¿Qué es la apnea del sueño?
La apnea del sueño es un trastorno frecuente
en el que una persona tiene una o más pausas en la respiración o
tiene respiraciones superficiales durante el sueño.
Las pausas pueden durar entre unos pocos segundos y
varios minutos. A menudo ocurren entre 5 y 30 veces o más por hora. Por
lo general, la respiración vuelve a la normalidad, a veces con un
ronquido fuerte o con un sonido parecido al que una persona hace cuando se
atraganta.
Casi siempre la apnea del sueño es un
problema crónico (constante) de salud que altera el sueño 3 o
más noches por semana. La persona pasa de un sueño profundo a un
sueño liviano cuando hay una pausa en la respiración o cuando la
respiración se vuelve superficial.
Por esta razón, el sueño es de mala
calidad y se siente cansancio durante el día. La apnea del sueño
es una de las principales razones por las cuales una persona puede sentir mucho
sueño durante el día.
Revisión general
A menudo la apnea del sueño se queda sin
diagnosticar. Por lo general, los médicos no pueden detectarla durante
las consultas corrientes. Además, no hay pruebas de sangre para este
problema.
La mayoría de las personas que sufren apnea
del sueño no saben que la tienen porque sólo ocurre durante el
sueño. El primero en notar los signos de la apnea del sueño puede
ser un familiar o quien duerme en la misma cama con la persona afectada.
El tipo más común de apnea del
sueño es la apnea obstructiva. Esto significa por lo general que las
vías respiratorias se han estrechado o bloqueado durante el
sueño. El bloqueo puede causar respiración superficial o pausas
en la respiración.
Cuando la persona trata de respirar, el aire que
logra pasar por la parte obstruida puede causar ronquidos fuertes. La apnea
obstructiva del sueño se presenta con más frecuencia en personas
con
sobrepeso,
pero puede afectar a cualquiera.
La apnea central es un tipo menos frecuente de apnea
del sueño. Sucede cuando la parte del cerebro que controla la
respiración no envía las señales correctas a los
músculos respiratorios. La persona no hace esfuerzos por respirar
durante períodos cortos.
La apnea central casi siempre ocurre con la apnea
obstructiva, pero puede ocurrir sola. Por lo general, en la apnea central no se
producen ronquidos.
Este artículo se refiere principalmente a la
apnea obstructiva.
Perspectivas
La apnea del sueño que no recibe tratamiento
puede:
- Aumentar el riesgo de sufrir
presión
arterial alta,
ataque
cardíaco, derrame cerebral,
obesidad
y diabetes
- Aumentar el riesgo de que ocurra insuficiencia
cardíaca o de que ésta empeore
- Aumentar las probabilidades de que haya latidos
irregulares del corazón (arritmias)
- Aumentar las probabilidades de sufrir accidentes
automovilísticos o de trabajo
Los cambios en el estilo de vida, los dispositivos
que se usan en la boca, la cirugía o los dispositivos respiratorios
pueden tener éxito en el tratamiento de la apnea del sueño en
muchas personas.
Otros nombres de la apnea del sueño
- Trastorno respiratorio del sueño
- Respiración de Cheyne-Stokes
¿Cuáles son las causas de la apnea
del sueño?
Cuando usted está despierto, los
músculos de la garganta mantienen las vías respiratorias
rígidas y abiertas para que el aire pueda entrar a los pulmones. Cuando
duerme, estos músculos están más relajados. En condiciones
normales, el hecho de que los músculos de la garganta estén
relajados no impide que las vías respiratorias permanezcan abiertas
(despejadas) para permitir la entrada de aire a los pulmones.
Sin embargo, si usted tiene apnea obstructiva del
sueño, sus vías respiratorias pueden estar obstruidas o
estrechadas durante al sueño debido a que:
- Los músculos de la garganta y la lengua se
relajan más de lo normal.
- La lengua y las amígdalas (masas de tejido
que se encuentran en la parte de atrás de la boca) son grandes en
comparación con la abertura de la tráquea.
- Usted tiene
sobrepeso.
El tejido graso adicional puede engrosar las paredes de la tráquea. Esto
hace que la abertura interna se estreche y sea más difícil
mantenerla abierta.
