Intervenciones contra el cáncer
Radioterapia
Ablación por radiofrecuencia
Cirugía
La radioterapia, la ablación por radiofrecuencia y la cirugía se pueden utilizar para aliviar el dolor más que como tratamiento para el cáncer primario. Ciertos medicamentos quimioterapéuticos también se pueden usar para controlar el dolor relacionado con el cáncer.
Radioterapia
La radioterapia local o del cuerpo entero puede aumentar la eficacia de los
medicamentos contra el dolor y otros tratamientos no invasores al afectar
directamente a la causa del dolor (por ejemplo, reduciendo el tamaño del
tumor). Una sola inyección de una sustancia radiactiva puede aliviar el dolor
cuando el cáncer se disemina ampliamente hasta los huesos.
La radioterapia también ayuda a reducir los inconvenientes para caminar y realizar otras funciones causados por el dolor que sufren los pacientes cuyo cáncer se ha diseminado hasta los huesos. Es posible que el dolor vuelva después de la radioterapia, aunque se necesita estudiar más este tema.
Ablación por radiofrecuencia
La ablación por radiofrecuencia utiliza un electrodo de aguja para calentar los tumores y destruirlos. Este procedimiento mínimamente invasor puede proveer una mejoría significativa del dolor en pacientes cuyo cáncer se ha diseminado hasta los huesos.
Cirugía
Se puede utilizar la cirugía para extraer el tumor en parte o en su totalidad, reducir directamente el dolor, aliviar síntomas de obstrucción o
compresión y mejorar los resultados, aumentando además la supervivencia a
largo plazo.
Volver arriba
< Sección anterior | Siguiente sección > |