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Los Niños No Son Simplemente Adultos Pequeños
Sea muy cuidadoso cuando le administre un medicamento a un bebé o a un
niño. Incluso los medicamentos de venta libre que usted compra sin receta médica son
medicinas serias. La FDA y los fabricantes de medicamentos de venta libre, proponen las
siguientes recomendaciones para cuando haya que darle a un niño una medicina sin receta
1.
Lea siempre la información
sobre los ingredientes y las instrucciones para el uso ( Drug Facts) que figuran en la
etiqueta de su medicamento de venta libre. Esto es importante para seleccionar y utilizar
en forma segura todos los medicamentos de venta libre.
Lea siempre la etiqueta antes de administrar el medicamento. Asegúrese de que entiende bien la
cantidad de medicamento que debe administrar y cuándo puede repetir la dosis.
2.
Sepa cuál es el "ingrediente
activo" del medicamento para su niño.
Ésa es la substancia que hace que el medicamento haga efecto y está siempre indicada en la
parte superior de la etiqueta con la información e instrucciones. En algunos casos el
mismo ingrediente activo puede aliviar más de un malestar. Es por eso que el mismo
ingrediente puede encontrarse en muchas medicinas distintas utilizadas para el tratamiento
de diferentes síntomas. Por ejemplo, un medicamento contra el resfriado y otro para quitar
el dolor de cabeza pueden contener el mismo ingrediente activo. De modo que si usted está
tratando un resfriado y un dolor de cabeza con esos dos medicamentos, y ambos contienen el
mismo ingrediente activo, podría estar administrando dos veces la dosis normal. Si tiene
dudas en cuanto a las medicinas de su hijo, consulte con su médico, enfermera, o
farmacéutico.
3.
Dele a su niño el medicamento
correcto en la cantidad debida. No
todos los medicamentos están indicados para un recién nacido o un niño. Los medicamentos
de la misma marca pueden venderse en muchos grados distintos de concentración, como es el
caso en las fórmulas para recién nacidos, niños, y adultos. Las dosis y las instrucciones
también son diferentes para niños de distintas edades y pesos. Use siempre el medicamento
correcto y siga las instrucciones al pie de la letra. Nunca use una dosis mayor que la
indicada, aun cuando su niño parezca estar más enfermo que la vez anterior.
4.
Consulte con su médico,
farmacéutico o enfermera para que le indiquen qué medicamentos pueden interactuar con
otros y cuáles no. Los medicamentos,
las vitaminas, los suplementos, y los alimentos y bebidas no siempre son compatibles entre
sí. Su profesional de salud puede aconsejarle.
5.
Utilice el instrumento medidor
que viene con la medicina, tal como un gotero o vasito dosificador.
Otro tipo de implemento, tal como una cuchara de
cocina, podría contener una cantidad indebida de medicamento.
6.
Distinga entre una cuchara (tablespoon
o tbsp., en inglés) y una cucharita (teaspoon o tsp., en inglés).
¡No las confunda! Una cucharada contiene tres veces más medicina que una cucharadita. En
los implementos medidores, una cucharadita (tsp.) es igual a “5 cc” ó “5 ml.”
7.
Conozca el peso de su niño.
Las instrucciones de algunos medicamentos de venta libre se basan en el peso. Nunca trate de
adivinar o estimar la cantidad de medicamento que debe darle a su niño, ni trate de
calcularla basándose en las dosis indicadas para adultos. Si la dosis que corresponde a la
edad o al peso del niño no aparece indicada, llame a su médico o a otros miembros de su
grupo de profesionales de salud.
8.
Para evitar una situación de
emergencia por envenenamiento, use siempre tapas que sean difíciles de abrir para los
niños. Después de cada uso, vuelva a
cerrar bien la tapa. Hay que tener especial cuidado con los productos que contengan
hierro; éstos constituyen la principal causa de muertes por envenenamiento entre los niños
pequeños.
9.
Guarde todos sus medicamentos
en un lugar seguro. Hoy en día las
medicinas tienen buen sabor, vienen en colores atractivos, y muchas son masticables. Los
niños podrían creer que estos productos son dulces. Evite una emergencia debida a una
sobredosis o envenenamiento, guardando los medicamentos y vitaminas en un lugar seguro que
no esté ni a la vista ni al alcance de su niño (ni de sus animales domésticos). Si su niño
ingiere una cantidad excesiva, llame a la Línea directa del Centro de Control de
Substancias Venenosas (Poison Center Hotline), al 1-800-222-1222 (en servicio 24 horas al
día, 7 días de la semana) o llame al 9-1-1.
10.
Examine el medicamento tres
veces para comprobar que no tenga señales de haber sido manipulado ni dañado.
Primero, examine el empaque exterior y compruebe que no tenga cortes, tajos, ni desgarraduras.
Segundo, una vez en su casa, lea la etiqueta del envase interior para verificar que sea la
medicina correcta. Asegúrese de que la tapa y el sello no estén rotos. Tercero, examine el
color, la forma, el tamaño, y el olor del medicamento. Si observa algo diferente o fuera
de lo común, hable con su farmacéutico u otro profesional de atención médica.
U.S. Food and Drug Administration
5600 Fishers Lane
Rockville, MD 20857
www.fda.gov
For free single or bulk quantities of the printed brochure, contact:
Consumer Healthcare Products Association
Publications Department
900 19th Street, NW, Suite 700
Washington, DC 20006
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Date created: November 1, 2004; updated March 7, 2006 |