- La forma de la cabeza y el cuello (la estructura
de los huesos) puede hacer que las vías respiratorias que se encuentran
en la boca y la garganta sean más pequeñas.
- El proceso de envejecimiento limita la capacidad
de las señales del cerebro de mantener los músculos de la
garganta rígidos durante el sueño. Así es más
probable que las vías respiratorias se estrechen o colapsen.
Si las vías respiratorias están total
o parcialmente bloqueadas durante el sueño, no entra suficiente aire a
los pulmones. Esto puede provocar ronquidos fuertes y una disminución de
las concentraciones de oxígeno en la sangre.
Cuando el oxígeno baja a concentraciones
peligrosas, obliga al cerebro a alterar el sueño. De esta forma se
tensan los músculos de las vías respiratorias altas y se abre la
tráquea. Entonces la respiración vuelve a la normalidad, a menudo
con un ronquido fuerte o con un sonido parecido al que una persona hace cuando
se atraganta. Los descensos frecuentes de las concentraciones de oxígeno
y la disminución de la calidad del sueño desencadenan la
liberación de hormonas del estrés. Estos compuestos aumentan la
frecuencia cardíaca y el riesgo de sufrir presión arterial alta,
ataque cardíaco, derrame cerebral y latidos irregulares del
corazón. Las hormonas también aumentan el riesgo de que haya
insuficiencia cardíaca o de que ésta empeore.
La apnea del sueño que no recibe tratamiento
también puede causar cambios en la forma en que el cuerpo usa la
energía. Estos cambios aumentan el riesgo de sufrir
obesidad
y diabetes.
¿Quiénes corren el riesgo de sufrir
apnea del sueño?
Se calcula que más de 12 millones de
estadounidenses adultos sufren apnea obstructiva del sueño. Más
de la mitad de las personas que sufren este problema de salud tienen
sobrepeso.
La apnea del sueño es más frecuente en
hombres. Uno de cada 25 hombres de edad madura y 1 de cada 50 mujeres de edad
madura sufren apnea del sueño.
La apnea del sueño se hace más
frecuente a medida que la persona envejece. Por lo menos 1 de cada 10 personas
mayores de 65 años sufre apnea del sueño. Las mujeres tienen
más probabilidades de sufrir apnea del sueño después de la
menopausia.
Los afroamericanos, los hispanos y los nativos de
las islas del Pacífico tienen más probabilidades de sufrir apnea
del sueño que los caucásicos.
Si una persona de su familia sufre apnea del
sueño, usted tiene más probabilidades de sufrirla.
Las personas que tienen disminuido el tamaño
de las vías respiratorias a la altura de la nariz, la garganta o la boca
también tienen más probabilidades de sufrir apnea del
sueño. Esto se puede deber a la forma de estas estructuras o a alergias
o problemas médicos de otro tipo que causen congestión en estas
zonas.
A menudo los niños pequeños tienen las
amígdalas más grandes de lo normal. Esto puede hacerlos
vulnerables a sufrir apnea del sueño.
Otros factores de riesgo de la apnea del
sueño son el hábito de fumar, la presión arterial alta y
los factores de riesgo del derrame cerebral o la insuficiencia cardíaca.
¿Cuáles son los signos y
síntomas de la apnea del sueño?
Signos y síntomas principales
Uno de los signos más frecuentes de la apnea
obstructiva del sueño son los ronquidos fuertes y crónicos
(constantes). Puede haber pausas entre los ronquidos. Después de las
pausas puede haber respiraciones entrecortadas o sonidos parecidos a los que
una persona hace cuando se atraganta.
Por lo general, los ronquidos son más fuertes
cuando usted duerme boca arriba y menos fuertes cuando duerme de lado. Es
posible que no ronque todas las noches. Con el tiempo, los ronquidos pueden
hacerse más frecuentes y más fuertes.
Usted está dormido cuando suceden los
ronquidos o sonidos. Probablemente no sabrá que está teniendo
problemas para respirar ni podrá determinar qué tan grave es el
problema. Sus familiares o la persona con quien duerme probablemente se
darán cuenta de estos problemas antes que usted.
No todas las personas que roncan tienen apnea del
sueño.
