Retiremos al fuego
Los hechos hablan por sí mismos: En Estados Unidos las personas mayores de 65 años son uno de los grupos con mayor riesgo de morir en un incendio. En promedio, mueren 1,000 personas de 65 años y más en incendios. La tasa de muerte en incendios de personas mayores de 85 años es cinco veces más alta que para el resto de la población. Sin embargo, existen varias medidas de precaución que pueden tomar las personas mayores en Estados Unidos para reducir considerablemente las probabilidades de convertirse en víctimas de un incendio.
Entender los riesgos
¿Por qué las personas mayores están en riesgo?
Las personas mayores en Estados Unidos tienen riesgo de sufrir heridas y morir en incendios por varias razones:
- Pueden tener menos capacidad para reaccionar con la rapidez necesaria en una emergencia a causa de un incendio.
- Pueden tomar medicamentos que afectan su capacidad para tomar decisiones rápidas.
- Muchas personas mayores viven solas y cuando ocurre algún accidente no hay nadie a su alrededor que pueda ayudarlas.
¿Qué riesgos de incendio afectan a las personas mayores?
- Los accidentes en la cocina son la causa principal de las heridas relacionadas con los incendios entre las personas mayores en Estados Unidos. La cocina es uno de los lugares potencialmente más peligrosos y de mayor actividad de la casa.
- El uso sin precaución de materiales para fumar es la causa principal de muerte en incendios entre las personas mayores en Estados Unidos.
- Los equipos de calefacción son responsables de gran parte de los incendios en los hogares de personas mayores. Debe tenerse especial precaución cuando se usen calentadores alternativos como estufas a leña o calentadores eléctricos.
- El cableado defectuoso es otra de las causas principales de incendios que afectan a las personas mayores. Las casas más antiguas pueden tener serios problemas de cableado, desde electrodomésticos antiguos con cables en mal estado hasta enchufes sobrecargados.
Consejos de seguridad para las personas mayores en Estados Unidos
- Incendios en la cocina. La mayoría de los incendios en la cocina se producen porque se descuida la comida que está sobre la estufa o dentro del horno. Si debe salir de la cocina mientras está cocinando, lleve consigo una cuchara o agarradera para ollas calientes para recordar que debe regresar a la cocina. Cuando cocine, nunca use mangas amplias o colgantes que puedan prenderse fuego fácilmente. Caliente el aceite de cocina gradualmente y tenga mucha precaución al freír en abundante cantidad de aceite. Si un sartén se prende fuego, cúbralo con una tapadera. Jamás eche agua sobre el fuego provocado por grasa. Jamás use la estufa para calentar la casa.
- Calentadores de espacio. Compre únicamente calentadores que hayan sido evaluados por un laboratorio nacional reconocido, como Underwriters Laboratories (UL). Para cada calentador, use solamente el combustible recomendado por el fabricante. No use calentadores eléctricos en el baño ni alrededor de otros lugares húmedos. No ponga a secar ni coloque objetos sobre el calentador. Mantenga los combustibles alejados del calor.
- Cigarrillo. No descuide los materiales para fumar. Use ceniceros de base ancha y estables, difíciles de voltear. Si es inestable, no sirve. El cigarrillo realmente debe apagarse por completo en un cenicero. Antes de desechar las colillas y cenizas de cigarrillos, remójelas en agua. Jamás fume mientras usa oxígeno o si hay alguna fuente de oxígeno cerca, aunque esté apagada. El oxígeno puede ser explosivo y hace que el fuego arda con más calor y más rápido. Nunca fume en la cama.
- Planifique su escape. Conozca al menos dos maneras de salir de cada habitación. Si usa un andador o silla de ruedas, revise todas las salidas para asegurarse de que éstos pasen por las puertas. Haga todas las modificaciones que sean necesarias, como colocar rampas de salida y ensanchar las puertas, para facilitar la salida en caso de emergencia. A menos que los bomberos se lo ordenen, jamás use un elevador durante un incendio.
- No se aísle. Hable con sus familiares, el administrador del edificio, o un vecino acerca de su plan de escape en caso de incendio y practíquelo con ellos. Llame al número de teléfono que no sea de emergencia del departamento de bomberos de su localidad y explique cuáles son sus necesidades especiales.
- Instale y mantenga detectores de humo Contar con un detector de humo que funcione aumenta enormemente sus probabilidades de sobrevivir a un incendio. Asegúrese de instalar detectores de humo que funcionen en cada piso de la casa y fuera de las áreas para dormir. Pruébelos una vez al mes y cambie las baterías al menos una vez al año. Es recomendable que quienes cuidan de otras personas revisen los detectores de humo de las personas que no pueden hacerlo por sí mismas. Lea más sobre detectores de humo