide una enmienda constitucional para anular la decisión de la Suprema Corte en el caso Citizens United v. Federal Election Commission. El Consejo Municipal aprobó la resolución durante su período de sesiones el 4 de enero del 2012.

El voto del Consejo Municipal de la Ciudad de Nueva York es parte de un esfuerzo de toda la ciudad para llamar la atención a este asunto. Las localidades de Nueva York destacaron este asunto el 14 de junio del 2012 durante la Semana de Resolución. El fallo del 2010 de la Corte Suprema Corte les dio a las corporaciones, a los individuos ricos y a las influencias externas el poder de gastar cantidades ilimitadas de dinero en campañas políticas. Desde la decisión de la Corte Suprema los grupos Super PAC y las corporaciones han gastado cantidades registradas de dinero en las elecciones a nivel nacional. El gasto de las empresas ha disparado el ciclo electoral del 2010 por 427%, alcanzando los totales de $ 294.2 millones. La decisión permite que las organizaciones externas tengan un impacto sobre quien se elige para nuestras oficinas locales.

"La Corte Suprema decidió que las corporaciones tienen los mismos derechos de libertad de expresión que los individuos, lo cual es totalmente falso", dijo Rangel. "Este es el problema fundamental de nuestra política y es grande ver a los gobiernos estatales y locales levantarse contra el control de intereses especiales a lo largo de nuestras elecciones. Es mi creencia de que el gobierno debe representar a los individuos".

Rangel dio la bienvenida a una base de apoyo de cientos de funcionarios electos y organizaciones para revertir esta decisión. Los miembros del Congreso han introducido 20 enmiendas constitucionales para revertir Citizens United, al igual que 21 legislaturas estatales y más de 150 ciudades.

A partir del 23 de mayo de 2012, 555 grupos Super PAC reportaron haber recibido $216,143,964 de dólares y haber gastado $112,737,727 en el ciclo electoral del 2012. El gasto total en las elecciones del 2012 se predice llegar hasta $8 billones.

"La decisión del caso Citizens United no es más que una amenaza para nuestra democracia, con absolutamente ningún motivo de justificación. Nuestras elecciones locales sólo deben ser impulsadas por los votantes que se encuentren dentro de su distrito. Me parece inaceptable y inquietante que las organizaciones tienen la capacidad de decidir la participación de nuestras elecciones locales. Estoy orgulloso de que el Consejo Municipal de la Ciudad de Nueva York haya actuado a favor de las personas mediante la aprobación de esta resolución.” Concluyo Rangel.