Aspectos generales de las opciones de tratamiento
Puntos importantes de esta sección
|
|
Hay diferentes tipos de tratamientos para todas las pacientes con tumor de
células germinales de los ovarios.
Hay diferentes tipos de tratamiento disponibles para las pacientes con tumor de células germinales de los ovarios. Algunos tratamientos son estándar (el tratamiento actualmente usado) y otros se encuentran en evaluación en ensayos clínicos. Un ensayo clínico de un tratamiento consiste en un estudio de
investigación que procura mejorar los tratamientos actuales u obtener información
sobre tratamientos nuevos para pacientes de cáncer. Cuando los ensayos clínicos muestran que un nuevo tratamiento es mejor que el tratamiento estándar, el tratamiento nuevo se puede convertir en el
tratamiento estándar.
Los pacientes deberían pensar en participar en un ensayo clínico. Algunos ensayos clínicos están abiertos solo para pacientes que no han comenzado un tratamiento.
Se utilizan los tres tipos siguientes de tratamiento estándar:
Cirugía
La cirugía es el tratamiento más común del tumor de células germinales de los
ovarios. El médico puede extirpar el cáncer mediante uno de los siguientes tipos
de cirugía:
- Salpingooforectomía unilateral: procedimiento quirúrgico para extirpar un ovario y una trompa de Falopio.
- Histerectomía total: procedimiento quirúrgico para extirpar el útero, incluso el cuello uterino. Si el útero y el cuello uterino se extraen a través de la vagina, la operación se denomina histerectomía vaginal. Si el útero y el cuello uterino se extraen al hacerse una incisión grande (corte) en el abdomen, la operación se denomina histerectomía abdominal completa. Si el útero y el cuello uterino se extraen a través de una incisión pequeña (corte) en el abdomen mediante un laparoscopio, la operación se denomina histerectomía laparoscópica completa.
- Salpingooforectomía bilateral: procedimiento quirúrgico para extirpar ambos ovarios y amabas trompas de Falopio.
- Separación del tumor: procedimiento quirúrgico en el cual se extirpa la mayor cantidad posible del tumor. Algunos tumores no se pueden extirpar en su totalidad.
Quimioterapia
La quimioterapia es un tratamiento del cáncer que utiliza medicamentos para interrumpir la proliferación de células cancerosas, mediante la eliminación de las células o evitando su multiplicación. Cuando la quimioterapia se administra oralmente o se inyecta en una vena o músculo, los medicamentos ingresan al torrente sanguíneo y afectan a células cancerosas en todo el cuerpo (quimioterapia sistémica). Cuando la quimioterapia se coloca directamente en la columna vertebral, una cavidad corporal como el abdomen, o un órgano, los medicamentos afectan principalmente células cancerosas en esas áreas.
La forma en que se administre la quimioterapia va a depender del tipo y el grado de avance del cáncer que está siendo tratado.
Radioterapia
La radioterapia es un tratamiento para el cáncer el cual utiliza rayos X de alta energía u otros tipos de radiación para eliminar células cancerosas. Existen dos tipos de radioterapia. La radioterapia externa utiliza una máquina fuera del cuerpo la cual envía radiación al área donde se encuentra el cáncer. La radioterapia interna utiliza una sustancia radioactiva sellada en agujas, semillas, alambres o catéteres que se colocan directamente dentro o cerca del cáncer. La forma en que se administra la quimioterapia va a depender del tipo o estadio en que se encuentre el cáncer bajo tratamiento.
Incluso si el médico extirpa todo el cáncer visible al momento de la cirugía, algunas pacientes recibirán quimioterapia o radioterapia después de la cirugía
a fin de eliminar toda célula cancerosa que pueda quedar aún. El tratamiento
administrado después de la cirugía para incrementar las posibilidades de curación
se denomina terapia coadyuvante.
