24 diciembre 2009

Conferencia de mujeres empresarias Caminos hacia Prosperidad en las Américas

Podcast del 18 de diciembre de 2009

Audio: (18:03 minutos/16,6 MB)

A continuación una transcripción del audio emitido en podcast de varias entrevistas realizadas en la Conferencia de Mujeres Empresarias de Caminos hacia la Prosperidad en las Américas.

(comienza el texto)

En mayo de 2009, la secretaria de Estado Hillary Rodham Clinton anunció que Estados Unidos auspiciaría una conferencia sobre la mujer y la iniciativa empresarial como parte del programa Caminos hacia la Prosperidad en las Américas. La iniciativa Caminos hacia la Prosperidad crea una conexión entre los países del continente americano con la finalidad de identificar políticas y programas que garanticen que todos los ciudadanos compartan los beneficios de la integración económica y la globalización. La conferencia reunió a mujeres empresarias de toda América Latina en Washington del 7 al 9 de octubre.

A continuación, varias de las participantes en la conferencia comparten sus puntos de vista sobre la misma, los desafíos que enfrenta la mujer como empresaria y el valor de las asesorías.

Durante la conferencia se inició una red que conecta a mujeres empresarias de todo el Hemisferio Occidental. El apoyo a estas mujeres de negocios crea un efecto multiplicador no sólo para sus empresas, sino también para sus comunidades y la región en su totalidad.

Habla María Pacheco:

Mi nombre es María Pacheco, y soy de Guatemala. Soy propietaria de una compañía llamada Kiej de los Bosques.

Narrador:

Pacheco es una de las muchas participantes en la conferencia que viajaron a Washington para ayudar con el lanzamiento de la red. Como muchas empresarias, aporta una convicción y pasión por su trabajo que va más allá de simplemente operar una empresa.

Habla María Pacheco:

Como toda empresaria, tengo un sueño, el cual es el de ver hecho realidad que comunidades en todo el mundo vivan felices, haciendo de sus sueños una realidad, rodeadas de hermosos entornos y un lugar donde exista la armonía en todo el mundo. Además, nací en Guatemala en la época de la guerra. Para mí, es como si este sueño hubiese sido la dirección a la cual quiero ir, aunque el punto inicial han sido las comunidades rurales en Guatemala, en especial las mujeres que tuvieron que enterrar a sus hijos porque había una guerra, que tuvieron que enterrar a sus hijos porque eran pobres. No había acceso a nada, y cuando se observa ese dolor, realmente − para mi significó que no quisiera vivir en un país que permitiera esto. Al principio era combatirlo, y ahora es tan sólo aprender que existen maneras, estupendas maneras, de transformar la realidad, y eso tiene que ver con personas que trabajan juntas. Y esa es la razón por la que estamos tan emocionadas de conocer a mujeres increíbles de la región, al igual que a mujeres asombrosas de Estados Unidos también.

Habla Marcela Echavarría:

Soy Marcela Echavarría, y soy de Colombia. Me dedico al negocio de adoptar la sostenibilidad en el mercado de productos de lujo por medio de encontrar artesanos que tengan bellas tradiciones ancestrales, y encontrarles mercados utilizando un salón de exposición que tenemos en Nueva York y, por medio de sus productos, expresar su cultura y mantenerla viva.

Narrador:

Echavarría es un ejemplo vivo de cómo tomar una oportunidad y presentar sus ideas, aún sin una garantía de éxito; es la esencia misma de la iniciativa empresarial.

Habla Marcela Echavarría:

Básicamente asistí a la escuela aquí [en Estados Unidos] y estudié historia y literatura, y quería dedicarme a escribir. Regresé a Colombia después de graduarme en 1995, y deseaba escribir sobre las cosas que el mundo está perdiendo: tradiciones y alimentos. Fue entonces que impartí un seminario organizado por la UNESCO en Catacaos, Perú, que es un poblado conocido por su filigrana y en el que había personas de cinco países diferentes, cinco países de la región andina, una combinación de artesanos y diseñadores. Estas personas realizaban obras muy hermosas y pensé, que esos productos... ¿dónde iban a terminar? porque el mercado para la filigrana es verdaderamente un nicho. Es probable que esos productos vayan a terminar en el almacén de la UNESCO en París o quién sabe dónde. Así que fui a un cibercafé en la ciudad y escribí unos mensajes de correo electrónico a info@donnakaran.com y info@ralphlauren.com diciéndoles “Hola, mi nombre es Marcela Echavarría y tengo la siguiente idea: Pienso que el intercambio de talento, conocimiento y poder económico entre el Norte y el Sur debe ser equilibrado de forma diferente, y tengo esta idea llamada SURevolution”. Mi idea es correr el riesgo, saltar a la “piscina” sin siquiera saber si tiene agua. Después ya veré cómo resuelvo, como se resuelve lo demás.

