¿Cuáles son los síntomas?
Es posible que la mujer con EIP no presente ningún síntoma o que los síntomas sean muy leves para ser notados (pero el daño a los órganos todavía está ocurriendo). Esto es especialmente cierto cuando la EIP es causada por la clamidia. Cuando hay síntomas se puede sentir:
- Ardor o dolor al orinar
- Nausea y vomito
- Fiebre y escalofríos
- Sangrado entre periodos menstruales
- Flujo vaginal con olor
- Dolor al tener sexo
Reduzca el riesgo
Hay varias cosas que las mujeres pueden hacer para disminuir el riesgo de EIP:
- Evitar las duchas vaginales
- Usar condones u otras barreras de látex (como las dentales) para cada acto sexual (oral, anal, y vaginal). La barrera tiene que colocarse antes de que el contacto sexual lleve lugar.
- Tenga sexo con una sola pareja (que solo tiene sexo con usted)
- Hable con su médico para ver que pruebas para enfermedades de transmisión sexual (ETS) recomienda. Las mujeres sexualmente activas y menores de 25 años deben ser examinadas una vez al año para la clamidia. Cualquier mujer con factores de riesgo (nuevos o múltiples parejas, sexo sin protección) deben ser examinadas anualmente contra la clamidia y la gonorrea.
- Hable con su pareja
Dado que la EIP es frecuentemente causada por la clamidia o gonorrea, las parejas sexuales de personas con EIP deben ser examinadas y tratadas. Para evitar la reinfección, no tenga sexo hasta que ambos hayan sido tratados.
Exámenes/Diagnostico
No existe una prueba específica para la EIP. El diagnostico usualmente se realiza basado en los síntomas que incluyen el dolor abdominal bajo, fiebre y flujo vaginal. La infección puede ser difícil de diagnosticar debido a los síntomas leves que son similares a los que se siente con otras enfermedades y condiciones. Todas las mujeres diagnosticadas con EIP deben ser examinadas por clamidia y gonorrea, las causas más comunes de EIP. También se anima a realizar pruebas de VIH.
Cuando el medico sospecha EIP, puede ordenar exámenes como ecografías para chequear los tubos de Falopio o una laparoscopia que utiliza un pequeño tubo insertado en una incisión cerca del abdomen para ver los órganos internos y tomar muestras.
Tratamiento
La EIP se trata con antibióticos de manera oral o por inyección.
Para limitar el daño a los órganos reproductivos, el tratamiento debe empezar temprano y todos los medicamentos deben ser tomados (incluso si los síntomas desaparecen). Los médicos harán un chequeo a la mujer 2-3 días después de empezar el tratamiento para asegurarse que el medicamento está funcionando.
La hospitalización para tratar la EIP es recomendada si la mujer:
- Está muy enferma (nausea, vómito y fiebre alta)
- Está embarazada
- No responde o no puede tomar medicamentos de manera oral
- Tiene abscesos (área infectada con pus) en los tubos de Falopio o los ovarios.
¿Cuáles son las complicaciones que trae la EIP?
Sin tratamiento, se puede desarrollar tejido en los tubos de Falopio, bloqueándolos y previniendo que la mujer se quede embarazada. Cuando el tejido bloquea los tubos de Falopio, el ovulo fertilizado no puede pasar a través del tubo hasta el útero. Esto se llama un embarazo ectópico. Esto puede causar que un tubo estalle y exista mucho sangrado y dolor.
La EIP que no se trate también puede causar dolor pélvico crónico. Alrededor del 10% de las mujeres con EIP se vuelven infértiles y el riesgo aumenta si la EIP se diagnostica más de una vez.