Otro signo frecuente de la apnea del sueño es
sentir mucho sueño durante el día, en el trabajo o al conducir un
auto. Usted puede darse cuenta de que se queda dormido rápidamente
durante los momentos tranquilos del día, cuando no está haciendo
nada.
Otros signos y síntomas
Entre otros signos y síntomas de la apnea del
sueño están:
- Dolores de cabeza por las mañanas
- Problemas de memoria o aprendizaje y dificultad
para concentrarse
- Sensación de irritabilidad o
depresión, o alteraciones del estado de ánimo o la
personalidad
- Necesidad de orinar por la noche
- Sequedad de la garganta al despertar
En los niños la apnea del sueño puede
causar hiperactividad, mal desempeño escolar y agresividad. Los
niños que sufren apnea del sueño también pueden tener
posiciones poco comunes para dormir, pueden orinarse en la cama, y durante el
día pueden respirar por la boca en vez de respirar por la nariz.
¿Cómo se diagnostica la apnea del
sueño?
Los médicos diagnostican la apnea del
sueño con base en la historia clínica, los antecedentes
familiares del paciente, el examen médico y los resultados de los
estudios de sueño. Por lo general, el médico del paciente
evalúa los síntomas primero. Luego decide si el paciente debe
consultar a un especialista del sueño.
Estos especialistas son médicos que
diagnostican los problemas del sueño y tratan a las personas que los
sufren. Entre ellos están especialistas de los pulmones, los nervios, el
oído, la nariz y la garganta. Otros tipos de médicos
también pueden ser especialistas del sueño.
Historia clínica y antecedentes
familiares
El médico les hará preguntas a usted y
a su familia sobre cómo duerme usted y cómo funciona durante el
día. Para ayudarle, piense en la posibilidad de llevar un diario de
sueño durante 1 ó 2 semanas. Anote cuánto duerme cada
noche y qué tanto sueño siente en distintos momentos del
día.
En la página Web
"Your
Guide to Healthy Sleep" (en inglés) del Instituto Nacional del
Corazón, los Pulmones y la Sangre encontrará un ejemplo de diario
de sueño.
El médico también querrá saber
qué tan fuertes y frecuentes son sus ronquidos, sonidos o respiraciones
entrecortadas durante el sueño. Por lo general usted no es consciente de
estos síntomas y debe pedirle a un familiar o a la persona con quien
duerme que le informe.
Si cree que uno de sus hijos puede tener apnea del
sueño, dígale al médico del niño cuáles son
los signos y síntomas.
Dígale al médico si a alguna persona
de la familia le han diagnosticado apnea del sueño o ha tenido
síntomas de este trastorno.
Muchas personas no se dan cuenta de sus
síntomas y se quedan sin diagnosticar.
Examen médico
El médico le examinará la boca, la
nariz y la garganta en busca de tejidos adicionales o agrandados. A menudo, los
niños que sufren apnea del sueño tienen las amígdalas
agrandadas. La exploración física y la elaboración de la
historia clínica pueden ser suficientes para diagnosticar la apnea del
sueño en niños.
Los adultos que sufren este trastorno pueden tener
la úvula (campanilla) o el velo del paladar aumentados de tamaño.
La úvula es el tejido que cuelga en la mitad de la parte de atrás
de la boca. El velo del paladar es el techo de la boca en la parte de
atrás de la garganta.
Estudios del sueño
El estudio del sueño es la prueba más
exacta para diagnosticar la apnea del sueño. Este estudio capta lo que
sucede con la respiración durante el sueño.
Casi siempre se realiza en un centro o laboratorio
especializado en sueño, que puede estar situado en un hospital. Usted
puede permanecer hospitalizado en este centro una noche.
Polisomnograma
El polisomnograma es el estudio más usado
para el diagnóstico de la apnea del sueño. Esta prueba registra:
- La actividad cerebral
- Los movimientos de los ojos y la actividad de
otros músculos
- Las frecuencias respiratoria y cardíaca
- La cantidad de aire que entra y sale de los
pulmones durante el sueño
- La cantidad de oxígeno de la sangre
El polisomnograma no duele nada. Usted se
dormirá como de costumbre, a excepción de que tendrá
sensores en el cuero cabelludo, la cara, el pecho, los brazos y piernas, y un
dedo de la mano. El personal del centro de sueño usará los
sensores para hacerle controles durante la noche.