Habla Janet Cronick:

¿Cómo decidí convertirme en empresaria? Bueno, yo provengo del mundo de la empresa. Tengo experiencia en recursos humanos, y después de más de 12 años estaba lista para seguir los pasos de mi padre, que tenía su propia empresa. Soy oriunda de El Salvador, vine a Estados Unidos cuando la guerra civil estalló en el país y mi familia se reubicó en Estados Unidos; y siempre he querido seguir sus pasos.

Narrador:

Las mujeres que asistieron a la conferencia en Washington tienen antecedentes muy variados. Janet Cronick tiene experiencia en administración empresarial. Pero, como ella lo explica, aún en Estados Unidos las mujeres empresarias confrontan desafíos.

Habla Janet Cronick:

Los asuntos de la mujer no son solamente importantes en América del Norte, en realidad lo son en todo el mundo. He participado en la fundación de una organización del condado de Orange, en California. Soy cofundadora de la sucursal correspondiente a Orange County de la Asociación Nacional de Empresarias Latinas y la gente me pregunta siempre lo mismo: ¿por qué han fundado una organización que se enfoca concretamente en la mujer? Y una de las respuestas que damos es que es distinto cuando una cuenta con el apoyo de sus pares y no porque sienta que, como lo diría, que es una víctima. Creo que es ahí por donde una tiene que comenzar, no puede pensar que una es la víctima. Pero es cierto que afrontamos dificultades. Tenemos que establecer esa credibilidad. Históricamente, si un hombre abre un negocio le es más fácil decir, bueno, es un HOMBRE de negocios. Sabe una cosa, el término MUJER de negocios, piénselo, es normal. Hace veinte o veinticinco años la expresión mujer de negocios era una novedad en nuestro vocabulario. Así que creo que estamos logrando progresos. Definitivamente, no hemos alcanzado la meta aún, pero creo que hemos logrado hacer algunos cambios positivos y eso es lo que hemos compartido con las mujeres latinoamericanas que han asistido a la conferencia.

(music fade out)

Narrador:

La embajadora en misión especial del Departamento de Estado de Estados Unidos para Asuntos Mundiales de la Mujer, Melanne Verver, inspiró a las participantes de la conferencia con su discurso. Subrayó la importancia de las redes, las asesoras y del concepto de “ayudar por adelantado”, indicando que las empresarias necesitan apoyarse unas a otras a medida que generan negocios y oportunidades. Como una de las enviadas observó, es hora de comprender el potencial sin explotar del “poder colectivo de la mujer”. Parte del desafío para las empresarias es el de administrar asuntos tales como el equilibrio de la vida laboral y familiar al tiempo que también se generan ingresos, al igual que crear empresas en funciones tradicionalmente dominadas por el hombre. Janet Cronick viene de California y participó como asesora en la conferencia Caminos hacia la Prosperidad.

Habla Janet Cronick:

¿Sabe una cosa?, es curioso, porque los temas son los mismos, ya sea en América Latina como aquí en Estados Unidos, en general encaramos los mismos problemas. Algunos de estos son: el acceso al capital, evidentemente cuando una mujer trata de abrir un negocio nuevo o cuando quiere ampliar su negocio el acceso al capital es, generalmente, la primera inquietud. La asistencia técnica, que es el saber cómo redactar un plan de negocios, en muchas ocasiones, y no sólo en América Latina sino hasta aquí en Estados Unidos, la gente abre un negocio y ni siquiera tiene un plan de negocios. Ese es un tema en el que yo personalmente me enfoco durante los talleres que dicto cuando viajo. Es necesario diseñar un plan de negocios. Una de las cosas que veo cuando la gente me dice, bueno aquí abrimos un negocio porque constituye una necesidad, no porque sea un lujo. Yo contesto que esto lo entiendo, pero que se debe tener en cuenta que la mayoría de los negocios fracasa porque no tiene un plan, y que si se invierte el tiempo en realizar una investigación de mercado para ver si se necesita el producto, para ver si existe un mercado para éste, entonces creo que tendrán mejores posibilidades.

