Preguntas frecuentes sobre la salud de la mujer
Preguntas frecuentes acerca de la histerectomía
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Una histerectomía es una operación para extraer el útero (matriz) de la mujer. El
útero es el lugar donde se desarrolla el bebé cuando la mujer se embaraza. Algunas veces
se extraen las trompas de Falopio, los ovarios y el cuello del útero al mismo tiempo que
se extirpa el útero. Estos órganos se localizan en el bajo vientre de la mujer (vea la
imagen a continuación.) El cuello uterino se encuentra en el extremo inferior del útero.
Los ovarios son los órganos que producen los óvulos y las hormonas. Las trompas de
Falopio llevan los óvulos de los ovarios al útero.
Fuente que proporcionó la imagen: Instituto Nacional del Cáncer
Si todavía no llega a la menopausia, una histerectomía evitará que usted
sangre cada mes (períodos.) Tampoco podrá quedar embarazada. Existen varios tipos de
histerectomía:
Una histerectomía completa o total extirpa el cuello uterino
así como el útero. Este es el tipo más común de histerectomía.
Una histerectomía parcial o subtotal (llamada también histerectomía
supracervical) extrae la parte superior del útero y deja el cuello uterino en su
lugar.
En una histerectomía radical se extrae el útero, el cuello
uterino, la parte superior de la vagina y sus tejidos de apoyo. Este procedimiento se
realiza en algunos casos de cáncer.
A menudo se extraen uno o ambos ovarios y las trompas de Falopio al mismo tiempo que se
realiza una histerectomía. Cuando se extraen ambos ovarios y ambas trompas de Falopio, el
procedimiento se llama salpingo-oforectomía bilateral.
Si se extraen los ovarios en una mujer antes de que llegue a la menopausia, la
repentina pérdida de su principal fuente de hormonas femeninas le causará que entre
súbitamente a la menopausia (menopausia quirúrgica.) Esto puede ocasionar
síntomas más graves que una menopausia natural.
La histerectomía es el segundo tipo de cirugía mayor más común entre las mujeres de
los Estados Unidos. (La cirugía mayor más común entre las mujeres de los Estados Unidos
es el parto por cesárea.) Anualmente, se realizan más de 600,000 histerectomías. Cerca
de la tercera parte de las mujeres en los Estados Unidos han tenido una histerectomía
antes de llegar a los 60 años de edad.
Las histerectomías se realizan por medio de un corte en el abdomen (histerectomía
abdominal) o en la vagina (histerectomía vaginal.) A veces se usa un instrumento llamado
laparoscopio para ayudar a ver el interior del abdomen. El tipo de cirugía que se
realice depende de la razón de la cirugía. Las histerectomías abdominales son más
comunes que las histerectomías vaginales y normalmente requieren de un tiempo de
recuperación más largo.
Las histerectomías se realizan más comúnmente por las siguientes razones:
Fibromas uterinos. Los fibromas son tumores comunes benignos
(no cancerosos) que crecen en el músculo del útero. El mayor número de histerectomías
se realiza a causa de la aparición de fibromas que por cualquier otro problema del
útero. A menudo, los fibromas no causan síntomas y no requieren tratamiento y
normalmente se encogen después de la menopausia. Pero, en ocasiones los fibromas causan
fuerte sangrado o dolor.
Existen alternativas a la histerectomía para tratar los fibromas, lo que puede ser
especialmente importante para las mujeres jóvenes que esperan tener hijos. A veces los
fibromas se tratan con medicina u otros tipos de tratamiento planeados para encoger dichos
tumores. Sin embargo, esto es solamente temporal - cuando se suspende la medicina, los
fibromas volverán a crecer. Un tipo de cirugía para extraer únicamente los fibromas sin
extraer el útero se llama miomectomía. Un procedimiento relativamente nuevo
para encoger los fibromas se llama embolización de la arteria uterina. Este
procedimiento consiste en colocar pequeñas partículas de plástico en los vasos
sanguíneos que alimentan a los fibromas.
Endometriosis. Esta es otra condición benigna que afecta al
útero. La endometriosis es la segunda razón principal para la realización de
histerectomías. Es más común en mujeres mayores de treinta y menores de cincuenta años
de edad, especialmente en mujeres que nunca se han embarazado. La endometriosis ocurre
cuando el tejido endometrial (el revestimiento interior del útero) comienza a
crecer fuera del útero y sobre órganos adyacentes. Esta condición puede causar
períodos menstruales dolorosos, sangrado vaginal anormal y algunas veces pérdida de la
fertilidad (capacidad de embarazarse.) Normalmente, la endometriosis no es un problema
para las mujeres que ya han pasado por la menopausia.
Las mujeres con endometriosis muchas veces reciben tratamiento con hormonas y medicinas
que reducen sus niveles de estrógeno. Puede realizarse una cirugía para extraer los
parches de tejido endometrial que causan los síntomas, usando un laparoscopio o por medio
de un corte más amplio en el abdomen (laparotomía.) Como regla general una
histerectomía no se realiza a menos que haya fallado algún otro tratamiento.
Prolapso del útero. Esta es una condición benigna en la cual
el útero se desplaza de su lugar normal hacia la vagina. El prolapso del útero es
causado por el debilitamiento y ensanchamiento de los ligamentos y tejidos pélvicos.