Un especialista en sueño analizará los
resultados del polisomnograma para ver si usted tiene apnea del sueño y
qué tan intensa es. Luego usará los resultados para planear su
tratamiento.
¿Cómo se trata la apnea del
sueño?
Objetivos del tratamiento
Los objetivos del tratamiento de la apnea
obstructiva del sueño son:
- Restablecer la respiración uniforme
durante el sueño
- Aliviar los síntomas, como los ronquidos
fuertes y el sueño durante el día
El tratamiento puede contribuir a mejorar otros
problemas de salud relacionados con la apnea del sueño, como la
presión
arterial alta. El tratamiento también puede disminuir el riesgo de
sufrir enfermedad coronaria, derrame cerebral y diabetes.
Tipos específicos de tratamiento
Los cambios en el estilo de vida, los dispositivos
que se usan en la boca, los dispositivos respiratorios o la cirugía se
usan para el tratamiento de la apnea del sueño. Actualmente no hay
medicinas para tratar la apnea del sueño.
Los cambios en el estilo de vida o los dispositivos
que se usan en la boca pueden ser suficientes para aliviar la apnea leve del
sueño. Las personas que tengan la forma moderada o grave de la apnea del
sueño necesitarán también dispositivos respiratorios o
cirugía.
Cambios en el estilo de vida
Si usted tiene apnea leve del sueño es
posible que sólo necesite hacer unos cambios en sus actividades
cotidianas o hábitos.
- Evite el alcohol y las medicinas que le den
sueño. Estas sustancias le dificultan a la garganta permanecer despejada
durante el sueño.
- Baje de peso, si tiene
sobrepeso
o es obeso. Incluso una disminución leve del peso puede mejorar los
síntomas.
- Duerma de lado en vez de dormir boca arriba para
mantener la garganta despejada. Puede dormir con almohadas o camisas de pijama
especiales que le impidan dormir boca abajo.
- Mantenga las vías nasales despejadas por
la noche con atomizadores nasales o medicinas para la alergia si es necesario.
Pregúntele al médico si estos tratamientos pueden servirle.
- Deje de fumar.
Dispositivos que se usan en la boca
Estos dispositivos, que se llaman también
prótesis bucales, pueden servir para algunas personas que sufren apnea
leve del sueño. El médico también le puede recomendar
estos dispositivos si usted ronca fuertemente pero no tiene apnea del
sueño.
El odontólogo o el ortodoncista le pueden
hacer un dispositivo para la boca que sirva para el tratamiento de la apnea del
sueño. (El ortodoncista es un odontólogo especializado en
corregir los problemas de los dientes o de la mandíbula). El dispositivo
ajusta la mandíbula inferior y la lengua para mantener despejadas las
vías respiratorias durante el sueño.
Si usted usa un dispositivo en la boca es importante
que le avise al médico si siente molestias o dolor cuando lo usa. Es
posible que necesite consultas periódicas para que el médico
pueda ajustar el dispositivo de modo que le quede a la medida.
Dispositivos respiratorios
La presión positiva en las vías
respiratorias (CPAP, por su sigla en inglés) es el tratamiento
más frecuente para la apnea del sueño entre moderada e intensa en
adultos. El equipo de CPAP tiene una mascarilla que cubre la boca y la nariz, o
sólo la nariz. El equipo envía aire suavemente a la garganta.
El aire hace presión sobre las paredes de las
vías respiratorias. La presión del aire se ajusta para que sea
suficiente para evitar que las vías respiratorias se estrechen o
bloqueen durante el sueño.
El tratamiento de la apnea del sueño puede
servirle para dejar de roncar. Sin embargo, haber dejado de roncar no quiere
decir que usted ya no sufra apnea del sueño ni que pueda dejar de usar
la CPAP. La apnea del sueño volverá a ocurrir si se suspende la
CPAP o no se usa correctamente.
Por lo general un técnico irá a su
casa a llevar el equipo de CPAP. El técnico instalará el equipo y
lo ajustará según las indicaciones del médico. Es posible
que después de la instalación inicial haya que ajustar el equipo
de vez en cuando para obtener los mejores resultados.
