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¿Cómo se trata y se controla el asma?

El asma es una enfermedad prolongada que no tiene cura. El objetivo del tratamiento del asma es controlar la enfermedad. El buen control del asma logrará lo siguiente:

  • Prevenir los síntomas crónicos y molestos, como la tos y la dificultad para respirar
  • Disminuir la necesidad de usar medicinas de alivio rápido (ver más adelante)
  • Ayudarle a mantener los pulmones en buen funcionamiento
  • Permitirle mantener su nivel normal de actividad y dormir toda la noche
  • Prevenir ataques de asma que podrían ocasionar una visita al servicio de urgencias o una hospitalización

Colabore activamente con su médico con el fin de controlar su asma o el asma de su niño. Los niños de 10 años o más —y los más pequeños que puedan hacerlo— también deben participar activamente en el cuidado de su enfermedad.

Participar activamente en el control del asma implica lo siguiente:

  • Colaborar con el médico para tratar otros problemas de salud que puedan interferir con el control del asma.
  • Evitar las cosas que le empeoren el asma (los desencadenantes del asma). Sin embargo, un desencadenante que no se debe evitar es la actividad física. La actividad física es un componente importante de un estilo de vida saludable. Pregúntele al médico acerca de medicinas que le ayuden a permanecer activo.
  • Colaborar con el médico y con otros profesionales de la salud para crear y seguir un plan de acción contra el asma.

Un plan de acción contra el asma le sirve de guía para tomarse sus medicinas correctamente, evitar los factores que desencadenan el asma (a excepción de la actividad física), saber a qué grado está controlada la enfermedad, responder a las crisis de asma y buscar atención médica de urgencias cuando sea necesario.

El asma se trata con dos tipos de medicinas: medicinas de control a largo plazo y medicinas de alivio rápido. Las medicinas de control a largo plazo sirven para disminuir la inflamación de las vías respiratorias y prevenir los síntomas del asma. Las medicinas de alivio rápido o "de rescate" alivian los síntomas de asma que aparezcan.

El tratamiento inicial dependerá de la gravedad de su enfermedad. El tratamiento de seguimiento dependerá de lo bien que el plan de acción esté controlando los síntomas y previniendo los ataques de asma.

El grado de control del asma puede variar con el tiempo y depender de cambios en el medio ambiente de la casa, la escuela o el trabajo. Estos cambios pueden alterar la frecuencia a la que usted está expuesto a los factores que le empeoran el asma.

Es posible que el médico necesite aumentarle la medicina si el asma no está controlada. Por otra parte, si el asma está bien controlada durante varios meses, el médico puede disminuirle la medicina. Estos ajustes de la medicina lo ayudarán a mantener el mayor control posible con la menor cantidad necesaria de medicina.

El tratamiento del asma en ciertos grupos —como los niños, las mujeres embarazadas o las personas en las que el ejercicio provoca el asma— deberá ajustarse para que se amolde a las necesidades de estas personas.

Siga el plan de acción contra el asma

Usted puede colaborar con el médico para crear un plan de acción contra el asma para su caso particular. El plan describirá los tratamientos diarios, como qué medicinas necesita y cuándo debe tomarlas. Explicará también cuándo hay que llamar al médico o ir al servicio de urgencias.

Si su niño tiene asma, todas las personas que lo cuidan deben estar enteradas del plan de acción. Se incluyen las niñeras y las personas que trabajan en la guardería, la escuela o el campamento al que el niño asista. Estas personas pueden ayudarle a su hijo a seguir el plan de acción.

El Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre (NHLBI, por sus siglas en inglés) tiene en su sitio web un ejemplo de un plan de acción: Asthma Action Plan (solo en inglés).

Evite las cosas que le pueden empeorar el asma

Muchas cosas corrientes pueden precipitar o empeorar los síntomas del asma. Estas cosas se conocen también como desencadenantes del asma. En cuanto usted sepa cuáles son estas cosas, podrá tomar medidas para controlar muchas de ellas. Si desea más información sobre los desencadenantes del asma, consulte la sección "¿Cuáles son los signos y síntomas del asma?"

Por ejemplo, la exposición al polen o a la contaminación del aire puede empeorarle el asma. Si es así, trate de limitar el tiempo que pasa al aire libre cuando haya altas concentraciones de estas sustancias allí. Si el pelaje de los animales desencadena los síntomas de asma, no tenga mascotas en su casa ni en su cuarto.

