El NIAID crea una Sección de Descubrimiento de Vacunas contra el VIH
El Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas (NIAID, por sus siglas en inglés) ha creado una nueva Sección de Descubrimiento de Vacunas dentro del Programa de Investigación de Vacunas en la División de SIDA (DAIDS). Esta sección trabajará para integrar los descubrimientos nacionales e internacionales sobre el VIH y la formulación y evaluación de vacunas mediante vigilancia de los adelantos científicos en varios campos relacionados con el descubrimiento de vacunas contra el VIH, el cierre de la brecha entre los científicos dedicados a la investigación básica y los formuladores de vacunas contra el VIH y la promoción de investigaciones pertinentes para compensar las disparidades en materia de conocimientos sobre la vacuna preventiva contra el VIH.
Además, la sección determinará las prioridades de financiamiento de las investigaciones sobre vacunas y supervisará las subvenciones y los contratos externos para apoyar las investigaciones sobre virología e inmunología relacionadas con novedosos conceptos en materia de vacunas, mientras se fomenta la elaboración y el suministro de los productos y recursos de investigación necesarios. La Sección de Descubrimiento de Vacunas se encargará de la principal tarea de supervisión del Centro de Inmunología de las Vacunas contra el VIH/SIDA (CHAVI), un consorcio de universidades y centros médicos académicos establecido por el NIAID para resolver los problemas más apremiantes en materia de elaboración y formulación de vacunas contra el VIH.
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Mayor probabilidad de coágulos sanguíneos en personas infectadas por el VIH
En un reciente estudio retrospectivo, varios investigadores determinaron que las personas infectadas por el VIH presentan una probabilidad diez veces mayor de tener coágulos sanguíneos conocidos como tromboembolia venosa (TEV), en comparación con quienes no están infectadas. La TEV puede ocurrir en las venas profundas del cuerpo o en las arterias entre el corazón y los pulmones y causar complicaciones graves, potencialmente mortales.
Los investigadores del estudio no observaron ninguna relación entre el tratamiento antirretroviral y la TEV y, por lo general, las personas que sufrieron incidentes de TEV presentaron menores concentraciones de hemoglobina, un menor recuento de linfocitos CD4 y una mayor carga viral antes de los incidentes de TEV que los testigos.
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