También pueden afectarse otros órganos como la vejiga. El alumbramiento, la obesidad y
la pérdida de estrógeno después de la menopausia pueden contribuir a la aparición de
este problema. El prolapso del útero representa cerca del 16 por ciento de las
histerectomías realizadas.
El tratamiento puede incluir terapia de estrógeno, ejercicios para fortalecer los
músculos del piso de la pelvis o el uso de un pesario, que es un anillo de
plástico insertado por la vagina para ayudar a sostener el útero en su lugar. En casos
más graves, la cirugía puede restaurar los órganos hundidos a su ubicación normal y
reparar los tejidos de apoyo. En ocasiones puede realizarse la histerectomía si el
prolapso está causando problemas graves.
Los tipos de cáncer que afectan a los órganos de la pelvis representan cerca del diez
por ciento de todas las histerectomías realizadas. El cáncer endometrial (cáncer del
revestimiento del útero), el sarcoma uterino, el cáncer cervical (cáncer del cuello del
útero) y el cáncer de los ovarios o de las trompas de Falopio requieren a menudo de una
histerectomía. También pueden usarse otras clases de tratamiento como la radiación o
terapia con hormonas dependiendo del tipo y extensión del cáncer.
Otras razones por las cuales se realizan las histerectomías incluyen dolor pélvico
crónico, abundante sangrado durante o entre los períodos y la enfermedad pélvica
inflamatoria crónica.
Si usted sufre de una condición que no sea cáncer, como fibromas, endometriosis o
prolapso del útero, muchas veces hay otros tratamientos que deberían probarse primero.
En la mayoría de los casos, no es necesario hacerse una histerectomía inmediatamente.
Hay tiempo para que usted reciba más información y busque otras alternativas.
En casos de enfermedades graves, como el cáncer, puede ser que la histerectomía sea
requerida e incluso pueda salvarle la vida. Antes de decidir qué hacer, es importante que
entienda su condición y sus opciones para enfrentarla.
Si sufre de problemas continuos y severos de dolor pélvico y sangrado uterino anormal,
y otros tratamientos no le han ayudado, una histerectomía puede darle un grato alivio.
Los estudios han demostrado que una histerectomía a menudo mejora el funcionamiento
sexual y la calidad de vida de las mujeres que sufren de estos problemas.
Por otro lado, algunas mujeres sufren de serias complicaciones, e incluso la muerte, a
partir de una histerectomía. La mayoría de complicaciones son menos serias, y pueden
incluir reacciones a la anestesia, dolor, infección, sangrado y fatiga. Algunas veces
otros órganos pélvicos como la vejiga y el intestino se lesionan durante una
histerectomía. La histerectomía también se relaciona con la incontinencia urinaria
(problemas para retener la orina), la pérdida de la función ovárica y la menopausia
precoz. Algunas mujeres sufren de depresión y disfunción sexual después de una
histerectomía.
Si le dicen que debe someterse a una histerectomía:
Hable con su proveedor de cuidado médico acerca de sus opciones.
Pregunte sobre otros tratamientos disponibles para su condición.
Considere buscar una segunda opinión de otro proveedor de cuidado
médico.
Pregunte sobre posibles complicaciones de la cirugía.
No olvide que cada mujer y cada situación son diferentes. Una buena
elección de tratamiento para una mujer no necesariamente es la mejor elección para otra.
Trabaje con su proveedor de cuidado médico para elegir el tratamiento
más indicado en su caso. Si mi cuello uterino es extirpado en mi histerectomía,
Si se somete a una histerectomía total, en la cual el cuello uterino ha sido extirpado
junto con el útero, normalmente no necesitará hacerse la prueba del Papanicolaou. Una
excepción es si su histerectomía se realizó a causa del cáncer cervical o sus
precursores. Pregunte a su proveedor de cuidado médico si necesita hacerse pruebas de
Papanicolaou periódicamente. Es importante que todas las mujeres que han tenido una
histerectomía se sometan a exámenes ginecológicos regulares como parte de su cuidado
médico.
Para obtener más información
Para obtener más información acerca de la histerectomía, comuníquese con womenshealth.gov llamando al (800) 994-9662, ó por medio de las siguientes organizaciones:
Agencia para la Investigación y Calidad del Cuidado Médico
Número(s) telefónico(s): (800) 358-9295 para solicitar publicaciones
Dirección en Internet: http://www.ahrq.gov/consumer/
Centro de Recursos del Colegio Norteamericano de Obstetras y Ginecólogos (ACOG
por sus siglas en inglés)
Número(s) Telefónico(s): (800) 762-2264 x 192 (para solicitar publicaciones solamente)
Dirección en Internet: www.acog.org
Colegio Norteamericano de Cirujanos
Número(s) telefónico(s): (312) 202-5000
Dirección en Internet: http://www.facs.org
Todo el material contenido en las Preguntas frecuentes carece de restricciones de
derechos de autor y puede copiarse, reproducirse o duplicarse sin permiso de la Oficina de
Salud de las Mujeres del Departamento de Salud y Servicios Humanos. Se agradecerá citar
la fuente. Noviembre de 2002
Contenido revisado el 1 de noviembre de 2003.
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