Después de la radiación o la quimioterapia, en algunas ocasiones se realiza una
cirugía llamada laparotomía para una segunda mirada. Esto es similar a la
laparotomía que se realiza para determinar el estadio del cáncer. Durante esta
segunda cirugía, el médico tomará muestras de los ganglios linfáticos y otros
tejidos en el abdomen para determinar si aún queda cáncer.
Se están probando nuevos tipos de tratamiento en ensayos clínicos.
En la presente sección del sumario se hace referencia a tratamientos en
evaluación en ensayos clínicos, pero tal vez no se mencionen todos los
tratamientos nuevos que se están considerando. Para mayor información en inglés sobre ensayos clínicos, consultar el portal de Internet del NCI.
Dosis altas de quimioterapia con trasplante de médula ósea
Este método implica la administración de dosis de quimioterapia más elevadas que las normales y reemplazar las células generadoras de sangre que han resultado destruidas por el tratamiento del cáncer. De la médula ósea se obtienen células madres (glóbulos sanguíneos inmaduros) o pudiera ser sangre del mismo paciente o un donante, la cual se congela y almacena. Al terminar la quimioterapia, las células madres guardadas se descongelan y se reinyectan al paciente mediante un proceso conocido como infusión. En corto tiempo, estas células madres reinyectadas, crecen y restauran las células sanguíneas en el cuerpo.
Nuevas opciones de tratamiento
Quimioterapia de combinación (la utilización de más de un medicamento quimioterapéutico para combatir el cáncer) está bajo estudio en ensayos clínicos.
Los pacientes deberían pensar en participar en un ensayo clínico.
Para algunos pacientes, quizás la mejor elección de tratamiento sea participar en un ensayo clínico. Los ensayos clínicos forman parte del proceso de investigación del cáncer. Los ensayos clínicos se llevan a cabo para determinar si los tratamientos nuevos para el cáncer son seguros y eficaces, o mejores que el tratamiento estándar.
Muchos de los tratamientos estándar actuales se basan en ensayos clínicos anteriores. Los pacientes que participan en un ensayo clínico pueden recibir el tratamiento estándar o estar entre los primeros en recibir el tratamiento nuevo.
Los pacientes que participan en los ensayos clínicos también ayudan a mejorar la forma en que se tratará el cáncer en el futuro. Aunque los ensayos clínicos no conduzcan a tratamientos nuevos eficaces, a menudo responden a preguntas importantes y ayudan a avanzar en la investigación.
Los pacientes pueden entrar a formar parte de los ensayos clínicos antes, durante o después de comenzar su tratamiento para el cáncer.
Algunos ensayos clínicos sólo incluyen a pacientes que todavía no recibieron tratamiento. Otros ensayos prueban los tratamientos para los pacientes cuyo cáncer no ha mejorado. También hay ensayos clínicos que prueban nuevas maneras de impedir que el cáncer recurra (vuelva) o de reducir los efectos secundarios del tratamiento del cáncer.
Los ensayos clínicos tienen lugar en muchas partes del país. Consultar la sección sobre Opciones de Tratamiento para encontrar enlaces en inglés a los ensayos clínicos que se realizan actualmente. Estos se han recuperado de la base de datos de ensayos clínicos del NCI.
Pueden necesitarse pruebas de seguimiento.
Algunas de las pruebas que se usaron para diagnosticar el cáncer o para determinar el estadio del cáncer se pueden repetir. Algunas pruebas se repiten para asegurarse que el tratamiento es eficaz. Las decisiones acerca de seguir, cambiar o suspender el tratamiento pueden basarse en los resultados de estas pruebas. Esto a veces se llama reestadificación.
Algunas de las pruebas se seguirán repitiendo esporádicamente después de terminar el tratamiento. Los resultados de estas pruebas pueden mostrar si la afección ha cambiado o si el cáncer recidivó (volvió). Estas pruebas a veces se llaman pruebas de seguimiento o exámenes médicos.
Volver arriba
< Sección anterior | Siguiente sección > |