You are here » Home » Telling Our Story
First Person
Un refugio proporciona a las mujeres en situación de riesgo comodidades y las destrezas para que lleven una vida
Ayudando a que termine la pesadilla de algunas mujeres
| |
Photo: USAID/Fernando Arèvalo
|
|
(de izquierda a derecha) Monseñor Alvaro Ramazzini, obispo de San Marcos, Guatemala; Vinicio Barrios González, Alcalde de Tecún Umán; Hermana Luz Angélica García, Directora de Casa de la Mujer; y D. Bruce Wharton de la Embajada de Estados Unidos en Guatemala asistieron a la inauguración de Casa de la Mujer.
Marcia dice: "En este mundo una mujer trata de salir adelante pero es explotada, abusada y arrojada a un mundo de violencia y prostitución. Casa de la Mujer me ayudó a liberarme y a terminar mi pesadilla."
— Marcia
|
Marcia es ecuatoriana, una abuela dedicada y dueña de un pequeño negocio. Con esperanzas de
una vida mejor, Marcia decidió arriesgarse y emigrar hacia los Estados Unidos. A cambio de su pago
de $10,000 Marcia recibió agua, frutas y un viaje en una frágil lancha. Pero después de 16 días en
alta mar, su viaje terminó abruptamente. La lancha desembarcó en Guatemala, donde los "coyotes"
a quienes les había pagado la abandonaron. Marcia terminó en la aldea La Verde donde aceptó la
oferta de una mujer de llevarla a los Estados Unidos por $1,500. La mujer nunca cumplió su promesa.
Desesperada, Marcia solicitó ayuda al párroco de la localidad. Él le comentó sobre Casa de la Mujer,
un refugio y centro de capacitación que recibe apoyo de USAID y que se encuentra en la ciudad fronteriza
de Tecún Umán. En Casa de la Mujer Marcia recibió hospitalidad y alimentos - y también aprendió cómo
producir y vender productos rentables de limpieza. Equipada con una carretilla y años de experiencia
como vendedora, Marcia ahora vende sus productos de puerta en puerta. Su trabajo la ha retribuido,
Marcia tiene una clientela fiel y apoya a muchas de las mujeres y niños que viven en la Casa,
en tanto ahorra dinero para cuando deje la Casa.
Casa Antonia, el centro de capacitación de Casa de la Mujer, ofrece capacitación en costura, peluquería y fabricación de productos de limpieza a 150 mujeres. Un tercio de estas mujeres fueron víctimas del tráfico de personas mientras que el resto se considera en situación de riesgo - hijas de prostitutas, amigas o parientes de traficantes de drogas, amigas o familiares de mareros, o jóvenes analfabetas de escasos recursos económicos. Los vecinos de la ciudad ahora visitan frecuentemente la Casa para cortarse el pelo, comprar maquillaje, ropa y productos de limpieza.
Marcia dice que el centro de capacitación es vital para las mujeres y niños que caen en las garras
de los traficantes porque les brinda la comodidad, seguridad y destrezas para encontrar alternativas
productivas a la violencia y la prostitución.
Marcia planea ganar suficiente dinero para regresar a Ecuador y reunirse con su familia. Aún persiste su sueño de vivir en Estados Unidos algún día. Ahora dice que si alguna vez lo intenta, lo hará legalmente porque el riesgo de viajar sin la documentación adecuada es muy alto. Marcia dice que aprendió la lección por las malas y está feliz de haber sobrevivido - gracias a la seguridad de Casa de la Mujer.
Print-friendly version of this page (56kb - PDF)
Click here for high-res photo
Back to Top ^ | 
