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El SIDA entre los latinos
Duración: 13:30 | Tamaño: 12.4 MB
Entrevista a el Dr. Jorge Flores del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciones sobre la situación de los latinos frente al SIDA.

Transcript:
Pere Estupinyà: Bienvenidos al espacio “conversaciones sobre salud” que les ofrece los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos. Yo soy Pere Estupinyà de la oficina de comunicación en español del NIH, y en esta ocasión vamos a charlar y reflexionar sobre los problemas derivados del consumo de alcohol con uno de los grandes expertos en alcoholismo como es el Dr. Raúl Caetano de la Universidad de Tejas.
Hablaremos de porqué el alcohol es una droga más poderosa, y más peligrosa de lo que nos pensamos, de por qué algunas personas sufren más adicción que otras, de cuáles son las cantidades que sí se pueden beber, del consumo exagerado de alcohol entre jóvenes, de los efectos a largo plazo del alcohol, de cómo percibir en uno mismo, o en sus personas cercanas, un problema con la bebida, y de si existe alguna peculiaridad que afecte de forma específica a la población latina de estados unidos.
Doctor Caetano, según un estudio que apareció hace un par de años, las personas cuyos padres son mexicanos, pero que nacieron en Estados Unidos suelen tener más problemas de alcoholismo que los méxicoamericanos que viven en Estados Unidos pero que nacieron en México. ¿A qué se debe esta diferencia?

Raul Caetano: No se sabe muy bien. Lo interesante es que la diferencia, es la misma. Hay varios otros problemas de salud. Los mexicanoamericanos y otros hispanos que viven en los Estados Unidos nacidos acá tienen mayores problemas de salud, incluso problemas de alcohol, como mencionaste. Es posible que varios factores entren a influenciar estas estadísticas. Por ejemplo, se piensa que los migrantes tienen mejor salud porque los más fuertes que están en el país de origen migran. Los que están enfermos, los que tienen deficiencias de salud no migran pero puede también haber otras cosas como por ejemplo, los que viven en Estados Unidos que nacieron acá tienen un nivel socioeconómico mayor. Lo que esto hace es que tengan más dinero y por lo tanto más acceso al alcohol. 

Pere Estupinyà: Habéis hecho algún estudio relacionando la población latina que tiene un nivel socioeconómico alto y la población latina que tiene un nivel socioeconómico bajo?

Raul Caetano: Las mayores diferencias no son tanto las diferencias socioeconómicas. Por lo general, lo que se ve es que la gente en la clase social más alta bebe más frecuentemente en menos dosis. La gente en las clases sociales más bajas bebe menos frecuentemente pero, cuando bebe, bebe más. En general es más o menos esto lo que pasa: las tasas de alcoholismo, las tasas de dependencia son mayores en la población de clase socioeconómica baja y también esto afecto más o menos igualmente los tres grandes grupos étnicos en Estados Unidos, ¿no?, los blancos, negros e hispanos.

Pere Estupinyà: Y esto, ¿es más peligroso?

Raul Caetano:  Sí, porque hay un mayor riesgo de intoxicación. Y claro está que, si uno está intoxicado y maneja, entonces es un problema muy serio. Y después hay la probabilidad mayor de involucrarse en otros tipos de accidentes. Todo puede pasar, ¿no?, con alguien que está intoxicado.

Pere Estupinyà:  Quizás muchos de nuestros oyentes observado visto esto alguna vez: hay muchas personas que beben cantidades moderadas, incluso altas, de alcohol diariamente y no llegan a tener una adicción o una dependencia, y otras que sí. ¿A qué se debe esta diferencia?