Habla Theresa Daytner:

Mi nombre es Theresa Daytner, mi compañía se llama Daytner Construction Group y nos dedicamos a la construcción comercial.

Narrador:

Theresa Daytner es presidenta y directora ejecutiva de la empresa Daytner Construction Group, con sede en Maryland. Daytner es una verdadera empresaria, ya que ha creado varias empresas que van desde construcción y reparación de tejados hasta la planificación fiscal. Habló con nosotros sobre el riesgo empresarial y la razón por la que conferencias como la de mujeres empresarias como esta, son tan valiosas.

Habla Theresa Daytner:

El riesgo tiene muchas definiciones diferentes. Considero que toda mujer que ha llegado aquí procedente de otro país, ha tomado cierto nivel de riesgo en cuanto a que su vida cambiará drásticamente, y busca hacer frente a viejos estereotipos, enfrentar su propia sensación de culpa, o cualquiera que sea el caso. Considero que el riesgo… tiene definiciones muy amplias. Pienso que es muy personal, debido a mi propia perspectiva de que siempre existe una opción B, una opción C o una opción D. En cuanto al riesgo, algunas personas harían de él una parte muy grande en su proceso de tomar decisiones, y yo lo reduzco. Así que esa es la forma en que tiendo a operar respecto a la mayoría de mis decisiones, que es ponerlo en su lugar. Nuestras reacciones al riesgo tienen que ser apropiadas, y si respondemos constantemente de una forma excesiva a cosas pequeñas, entonces considero que tenemos que cambiar la manera en que damos prioridad al lugar de nuestro esfuerzo.

Narrador:

Conferencias como la celebrada en Washington en octubre, que es parte de la iniciativa Caminos hacia la Prosperidad en las Américas, son una gran manera de ayudar a las aspirantes a empresarias a alcanzar el éxito al compartir formas de gestionar esta clase de asuntos. Para las empresarias, el riesgo puede provenir de actitudes culturales hacia la mujer en los negocios, del acceso a recursos educativos y financieros, o de cualquier otra fuente. Reunir a empresarias experimentadas con aspirantes a empresarias resulta en un conocimiento útil que se transmite a las demás. La empresa de Theresa Daytner se dedica a la construcción, que en Estados Unidos, es tradicionalmente una industria dominada por hombres.

Habla Theresa Daytner:

El sector y servicio o producto es, por supuesto, prácticamente dominado por hombres. Sin embargo, los temas sobre la operación de una empresa son muy similares, ya sea que se refieran a la agricultura, las ventas al por menor o por mayor, o a productos alimenticios; y, otra vez, desde esa perspectiva, existen muchas más similitudes que diferencias en términos de operación en la pequeña empresa. Por esto mismo, me he enfocado menos en lo que hacemos y más en la razón por la qué lo estamos haciendo y en la forma cómo lo hacemos; y existen muchos paralelismos. Cuando se habla de mujeres empresarias, compartimos muchos de los mismos asuntos. Algunos de ellos son estigmas culturales de ser mujer y ser líder, así como de tratar de administrar y equilibrar una vida y la familia con la labor que realizamos.

Narrador:

Habla María Pacheco de Guatemala

María Pacheco:

Primero, considero que se trata de la idea de ver las cosas de manera distinta y, de hecho, sólo de tomarnos a nosotras mismas más en serio. Pienso que como empresarias, en algunas ocasiones sentimos que no necesitamos madurar, por lo que estoy tomándome en serio esa parte de mejorar como gerente general, de que se trata más de ser un líder y de qué es lo que hace un líder para su equipo y cómo trabajan juntos, y lo motiva, y cree, y logra que los integrantes del equipo crean en sí mismos. Ha sido fabuloso en esta conferencia ver que hay cosas que piensas como “ah, tal vez sólo soy yo”, y cuando se observa la tendencia se puede decir: “Bueno, esto es algo que tengo que valorar, como la intuición”, así que me llevo conmigo muchas cosas, la conferencia ha sido muy productiva en todos los niveles.