Un desencadenante del asma que no se debe evitar es la actividad física. La actividad física es un componente importante de un estilo de vida saludable. Pregúntele al médico acerca de medicinas que le ayuden a permanecer activo.

En la página 2 del plan de acción contra el asma (Asthma Action Plan) del NHLBI encontrará muchos consejos útiles para controlar las cosas que le empeoran el asma. (solo en inglés).

Si sus síntomas de asma están claramente relacionados con alérgenos y usted no puede evitar la exposición a ellos, el médico puede aconsejarle que se aplique inyecciones desensibilizadoras para el alérgeno específico que le desencadena los síntomas de asma.

Tal vez tenga que ver a un especialista si está pensando en aplicarse inyecciones desensibilizadoras para las alergias. Estas inyecciones pueden disminuir o prevenir los síntomas del asma, pero no curan la enfermedad.

Varios problemas de salud pueden hacer que el asma sea más difícil de controlar. Estos problemas pueden consistir en congestión nasal, sinusitis, enfermedad por reflujo, estrés psicológico y apnea del sueño. El médico también puede tratarlos.

Medicinas

Su médico tendrá en cuenta muchas cosas cuando decida qué medicinas para el asma son más adecuadas para usted. Por lo general, los médicos recetan las medicinas de una manera gradual. Su médico verá qué tan bien funciona una medicina en su caso y luego ajustará la dosis o cambiará la medicina, si es necesario.

Las medicinas para el asma se pueden tomar en forma de pastillas, pero la mayoría de ellas se toman mediante un dispositivo llamado inhalador. El inhalador le permite a la medicina llegar directamente a los pulmones.

No todos los inhaladores se usan de la misma manera. Pídale al médico o a otro profesional de salud que le muestre la manera correcta de usar su inhalador. Pídale al médico en cada consulta que compruebe cómo está usando usted el inhalador.

Medicinas de control a largo plazo

La mayoría de las personas que tienen asma necesitan tomar a diario medicinas de control a largo plazo para prevenir los síntomas. Las medicinas a largo plazo que son más eficaces disminuyen la inflamación de las vías respiratorias.

Estas medicinas se toman durante mucho tiempo para evitar que los síntomas se presenten. No proporcionan un alivio rápido de los síntomas.

Corticoesteroides inhalados. Los corticoesteroides inhalados son las medicinas preferidas para el control del asma a largo plazo. Estas medicinas son la alternativa más eficaz para el alivio a largo plazo de la inflamación e hinchazón que hace que las vías respiratorias sean sensibles a ciertas sustancias que se inhalan.

Al reducir la inflamación se previene la reacción en cadena que causa los síntomas del asma. La mayoría de las personas que toman estas medicinas a diario dicen que tanto la intensidad como la frecuencia de los síntomas disminuyen considerablemente.

Por lo general, los corticoesteroides inhalados no son peligrosos si se toman según las indicaciones del médico. Estas medicinas son muy diferentes de los esteroides anabólicos ilegales que algunos atletas usan. Los corticoesteroides inhalados no son adictivos, aunque se tomen todos los días durante muchos años.

Sin embargo, como muchas otras medicinas, los corticoesteroides inhalados producen efectos secundarios. La mayoría de los médicos están de acuerdo en que los beneficios de tomar corticoesteroides inhalados y prevenir los ataques de asma superan con mucho el riesgo de los efectos secundarios.

Uno de los efectos secundarios frecuentes de los corticoesteroides inhalados es una infección de la boca llamada candidosis bucal o muguet. Es posible que usted pueda usar un espaciador o inhalocámara para evitar la candidosis bucal. El espaciador o inhalocámara se acopla con el inhalador y evita que la medicina caiga en la boca o en la parte posterior de la garganta.

Hable con el equipo de profesionales de salud que lo atiende si tiene preguntas sobre cómo usar el espaciador o la inhalocámara. Enjuagarse la boca con agua después de tomar los corticoesteroides inhalados también puede disminuir el riesgo de contraer candidosis bucal.

Si su asma es grave, es posible que tenga que tomar corticoesteroides en forma líquida o de pastillas durante períodos cortos para controlar el asma. Si estas medicinas se toman por mucho tiempo elevan el riesgo de sufrir cataratas y osteoporosis.

Las cataratas consisten en empañamiento del cristalino del ojo. La osteoporosis es un trastorno que debilita los huesos y aumenta las probabilidades de sufrir fracturas.