Raul Caetano: Bueno, hay una serie de factores ahí. Por ejemplo, sabemos que los factores genéticos son importantes porque se observa que el alcoholismo, aunque no ocurre en todos lo miembros de una familia, cuando sí ocurre en una familia hay una probabilidad mayor de que otras personas en la familia tengan el problema del alcohol también. Ahora, puede que sea un factor genético o puede ser que sea un factor del ambiente en que la familia está. Puede ser una combinación de ambos. Después hay también otras situaciones ambientales, por ejemplo sabemos que hay profesiones donde se bebe mucho más que en otras, entonces el individuo puede tener un círculo de amistades que son bebedores fuertes y empieza a beber fuertemente también y termina por tener problemas de alcohol.

Pere Estupinyà:¿Cómo podría deducir alguien que él mismo o su pareja o un amigo, a pesar de tener una conducta normal en lo referente al alcohol, pero que bebe unas cantidades moderadas, ¿cómo podría deducir que tiene una propensión a tener dependencia?

Raul Caetano:  Es difícil. Las personas que beben normalmente tienen la habilidad de controlar la ingestión de alcohol. O sea, si el individuo tiene la capacidad de controlar la ingestión de alcohol de acuerdo a las circunstancias del momento, entonces no hay problema. El problema empieza cuando el individuo pierde esta habilidad de controlar. O entonces el individuo empieza a tener problemas, por ejemplo, en el trabajo. O sea, que hay síntomas acá y allá de que el individuo está a punto de perder el control sobre la ingestión de alcohol.

Pere Estupinyà:¿Cuáles serían las consecuencias, los efectos del consumo diario de alcohol?

Raul Caetano:  En primer lugar es necesario saber cuál es la cantidad de alcohol que se puede recomendar que uno tome diariamente. Y en Estados Unidos la recomendación es que las mujeres tengan una dosis por día, no más, y los hombres una dosis.

Pere Estupinyà:¿A qué equivaldría esto?

Raul Caetano: Esto sería más o menos una copa de vino de mesa de 5 onzas o una dosis de destilados de una onza y media o una lata de cerveza de 12 onzas. Cuando una aumenta esta dosis, entonces uno empieza a tener un riesgo mayor de problemas crónicos o de problemas agudos. Los problemas crónicos son los problemas, en general, que afectan la salud. El principal, lo que se conoce mejor, es la cirrosis del hígado. La cirrosis es un problema muy grave que afecta a los que toman mucho. Hay problemas de otro tipo. Por ejemplo, hay distintos tipos de cáncer que afectan a  los que toman mucho, a los alcohólicos. Hay problemas de gastritis que aparecen después de que el individuo toma mucho por muchos años. Los problemas de tipo agudo pueden aparecer en cualquier momento. O sea, una persona puede beber muy normalmente pero, se va a una fiesta y toma como cinco dosis, llega a un estado de intoxicación,  sale de la fiesta, va a manejar y choca.

Pere Estupinyà: Claro, porque las consecuencias del consumo de alcohol van más allá de los efectos físicos. También hay consecuencias sociales, incluso sicológicas.

Raul Caetano:  Exactamente. Y en el caso de manejar embriagado hay consecuencias legales serias también. Así que el alcohol es una droga muy peligrosa porque es una droga que se puede comprar, que es legal, que causa muchos problemas, no solamente crónicos, sino también agudos.

Pere Estupinyà: Hay como una especie de trampa con eso del alcohol. Me refiero a que, por una parte, en cantidades moderadas no es perjudicial, incluso puede ser beneficioso para la salud cardiovascular, pero el exceso es muy perjudicial. Entonces, ¿dónde se encontraría este equilibrio?

Raul Caetano: Por esto es que está la recomendación de que las mujeres beban una dosis por día y los hombres dos. Porque a este nivel la posibilidad de problemas es casi ninguna. Claro está, si uno tiene problemas de salud serios, si uno toma algunos tipos de medicamentos, entonces la recomendación va a ser ningún alcohol. Por ejemplo, las mujeres embarazadas no deben tomar nada de alcohol.

Pere Estupinyà: Pero los últimos estudios también parece que haya más jóvenes alcoholizados de lo que se pensaba. Quizás muchos no sean ni conscientes de que tienen esa adicción. ¿Es real esa situación?