El tratamiento con CPAP puede causar efectos
secundarios en algunas personas. Entre estos efectos están: sequedad o
congestión nasal, irritación de la piel de la cara, dolor en los
ojos y dolores de cabeza. Si el equipo de CPAP no está bien ajustado
usted puede sentir molestias y tener el estómago lleno de gases cuando
esté usando la mascarilla.
Si la CPAP produce efectos secundarios, colabore con
el especialista del sueño, su personal de enfermería y el
técnico de CPAP. Entre todos podrán tomar medidas para disminuir
estos efectos secundarios. Las medidas pueden consistir en ajustar los
controles del equipo de CPAP o el tamaño o ajuste de la mascarilla, o en
agregar humedad al aire que fluye por la mascarilla. La nariz seca, tapada o
congestionada se puede aliviar con un atomizador nasal.
Hay muchos tipos diferentes de equipos y mascarillas
de CPAP. Dígale al médico si no está satisfecho con el que
está usando. El médico puede sugerirle que cambie a otro tipo que
funcione mejor en su caso.
Por lo general, las personas con síntomas de
apnea intensa del sueño se sienten mucho mejor cuando comienzan el
tratamiento con CPAP.
Cirugía
Algunas personas con apnea del sueño se
pueden beneficiar de la cirugía. El tipo de cirugía y el efecto
que ésta tenga dependen de la causa de la apnea del sueño.
La cirugía se realiza para ensanchar las
vías respiratorias. Por lo general consiste en retirar, encoger o tensar
el exceso de tejido de la boca y la garganta, o en reajustar la
mandíbula inferior.
La cirugía para encoger o tensar el exceso de
tejido de la boca y la garganta se realiza en el consultorio médico o en
un hospital. Para encoger el tejido se pueden usar inyecciones pequeñas
o tratamientos distintos del tejido. A veces se necesitan varios tratamientos
para encoger el exceso de tejido. Para tensar el exceso de tejido, el
médico hace un corte pequeño en el tejido e inserta un trozo
pequeño de plástico rígido.
La cirugía para retirar el exceso de tejido
se realiza sólo en un hospital. Usted recibe unas medicinas que lo hacen
dormir durante la cirugía. Después de la cirugía usted
puede tener dolor de garganta durante 1 ó 2 semanas.
En algunos niños puede ser muy útil
retirar las amígdalas, si éstas están bloqueando las
vías respiratorias. El médico de su niño puede aconsejar
esperar un tiempo para ver si estos tejidos se encogen por su cuenta. Esto
sucede con frecuencia cuando los niños crecen.
Vivir con apnea del sueño
La apnea obstructiva del sueño puede ser muy
grave. Sin embargo, el cumplimiento de un plan eficaz de tratamiento casi
siempre mejora mucho la calidad de vida.
El tratamiento puede mejorar el sueño y
aliviar el cansancio durante el día. También puede disminuir las
probabilidades de sufrir presión arterial alta, enfermedad coronaria y
otros problemas de salud relacionados con la apnea del sueño.
El tratamiento puede mejorar su salud en general y
su bienestar, al igual que la calidad de su sueño (y posiblemente la
calidad del sueño de su familia).
Necesidades continuas de atención
médica
Vaya a controles médicos periódicos
para asegurarse de que el tratamiento esté surtiendo efecto.
Dígale al médico si el tratamiento produce efectos secundarios
que usted no puede soportar.
Esta atención continua es de especial
importancia si usted está recibiendo tratamiento de presión
positiva en las vías respiratorias (CPAP). Usted puede tardar un tiempo
en acostumbrarse a la CPAP.
Si no se siente cómodo con el equipo de CPAP
o éste no parece surtir efecto, avísele al médico. Es
posible que tenga que cambiar a un equipo o mascarilla diferente.
También es posible que necesite tratamiento para aliviar los efectos
secundarios de la CPAP.
Trate de no subir de peso. El aumento de peso puede
empeorar la apnea del sueño y exigir ajustes del equipo de CPAP. Por el
contrario, la pérdida de peso puede aliviar la apnea del
sueño.
