Una curva de crecimiento se utiliza para medir y comparar el crecimiento de un niño con lo que se considera normal para su edad y sexo. Las curvas de crecimiento aceptadas a nivel nacional están basadas en datos de mediciones recopilados por el Centro Nacional de Estadísticas sobre Salud (National Center for HealthStatistics ). Ellos tienen en cuenta la estatura, el peso y el perímetro cefálico.

Las mediciones de la estatura y el peso se usan para documentar:

• La estatura o talla del niño (en pulgadas o centímetros)
• El peso del niño (en onzas y libras o gramos y kilogramos) con base en la edad por semanas, meses y años.

La estatura de los niños menores de 3 años se mide cuando están acostados, mientras que la estatura de los niños de más de 3 años se mide cuando están parados. Las mediciones de estatura y peso se registran y grafican hasta que el niño cumple los 17 años.

El perímetro cefálico es una medida del tamaño de la cabeza que se toma envolviendo una cinta métrica por encima de las cejas y alrededor de la parte posterior del cráneo. Para obtener información específica sobre este tema, ver el artículo: perímetro cefálico.

Las mediciones de la curva de crecimiento se comparan con un rango estándar (normal) para niños del mismo sexo y edad. Las mediciones son importantes porque pueden suministrar una advertencia oportuna de que el niño tiene un problema médico. Por ejemplo, durante los primeros 18 meses de vida y en particular a comienzos de la lactancia, el crecimiento anormal de la cabeza puede alertar al médico acerca de un problema.

El crecimiento demasiado rápido del perímetro cefálico puede ser indicio de hidrocefalia (agua alrededor del cerebro), un tumor cerebral u otras afecciones que causen macrocefalia (cabeza anormalmente grande); mientras que un crecimiento demasiado lento puede ser una señal de problemas en el desarrollo cerebral, fusión temprana de las suturas (huesos del cráneo) u otros problemas.

Entre tanto, el aumento insuficiente de peso, estatura o ambas puede ser indicio de un retraso en el desarrollo, una enfermedad crónica, descuido u otros problemas.

El crecimiento anormal visto en las curvas de crecimiento es sólo un indicador de un problema potencial. Es importante que un médico realice un seguimiento para determinar si esto representa un problema médico real o simplemente se le debe hacer un seguimiento cuidadoso. Debido a las variaciones individuales en la genética y las hormonas, las curvas de crecimiento no son un factor de predicción preciso de la estatura madura y futura de un niño.