Institutos Nacionales de la Salud
- El organismo de los NIH principalmente responsable por realizar investigaciones científicas sobre Abscesos es el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas
Un absceso es una cavidad con acumulación de pus. Se puede padecer de éste en casi cualquier parte del cuerpo. Cuando un área se infecta, el sistema inmunológico del organismo intenta combatirla. Los glóbulos blancos se dirigen hacia el área infectada, se acumulan dentro del tejido lesionado y causan inflamación. Durante este proceso se forma el pus. El pus es la acumulación de líquido, glóbulos blancos vivos y muertos, tejido muerto y bacterias u otras sustancias extrañas al cuerpo.
Las bacterias, los virus, los parásitos y los objetos deglutidos pueden causar la formación de abscesos. Los abscesos en la piel son fáciles de detectar. Son zonas enrojecidas, hinchadas y dolorosas. Los abscesos dentro de su cuerpo pueden quizá no ser obvios y pueden lesionar órganos, incluso el cerebro, los pulmones y otros. Los tratamientos incluyen drenarlos y tomar antibióticos.