Hasta que esté recibiendo un tratamiento
adecuado para la apnea del sueño, esté consciente de los peligros
de conducir o de manejar equipos pesados cuando se sienta con sueño.
Si va a tener alguna cirugía en la que se
requieran medicamentos para dormirlo, avíseles al cirujano y a los otros
médicos que usted tiene apnea del sueño. Ellos podrían
tomar medidas adicionales para asegurarse de que sus vías respiratorias
permanezcan despejadas durante la cirugía.
¿Qué pueden hacer los
familiares?
A menudo la persona que sufre apnea del sueño
no sabe que la tiene. No se da cuenta de que su respiración se
interrumpe y reanuda muchas veces durante el sueño. Casi siempre los
miembros de la familia o la persona que duerme con ella son los primeros en
notar los signos de la apnea del sueño.
Los familiares pueden hacer muchas cosas para ayudar
a un ser querido que tiene apnea del sueño.
- Avisarle a esa persona si ronca fuertemente
durante el sueño o si su respiración se detiene y vuelve a
comenzar.
- Animarlo a buscar atención médica.
- Ayudarle a cumplir el plan de tratamiento,
incluso la CPAP.
- Darle apoyo emocional.
Puntos clave
- La apnea del sueño es un trastorno
respiratorio frecuente en el que una persona tiene una o más pausas en
la respiración o tiene respiraciones superficiales durante el
sueño.
- Casi siempre la apnea del sueño es un
problema crónico (constante) de salud que altera el sueño 3 o
más noches por semana.
- A menudo la apnea del sueño se queda sin
diagnosticar. Por lo general, los médicos no pueden detectarla durante
las consultas corrientes. Además, no hay pruebas de sangre para este
problema. La mayoría de las personas que sufren apnea del sueño
no saben que la tienen porque sólo ocurre durante el sueño.
- El tipo más común de apnea del
sueño es la apnea obstructiva del sueño. Esto significa por lo
general que las vías respiratorias se han colapsado o bloqueado durante
el sueño. Esta situación puede causar respiraciones superficiales
o pausas en la respiración.
- La apnea del sueño puede causarle
sueño durante el día, empeorar algunos problemas de salud o
aumentar el riesgo de que se presenten, y aumentar las probabilidades de sufrir
un accidente automovilístico o de trabajo.
- Se calcula que más de 12 millones de
estadounidenses adultos sufren apnea del sueño. Más de la mitad
de las personas que sufren este problema de salud tienen
sobrepeso.
- Los signos más frecuentes de la apnea del
sueño son los ronquidos fuertes, los ahogos o respiraciones
entrecortadas durante el sueño y el exceso de sueño durante el
día.
- Los médicos diagnostican la apnea del
sueño con base en la historia clínica del paciente, sus
antecedentes familiares, la exploración física y los resultados
de los estudios de sueño.
- El tratamiento se dirige al restablecimiento de
la respiración uniforme durante el sueño y al alivio de los
síntomas. El tratamiento también puede servir para otros
problemas de salud relacionados con la apnea del sueño.
- Los cambios en el estilo de vida, los
dispositivos para la boca, los dispositivos respiratorios o la cirugía
se usan para el tratamiento de la apnea del sueño. La presión
positiva en las vías respiratorias (CPAP, por su sigla en inglés)
es el tratamiento más frecuente para la apnea del sueño entre
moderada e intensa.
- La apnea del sueño puede ser grave. Sin
embargo, el cumplimiento de un plan eficaz de tratamiento casi siempre mejora
mucho la calidad de vida. Vaya a controles médicos periódicos
para asegurarse de que el tratamiento esté surtiendo efecto.
Dígale al médico si el tratamiento produce efectos secundarios
que usted no puede soportar.
- Los familiares de una persona que ronca
fuertemente o que deja de respirar durante el sueño pueden ayudarle
recomendándole que busque atención médica.
- El tratamiento puede mejorar su salud en general
y su bienestar, al igual que la calidad de su sueño (y posiblemente la
calidad del sueño de su familia).
Enlaces a otras fuentes de información sobre
la apnea del sueño
Recursos del NHLBI (solo en inglés)
Recursos que no pertenecen al NHLBI (en
español)
Estudios clínicos (solo en
inglés)
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