Raul Caetano:  Esa situación es más real entre los adolescentes blancos que entre los adolescentes hispanos. Lo que pasa con los adolescentes es que es un beber que es un beber especial, ¿no? Porque los adolescentes no pueden estar en un bar, no pueden beber en un restaurante, no pueden beber en la casa. Entonces, cuando beben, beben en locales donde no hay ningún control. En general beben en los coches o con los amigos o en los parques.  O sea, que no hay ningún control y, cuando toman, beben y se intoxican. Y entonces hay este nivel muy alto de riesgo, ¿no?

Pere Estupinyà:  Tendemos a pensar que es normal que el joven beba.  Forma casi parte de la adolescencia pero es un concepto equivocado porque además, quizás el beber a esas edades condiciona a que en un futuro haya problemas de alcohol.

Raul Caetano: Tenemos evidencia de que, cuanto más temprano el adolescente empiece a beber, mayor es el riesgo de desarrollar dependencia al alcohol cuando adulto.

Pere Estupinyà: Y los padres, primero, ¿cómo podrían detectar que su hijo tiene un problema de alcohol?

Raul Caetano: La primera cosa que los padres tienen que pensar es que todos los adolescentes tienen riego. Al momento en que los adolescentes llegan al último año de la high school (escuela secundaria), en general, el 80 por ciento ya ha bebido alcohol. Muchos padres piensan: ¡A no, con mi hijo esto no va a pasar!, y esto no es lo que uno debe pensar.  Uno debe estar atento, uno debe mantener una supervisión.  O sea, un adolescente que tiene una conducta normal y que va bien en la escuela de pronto empieza a mostrar algún disturbio de la conducta, empieza a ir mal en la escuela, los padres tienen que pensar: ¿Qué pasa acá?, tienen que pensar en la posibilidad del alcohol o de alguna otra droga.

Pere Estupinyà: Y si descubren que su hijo está consumiendo demasiada bebido, ¿pueden hacer algo ellos?

Raul Caetano:  Los padres tienen que estar presentes, mantener la supervisión y, si detectan que hay un problema, discutir el problema con el adolescente y buscar ayuda de un profesional especializado, y entonces el técnico de salud, el médico, el sicólogo, van a evaluar al adolescente de manera detallada y decidir si esto es una situación que merece, que necesite tratamiento o a penas consejería.

Pere Estupinyà: Hay otro tipo de accidentes que a veces pasa desapercibido que es cuando, por desconocimiento, se mezclan medicamentos con alcohol.

Raul Caetano: Sí.  Muchos de esos medicamentos tienen interacciones fuertes con el alcohol.  El mismo pasa con los que tienen problemas siquiátricos, con los que tienen depresión y que necesitan tomar medicamentos sicotrópicos. Y entonces lo que pasa es que, cuando se toma el medicamento junto con el alcohol, los efectos del medicamento y del alcohol son mucho mayores.

Pere Estupinyà: Ya para terminar, ¿qué le diría a alguien que, a pesar de estar escuchando esta entrevista considere que, en el fondo, el alcohol no es tan peligroso?

Raul Caetano: Yo le diría que es un error.  Que el alcohol es una droga muy peligrosa.  Es una droga que lleva a la dependencia y adicción en términos crónicos pero que también es una droga muy peligrosa en términos agudos. Todos deben mantener su ingestión de alcohol al nivel recomendado: una dosis para las mujeres, dos dosis para los hombres y, los que están enfermos y las mujeres embarazadas no deben tomar alcohol de ninguna forma.

Pere Estupinyà: Muchas gracias Dr. Caetano por compartir su tiempo con nosotros, y dedicar su vida profesional a mejorar la vida de las personas intentando entender y solucionar los problemas que causa el alcoholismo.
Les ha hablado Pere Estupinyá desde la Oficina de Comunicaciones en Español de los Institutos Nacionales de la Salud de EE.UU.

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