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La exenatida se usa en combinación con metformina, una sulfonilurea o un medicamento derivado de la tiazolidinediona para tratar la diabetes Tipo 2 (enfermedad en la que el cuerpo no puede usar la insulina de manera normal y, por consiguiente, no puede controlar las concentraciones de azúcar en la sangre). La exenatida pertenece a una clase de medicamentos llamados miméticos de la incretina. Actúa estimulando el páncreas para que secrete insulina cuando las concentraciones de azúcar en la sangre son altas. La insulina ayuda a pasar el azúcar de la sangre a otros tejidos del cuerpo, donde se usa para obtener energía. La exenatida también hace más lento el vaciado del estómago y disminuye el apetito. La exenatida no se usa para tratar la diabetes Tipo 1 (enfermedad en la que el cuerpo no produce insulina y, por consiguiente, no puede controlar las concentraciones de azúcar en la sangre). La exenatida no se usa en lugar de la insulina para tratar a las personas con diabetes que necesitan insulina.
La exenatida viene en forma de una solución (líquido), dentro de una jeringa dosificadora con cartucho, que se inyecta por vía subcutánea (debajo de la piel). Por lo general, se inyecta dos veces al día dentro de los 60 minutos previos a las comidas de la mañana y la noche. La exenatida no debe inyectarse después de las comidas. Posiblemente su médico le recete al principio una dosis baja de exenatida y luego la cambie a una jeringa dosificadora con una dosis más alta del medicamento si el control del azúcar en la sangre no ha mejorado después de usar exenatida por 1 mes. Siga cuidadosamente las instrucciones de la receta y pídales a su médico o farmacéutico que le expliquen cualquier cosa que no entienda. Use la exenatida según lo indicado. No aumente ni disminuya la dosis, ni la use con más frecuencia que la indicada por su médico.
La exenatida controla la diabetes, pero no la cura. Siga usando la exenatida aunque se sienta bien. No deje de usar la exenatida sin consultar a su médico.
La exenatida viene en forma de jeringas dosificadoras previamente llenadas, que contienen medicamento suficiente para 60 dosis (dos dosis diarias por 1 mes). Necesitará adquirir las agujas por separado. Pregúntele a su médico o a su farmacéutico qué tipo de agujas necesitará para inyectarse el medicamento. No olvide leer y entender las instrucciones del fabricante para inyectarse la exenatida con la jeringa dosificadora. Además, cerciórese de que sabe cómo y cuándo usar una nueva jeringa dosificadora. Pídale a su médico o a su farmacéutico que le muestren cómo usarla correctamente. Siga al pie de la letra las instrucciones. Nunca retire el cartucho de la jeringa ni trate de agregarle otro tipo de medicamento al cartucho.
Siempre inspeccione visualmente la solución de exenatida antes de inyectársela. Debe ser transparente, incolora y tan líquida como el agua. Nunca use una solución de exenatida que se vea de algún color, turbia, espesa o que contenga partículas sólidas; tampoco la use después de la fecha de vencimiento indicada en el frasco.
Nunca reutilice las agujas ni comparta con otras personas las agujas o jeringas dosificadoras. Retire siempre la aguja inmediatamente después de inyectarse la dosis. Deseche las agujas usadas en un recipiente especial para desechos punzantes. Pregúntele a su médico o a su farmacéutico cómo desechar correctamente el recipiente especial para desechos punzantes.
La exenatida puede inyectarse en el muslo, el abdomen (vientre) o el brazo. Use un sitio diferente para cada inyección, aproximadamente a 2,5 cm (1 pulg) del lugar de la inyección anterior, pero en la misma zona general (por ejemplo, el muslo). Use todos los sitios posibles de cada zona general antes de cambiar a otra (por ejemplo, el brazo). No use el mismo lugar de inyección más de una vez al mes.
A veces se receta este medicamento para otros usos; pídale más información a su médico o farmacéutico.
Antes de que le apliquen la inyección de exenatida,
Siga todas las recomendaciones en cuanto a dieta y actividad física que le haga su médico o dietista. Es importante que adopte una dieta saludable.
El alcohol puede causar una reducción del azúcar en la sangre. Pregúntele a su médico si puede consumir bebidas alcohólicas con seguridad mientras esté tomando exenatida.
Salte la dosis que olvidó y reanude su horario normal de medicación. No se inyecte una dosis doble para compensar la que olvidó.
Este medicamento puede alterar las concentraciones de azúcar en la sangre. Debe saber cuáles son los síntomas de las altas y bajas concentraciones de azúcar en la sangre y qué debe hacer cuando tiene esos síntomas.
