Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades Estudios de Caso en Medicina Ambiental (CSEM) Desencadenantes ambientales del asma
Diagnóstico diferencial del asma
El primer paso para tratar el asma en un paciente asmático es asegurarse de que tiene asma. Si bien muchos casos de tos y sibilancias recurrentes en niños y adultos se atribuyen al asma, otras afecciones a menudo se diagnostican erróneamente como asma. En los adultos, el diagnóstico diferencial del asma comprende:
enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC),
bronquitis crónica o enfisema,
insuficiencia cardiaca congestiva,
enfermedad por reflujo gastroesofágico,
obstrucción mecánica de las vías respiratorias,
tumor o neoplasia y
disfunción de las cuerdas vocales.
Las causas poco frecuentes de las sibilancias pueden ser:
embolia pulmonar,
infiltrados pulmonares con eosinofilia y
algunos medicamentos (p. ej., inhibidores de la enzima conversora de la angiotensina (IECA) (NHLBI 1997).
En los niños, la tos crónica es un problema que debe diferenciarse para determinar si es o no es asma. La tos productiva crónica con expectoración purulenta es motivo de preocupación en los niños y no suele ser un síntoma de asma. Mientras más pequeño sea el niño, más necesario será descartar enfermedades subyacentes en estadio temprano (de Jongste y Shields 2003).
Las sibilancias en los niños pueden ser una reacción alérgica (p. ej., asma) o nérgica (Lemanske 2003; Weinberger 2003). Las sibilanciérgicas en los niños ocurren durante las infecciones agudas, como la bronquiolitis viral. La tos y las sibilancias en la bronquiolitis son difíciles de distinguir del asma. El diagnóstico diferencial en los niños con sibilancias e infecciones respiratorias frecuentes debe incluir:
obstrucción de las vías respiratorias por un cuerpo extraño,