Narrador:

Habla Janet Cronick de California

Janet Cronick:

Así que es una lucha, pero poco a poco, compartiendo mis experiencias con ellas y explicándoles que afrontamos las mismas dificultades, ya sea que estén en Colombia, Argentina, la República Dominicana, o en cualquier otro lugar, generalmente tenemos que afrontar los mismos temas aquí en Estados Unidos también.

(music fade out)

Narrador:

Las empresarias cuentan con muchos recursos donde pueden encontrar información sobre cómo operar una empresa, pero a pesar de la enorme cantidad de recursos, sólo la experiencia puede realmente dar a las empresarias la sabiduría que necesitan para alcanzar el éxito. Aquí es donde la función de los programas de asesoría tiene un gran valor. Una asesora sirve como una consejera de confianza a las nuevas empresarias. La relación asesora-alumna es especial debido a que se desarrolla a través de un período de tiempo. Consiste en la transferencia de principios para tomar decisiones y de otros elementos del negocio que no se pueden aprender en una escuela. El aprendizaje es de hecho un proceso bidireccional; las asesoras desarrollan ideas nuevas, devuelven el apoyo a su comunidad y desarrollan su capacidad de administración y asesoría. Habla Marcela Echavarría de Colombia.

Habla Marcela Echavarría:

De hecho, creo muy firmemente en el principio de la asesoría, y la razón es porque así es como opera el mundo artesanal. Por ejemplo, lo que hacemos en Colombia, es que contamos con una red completa de grupos liderada por maestros artesanos que asesoran a ex combatientes que participan en el proceso de paz de Colombia. Hemos descubierto que su relación a nivel personal es clave. Quiero decir que comparten y se asocian, y además porque es una trayectoria muy solitaria el ser un empresario, y no lo veo como que soy una asesora. De hecho, estoy muy contenta de pertenecer a una red y de compartir, de poder dialogar sobre partes de la trayectoria las cuales no es posible conversar con personas que no lo han intentado.

Narrador:

Habla Theresa Daytner de Maryland en Estados Unidos

Habla Theresa Daytner:

Evidentemente pienso que hay mucho que podemos aprender mutuamente entre las asesoras y las alumnas y las demás personas en el salón de esta conferencia; todas podemos compartir unas con otras. Pero considero que será un proceso bidireccional. Asimismo, el aprendizaje de las panelistas y enviadas es simplemente increíble. Porque en algunas ocasiones hay cosas que se han aprendido antes y que hemos olvidado, y es agradable alejarse de nuestro negocio y tomar ese tiempo para tratar de eliminar — cualesquiera que sean los factores limitadores que no nos permiten lograr nuestros objetivos, eliminar la emoción y despegarse de alguna manera de su empresa de forma que la observe desde una perspectiva totalmente diferente. Y eso es lo que creo que esta conferencia me ha permitido hacer. Estoy muy orgullosa de algunas de estas mujeres y desde dónde han venido, lo que me inspira a intentarlo con más ánimo.

Narrador:

Algunas de las empresarias visitaron otras ciudades en Estados Unidos para observar negocios de éxito operados por mujeres. Todas las asesorías continuarán durante un año. En ese tiempo, las asesoras visitarán a sus socias en sus países de origen para brindarles más apoyo. Se ha establecido un sitio web de la iniciativa Caminos hacia la Prosperidad, donde las empresarias pueden relacionarse en línea para apoyar el desarrollo a largo plazo de una red de mujeres empresarias en todos los países que participan en la iniciativa. Habla María Pacheco de Guatemala.

Habla María Pacheco:

Estoy asociada con una mujer guatemalteca que se dedica a producir abono orgánico. Yo fui agricultora orgánica durante 12 años y estaba muy contenta. Aunque pienso que lo que me gusta más es que, como empresarias, soñamos con este asombroso mundo, pero al principio cuando uno está solo, se cree que una misma tiene que hacerlo todo. Entonces se conoce a gente joven como a las mujeres que hemos conocido, y son personas jóvenes que en realidad piensan de diferente manera sobre el medio ambiente, las comunidades, sobre cómo construir un país mejor, así que es estupendo observar a estas mujeres y decir que, si existe algo por lo que yo haya pasado que también les pueda ayudar, es decirles principalmente que crean en sí mismas y en su sueño para realmente intentarlo.

(termina el texto)

(Distribuido por la Oficina de Programas de Información Internacional del Departamento de Estado de Estados Unidos. Sitio en la Web: http://www.america.gov/esp )