El médico puede darle otra medicina de control del asma a largo plazo con el fin de bajarle la dosis de corticoesteroides. O es posible que le aconseje que tome calcio y vitamina D para proteger los huesos.

Otras medicinas de control a largo plazo. Entre otras medicinas de control a largo plazo están:

  • Agonistas beta2 inhalados de acción prolongada: Estas medicinas despejan las vías respiratorias. Se pueden sumar a los corticoesteroides inhalados en dosis bajas para mejorar el control del asma. Los agonistas beta2 inhalados de acción prolongada no deben usarse solos para el control del asma a largo plazo, a menos que se usen con corticoesteroides inhalados.
  • Modificadores de los leucotrienos: Estas medicinas se toman por la boca. Ayudan a bloquear la reacción en cadena que aumenta la inflamación de las vías respiratorias.
  • Teofilina: Esta medicina se toma por la boca. La teofilina ayuda a despejar las vías respiratorias.

Si el médico le receta una medicina de control a largo plazo, tómela todos los días para controlar el asma. Sus síntomas probablemente vuelvan a presentarse o empeoren si usted deja de tomarse la medicina.

Las medicinas de control a largo plazo pueden tener efectos secundarios. Pregúntele a su médico cuáles son esos efectos y cómo debe controlarlos o evitarlos.

Medicinas de alivio rápido

Todas las personas que sufren asma necesitan medicinas de alivio rápido para aliviar los síntomas que se agudicen. Los agonistas beta2 inhalados de acción corta son la primera alternativa para el alivio rápido.

Estas medicinas actúan rápidamente para relajar los músculos tensos que rodean las vías respiratorias cuando esté teniendo una crisis. Así las vías respiratorias se despejan y el aire puede pasar por ellas.

Usted debe tomar su medicina de alivio rápido en cuanto note los síntomas del asma. Si usa esta medicina más de 2 días por semana, hable con el médico sobre qué tan bien controlada está el asma. Es posible que necesite hacer cambios en su plan de acción.

Lleve a mano su inhalador de alivio rápido en todo momento, por si lo necesita. Si su hijo tiene asma, asegúrese de que todas las personas encargadas de su cuidado tengan las medicinas de alivio rápido del niño, entre ellas el personal de la escuela a la que asiste el niño. Estas personas deben entender cuándo y cómo usar estas medicinas y cuándo es necesario buscar atención médica para el niño.

No debe usar las medicinas de alivio rápido en lugar de las medicinas de control a largo plazo que le recetaron. Las medicinas de alivio rápido no reducen la inflamación.

Esté al tanto del estado del asma

Para estar al tanto del estado del asma usted debe llevar registros de los síntomas, determinar su valor de flujo máximo con un flujómetro y hacerse chequeos periódicos para la enfermedad.

Anote sus síntomas

Puede anotar sus síntomas de asma en un diario para ver qué tan bien le están controlando el asma los tratamientos.

El asma está bien controlada si:

  • No tiene síntomas más de 2 días por semana y esos síntomas no lo despiertan más de 1 ó 2 noches al mes.
  • Usted puede realizar todas sus actividades normales.
  • No tiene que tomar medicinas de alivio rápido más de 2 días por semana.
  • No sufre más de un ataque de asma al año que le obligue a tomar costicoesteroides por la boca.
  • Su valor de flujo máximo no desciende por debajo del 80 por ciento de su valor óptimo personal.

Si su asma no está bien controlada, comuníquese con el médico. Es posible que este tenga que cambiar su plan de acción contra el asma.

Use un flujómetro

Este pequeño dispositivo manual muestra qué tan bien sale el aire de sus pulmones. Usted sopla dentro del aparato y este le da una cifra, que es el valor de flujo máximo. El valor muestra qué tan bien están funcionando los pulmones en el momento de la prueba.

El médico le dirá cómo y cuándo usar el flujómetro. También le enseñará cómo tomarse las medicinas con base en el valor de flujo máximo.

Es posible que el médico y otros profesionales de salud le pidan que use el flujómetro cada mañana y lleve un registro de los resultados. Puede ser muy útil que registre los valores de flujo máximo durante unas dos semanas antes de cada consulta médica y lleve los resultados a la consulta.

Cuando le diagnostiquen el asma por primera vez es importante averiguar cuál es su "valor óptimo personal" de flujo máximo. Para hacerlo es necesario registrar el valor de flujo máximo todos los días durante 2 o 3 semanas cuando el asma esté bien controlada. El valor más alto que obtenga durante este período es su valor óptimo personal. Puede compararlo con valores futuros para saber si el asma está bajo control.

