Una vez que el adulto joven ha mostrado interés en el Servicio, un buen paso siguiente es una visita a un reclutador. El trabajo del reclutador es encontrar candidatos calificados para sus respectivos Servicios y brindarles información sobre ellos y explicar las razones por las que conviene alistarse a las Fuerzas Armadas. Reunirse con un reclutador no obliga a nadie a servir; es simplemente una oportunidad para hacer preguntas y recibir respuestas sinceras. Es de esperarse que el reclutador hable acerca de las oportunidades en el Servicio de manera positiva pero realista.
Los reclutas potenciales pueden y deben hablar con los reclutadores de distintos cuerpos para comparar las oportunidades. No te sorprendas si el reclutador quiere que padres e hijos estén presentes en la conversación. Los reclutadores saben que el apoyo familiar influye mucho en la decisión de alistarse, por eso animan a todos a pedir información.
No es una mala idea escribir una lista de preguntas antes de reunirse con el reclutador. Si no has tenido tiempo de hacerlo, revisa preguntas para hacerle al reclutador.
Comparta sus comentarios.
cerrarPautas de envío