Su doctor le ha prescrito nalbufina, un analgésico, para aliviar el dolor. El medicamento será inyectado a un músculo grande (como la nalga o cadera) o en forma intravenosa (en la vena).
Usted probablemente recibirá nalbufina cada 3 a 6 horas, según sea necesario, para el dolor. Su doctor también podría prescribirle otros medicamentos para el dolor que le hagan sentirse más cómodo. Este medicamento también puede ser prescrito para otros usos; pídale más información a su doctor o farmacéutico.
El personal de asistencia médica (doctor, enfermera o farmacéutico) podrá medir la eficacia y los efectos secundarios del tratamiento usando pruebas de laboratorio y exámenes físicos. Es importante cumplir con todas las citas con su doctor y el laboratorio. La duración del tratamiento dependerá de cómo responden sus síntomas al medicamento.
Antes de que administre este medicamento, mire la solución cuidadosamente. Debe ser de color claro y libre de partículas flotantes. Oprima suavemente la bolsa u observe el envase de la solución líquida para asegurarse que no haya ninguna fuga. No use la solución si está descolorida, si contiene partículas o si hay fugas en la bolsa o en el envase. Use una solución nueva, pero muestre la dañada a algún miembro del personal médico.
Es importante que usted use el medicamento exactamente como se indica. La nalbufina puede producir dependencia. No use una dosis mayor, ni con más frecuencia, ni por más tiempo que lo prescrito por su doctor. No cambie su régimen de dosificación sin conversar con el personal médico.
mareos
vértigo
somnolencia (sueño)
malestar estomacal
vómitos
sensación de sequedad en la boca
cefalea (dolor de cabeza)
retortijones
picazón en la piel
sensación de gusto amargo
confusión o alucinaciones
sensación de pesadez
debilidad inusual
dificultad para respirar
desmayos
Su médico probablemente le dará un suministro de varios días del medicamento y le dirá cómo preparar cada dosis. Almacene los frascos a temperatura ambiente.
Almacene el medicamento exactamente como se indica. Asegúrese de entender las instrucciones necesarias para almacenar el medicamento de forma adecuada.
Mantenga los suministros en un lugar limpio y seco cuando no los necesite y todos los medicamentos fuera del alcance de los niños. El personal médico le dirá cómo desechar las agujas, jeringas, tubos y envases usados para evitar accidentes.
sensibilidad
sensación de calor
irritación
drenaje
enrojecimiento de la piel
inflamación
dolor
Documento actualizado - 01/09/2010
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