El flujómetro puede alertarlo de que se avecina un ataque de asma, incluso antes de que usted note los síntomas. Si su flujo máximo muestra que su respiración está empeorando, usted debe tomar sus medicinas de alivio rápido en la forma en que su plan de acción lo indique. Luego puede usar el flujómetro para ver qué tan bien actuó la medicina.

Hágase chequeos para el asma

Cuando comience el tratamiento para el asma tendrá que ir al médico con una frecuencia que puede oscilar entre cada 2 semanas y cada 6 semanas. En cuanto el asma esté controlada, el médico puede querer verlo con una frecuencia de entre una vez al mes y dos veces al año.

Durante estos chequeos el médico o la enfermera le preguntarán si ha tenido un ataque de asma desde la última consulta o si ha habido cambios en los síntomas o en los valores de flujo máximo. También le preguntarán sobre sus actividades diarias. Así, el médico o la enfermera podrá evaluar el grado de control del asma.

El médico o la enfermera le preguntarán además si tiene problemas o inquietudes respecto a tomarse sus medicinas o a seguir el plan de acción contra el asma. Según las respuestas que dé a estas preguntas, el médico puede cambiarle la dosis de su medicina o darle una medicina nueva.

Si su control de la enfermedad es muy bueno, tal vez pueda tomar menos medicina. El objetivo es usar la mínima cantidad necesaria de medicina para controlar el asma.

Atención de urgencias

La mayoría de las personas que tienen asma, incluidos muchos niños, pueden controlar sin peligro sus síntomas siguiendo los pasos para crisis de asma que aparecen en el plan de acción. Sin embargo, es posible que usted necesite atención médica.

Llame al médico y pregúntele qué debe hacer si:

  • Sus medicinas no le alivian un ataque de asma.
  • Su valor de flujo máximo es menos de la mitad de su valor óptimo personal.

Llame al 9-1-1 a pedir atención de urgencias si:

  • Le cuesta trabajo caminar y hablar porque tiene dificultad para respirar.
  • Tiene los labios o las uñas morados.

En el hospital lo observarán atentamente y le darán oxígeno y más medicinas. También le darán dosis más altas de las medicinas que toma en su casa. Este tratamiento puede salvarle la vida.

Tratamiento del asma en grupos especiales de personas

Los tratamientos que se describen en esta sección se aplican por lo general a todas las personas con asma. Sin embargo, algunos aspectos del tratamiento son diferentes en las personas que pertenecen a ciertos grupos de edad o en quienes tienen necesidades especiales.

Los niños

El asma es difícil de diagnosticar en niños menores de 5 años. Por eso es difícil saber si los niños pequeños que presentan sibilancias o tienen otros síntomas de asma se beneficiarán de tomar medicinas de control a largo plazo. (Las medicinas de alivio rápido tienden a aliviar las sibilancias en niños pequeños, ya sea que tengan asma o no).

Los médicos usan medicinas de control a largo plazo para tratar a los bebés y niños pequeños que tienen síntomas de asma si la evaluación de salud para niños asmáticos indica que los síntomas son persistentes y que probablemente persistirán después de los 6 años. (Si desea más información, consulte la sección "¿Cómo se diagnostica el asma?")

Los corticoesteroides inhalados son el tratamiento preferido para los niños pequeños. El montelukast es una alternativa. El tratamiento se puede administrar por un período de prueba que puede durar entre 1 mes y 6 semanas. Por lo general el tratamiento se suspende si durante ese tiempo no se observan beneficios y si el médico y los padres están seguros de que la medicina se usó adecuadamente.

Los corticoesteroides inhalados pueden retrasar el crecimiento de los niños a cualquier edad. Si se presenta retraso del crecimiento, casi siempre se nota en los primeros meses de tratamiento. Además, es leve y no empeora con el tiempo. El asma mal controlada puede disminuir también la velocidad a la que un niño crece.

La mayoría de los expertos creen que los beneficios de los corticoesteroides inhalados para niños que los necesitan para el control del asma superan con mucho el riesgo de retraso del crecimiento.

Las personas mayores

Es posible que los médicos tengan que ajustar el tratamiento del asma en las personas mayores que tomen ciertas medicinas, como betabloqueantes, antiinflamatorios, aspirina y otros analgésicos. Estos fármacos pueden impedir que las medicinas para el asma actúen de la manera adecuada y pueden empeorar los síntomas.