Puede presentar hipoglucemia (bajo nivel de azúcar en la sangre) mientras toma este medicamento. Su médico le dirá qué hacer en caso de tener hipoglucemia. Posiblemente le diga que debe controlar el azúcar en la sangre, consumir algún alimento o bebida que contenga azúcar, como un caramelo duro o un jugo de fruta, o que busque atención médica. Siga las instrucciones al pie de la letra si tiene cualquiera de estos síntomas de hipoglucemia:
Si la hipoglucemia no se trata, pueden aparecer síntomas graves. Hágales saber a sus familiares, amigos y otras personas que le acompañen que si presenta cualquiera de estos síntomas, deben solicitar atención médica inmediata para usted:
Llame a su médico de inmediato si presenta cualquiera de estos síntomas de hiperglucemia (nivel alto de azúcar en la sangre):
Si las altas concentraciones de azúcar en la sangre no son tratadas, pueden degenerar en una afección denominada cetoacidosis diabética, que pone la vida en riesgo. Llame a su médico de inmediato si presenta cualquiera de estos síntomas:
La exenatida inyectable puede provocar efectos secundarios. Avísele a su médico si cualquiera de estos síntomas es grave o no desaparece:
Algunos efectos secundarios pueden ser graves. Si presenta alguno de estos síntomas, llame a su médico de inmediato:
La exenatida puede provocar otros efectos secundarios. Llame a su médico si tiene algún problema inesperado mientras toma este medicamento.
Si desarrolla un efecto secundario grave, usted o su doctor puede enviar un informe al programa de divulgación de efectos adversos 'MedWatch' de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por su sigla en inglés) en la página de Internet [http://www.fda.gov/MedWatch/report.htm] o por teléfono al 1-800-332-1088.
Guarde en su empaque original las jeringas dosificadoras con cartucho que no esté usando, para protegerlas de la luz. Una vez en uso, manténgalas a temperatura ambiente [hasta 77° F (25° C)] pero protegidas de la luz. No las congele. No use la exenatida si se congeló. No guarde las jeringas dosificadoras de exenatida con la aguja puesta. Mantenga las jeringas dosificadoras de exenatida fuera del alcance de los niños.
Si va a viajar, asegúrese de mantenerlas secas. Refrigere o guarde en un lugar frío [36 a 46°F (2 a 8°C)] las jeringas dosificadoras sin usar; puede almacenar las jeringas dosificadoras que esté usando a temperatura ambiente [hasta 77° F (25° C)] (no las ponga en la guantera de un vehículo ni en otros lugares calientes).
Anote la fecha en que empieza a usar cada jeringa dosificadora de exenatida y deséchela después de 30 días, aunque aún quede un poco de solución en la jeringa. Deseche todas las jeringas dosificadoras de exenatida que estén vencidas o que ya no necesite. Pregúntele a su farmacéutico cuál es la manera adecuada de desechar los medicamentos.
En caso de una sobredosis, llame a la oficina local de control de envenenamiento al 1-800-222-1222. Si la víctima está inconsciente, o no respira, llame inmediatamente al 911.
Los síntomas de sobredosis son, entre otros:
No falte a ninguna cita con su médico y con el laboratorio. Mida con regularidad sus concentraciones de azúcar en la sangre y hemoglobina glucosilada (HbA1c) para evaluar su respuesta a la exenatida. Además, su médico le indicará cómo comprobar su respuesta a este medicamento midiendo en casa sus concentraciones de azúcar en la sangre u orina. Siga al pie de la letra esas instrucciones.
Vaya al dentista dos veces al año; consulte periódicamente al oculista; mídase con regularidad la presión arterial.
Mantenga una buena higiene personal y la ropa limpia. Lave rápidamente los cortes, las raspaduras y otras heridas, y no permita que se infecten. Use una identificación de alerta médica (brazalete o etiqueta) que diga que usted es diabético.
No deje que ninguna otra persona use su medicamento. Pregúntele a su farmacéutico cómo puede volver a surtir su receta.
Es importante que Ud. mantenga una lista escrita de todas las medicinas que Ud. está tomando, incluyendo las que recibió con receta médica y las que Ud. compró sin receta, incluyendo vitaminas y suplementos de dieta. Ud. debe tener la lista cada vez que visita su médico o cuando es admitido a un hospital. También es una información importante en casos de emergencia.
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Documento actualizado - 01/02/2008
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Página actualizada: 23 abril 2009 |