No olvide contarle a su médico sobre todas las medicinas que toma, incluso las de venta sin receta.

En las personas mayores se puede presentar debilitamiento de los huesos por el uso de corticoesteroides inhalados, especialmente si las dosis de estos son altas. Pregúntele a su médico si debe tomar calcio y pastillas de vitamina D, y qué otras cosas debe hacer para mantener fuertes los huesos.

Las mujeres embarazadas

Las mujeres embarazadas que tienen asma necesitan controlar la enfermedad para garantizar un buen suministro de oxígeno para su bebé. Un mal control del asma aumenta el riesgo de que el bebé nazca prematuramente y tenga bajo peso al nacer. El mal control del asma puede incluso poner en peligro la vida del bebé.

Se ha demostrado en estudios que es menos peligroso tomar medicinas para el asma durante el embarazo que arriesgarse a tener un ataque de asma.

Hable con el médico si tiene asma y está embarazada o piensa quedar embarazada. Su grado de control del asma puede mejorar o empeorar durante el embarazo. El equipo de profesionales de salud que la atiende comprobará a menudo su control del asma y ajustará el tratamiento cuando sea necesario.

Las personas en las que los síntomas del asma se presentan durante la actividad física

La actividad física forma parte importante de un estilo de vida saludable. Los adultos necesitan actividad física para mantener una buena salud. Los niños la necesitan para crecer y desarrollarse.

Sin embargo, en muchas personas la actividad física puede desencadenar los síntomas del asma. Si esto le sucede a usted o a su niño, pregúntele al médico cuáles son las formas más adecuadas de controlar el asma para seguir siendo activo.

Las siguientes medicinas pueden prevenir los síntomas de asma causados por la actividad física:

  • Agonistas beta2 de acción corta (medicinas de alivio rápido): Se toman poco antes de iniciar la actividad física. El efecto puede durar 2 ó 3 horas y prevenir los síntomas relacionados con el ejercicio en la mayoría de las personas que las toman.
  • Agonistas beta2 de acción prolongada: Pueden tener un efecto protector hasta por 12 horas. Sin embargo, si se usan a diario ya no proporcionarán hasta 12 horas de protección. Además, su uso frecuente para realizar actividad física puede indicar que el asma está mal controlada.
  • Modificadores de los leucotrienos: Estas pastillas se toman varias horas antes de la actividad física. Sirven para aliviar los síntomas del asma provocados por la actividad física en hasta la mitad de las personas que las toman.
  • Medicinas de control a largo plazo: Los síntomas frecuentes o intensos provocados por la actividad física pueden indicar que el asma está mal controlada y que es necesario comenzar a tomar medicinas de control a largo plazo que reduzcan la inflamación o aumentar la dosis de estas, si ya las está tomando. Esto evitará que se presenten síntomas relacionados con el ejercicio.

Puede ser útil prepararse para la actividad física con un período de calentamiento. Es posible que le convenga usar una mascarilla o una bufanda sobre la boca cuando haga ejercicio si el tiempo está frío.

Si usa las medicinas para el asma como el médico lo indique, podrá participar en cualquier actividad física o deporte que usted elija.

Personas que van a someterse a cirugía

El asma puede aumentar el riesgo de presentar problemas durante una cirugía y después de esta. Por ejemplo, el hecho de que le pasen un tubo por la garganta puede causarle un ataque de asma.

Avísele al cirujano que tiene asma cuando vaya a verlo por primera vez. El cirujano puede tomar medidas para disminuir los riesgos, por ejemplo, dándole medicinas para el asma antes de la cirugía o durante la misma.

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Acerca de los estudios clínicos

Los estudios clínicos son investigaciones que exploran si una estrategia médica, un tratamiento, o un dispositivo son seguros y eficaces para los seres humanos. Estos estudios son una herramienta importante de investigación y sirven para adelantar en el conocimiento médico y el cuidado del paciente. Aprenda más sobre los estudios clínicos (solo en inglés).

 
June 01, 2011 Last Updated Icon

El NHLBI actualiza los temas del DCI en un ciclo de cada dos años, basándose en una revisión cuidadosa de los resultados de investigación y de literatura nueva. Según sea necesario, los temas del DCI también se actualizan si se publica nueva e importante investigación. La fecha en cada tema del DCI refleja cuando el contenido fue publicado originalmente o cuando se hizo su última modificación

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