skip navigation National Institute on Deafness and Other Communication Disorders (NIDCD): Improving the lives of people who have communication disorders
One of the National Institutes of Health
Change text size:   S   M   L A-Z Site Index

Los trastornos del olfato

En está página:

Cada año, miles de personas desarrollan problemas con el sentido del olfato. De hecho, más de 200.000 personas visitan al médico anualmente en busca de ayuda con los trastornos del olfato o problemas relacionados. Si usted experimenta un problema con su sentido del olfato, llame a su doctor. Esta hoja informativa ofrece información sobre el olfato y los trastornos del olfato.

Muchas personas que tienen trastornos del olfato también notan que tienen problemas con el sentido del gusto. Si usted desea contar con más información acerca del sentido del gusto, la hoja informativa Los trastornos del gusto, puede responder a algunas de sus preguntas. Si usted necesita una copia, llame al Centro de Distribución de Información de NIDCD al (800) 241-1044.

Cada año, miles de personas desarrollan problemas con su sentido del olfato.

¿Como funciona nuestro sentido del olfato?

El sentido del olfato forma parte de nuestro sistema sensorial químico, o los quimiosensores. Las células sensoriales en nuestra nariz, boca y garganta tienen la función de ayudarnos a interpretar los olores, así como los sabores. Las moléculas microscópicas que se liberan a nuestro alrededor (por los alimentos, las flores, etc.) son las que van a estimular estas células sensoriales. Una vez que las células detectan las moléculas envían un mensaje a nuestro cerebro, donde el olor es identificado.

Las células olfativas o células nerviosas del olfato, son estimuladas por los olores que están a nuestro alrededor, como el de una Gardenia o el del pan que está en el horno. Estas células nerviosas se encuentran en la parte superior del interior de la nariz y se conectan directamente al cerebro. Nuestro sentido del olfato es también influido por algo llamado el sentido químico común. Este sentido incluye las terminaciones nerviosas en nuestros ojos, nariz, boca y garganta, especialmente en las superficies húmedas. Más allá del olfato y el gusto, estas terminaciones nerviosas nos ayudan a sentir otras sensaciones que son estimuladas por diferentes sustancias, y que producen lágrimas en los ojos al cortar una cebolla o la sensación refrescante de la menta.

Es una sorpresa para muchas personas saber que los sabores se reconocen principalmente a través del sentido del olfato. Junto con la textura, la temperatura, y las sensaciones que son recibidas por el sentido químico común, la percepción del sabor es una combinación de los olores y sabores. Sin las células olfativas, los sabores familiares como el café o las naranjas serían más difíciles de distinguir.

Arriba

¿Cuáles son los trastornos del olfato?

Las personas con trastornos del olfato pueden sufrir: una pérdida en su capacidad de oler o cambios en la percepción de los olores. En cuanto a la pérdida del sentido del olfato, algunas personas tienen hiposmia, que es cuando se reduce su capacidad de detectar olor. Otras personas directamente no pueden detectar los olores en absoluto, lo que se llama anosmia. En cuanto a los cambios en la percepción de los olores, algunas personas notan que los olores familiares se distorsionan, o que un olor que por lo general es agradable, huele mal. Incluso, otras personas pueden percibir un olor que no está presente en absoluto.

Arriba

¿Cuál es la causa de los trastornos del olfato?

Los trastornos del olfato tienen muchas causas, algunas más claras que otras. La mayoría de las personas comienzan a sufrir trastornos del olfato después de haber tenido algunas enfermedades o lesiones recientes. Los factores desencadenantes más comunes son las infecciones de las vías respiratorias superiores y los traumatismos encéfalocraneano.

Entre otras causas que producen trastornos del olfato se encuentran los pólipos en las fosas nasales, las infecciones de los senos paranasales, los trastornos hormonales y los problemas dentales. La exposición a ciertos productos químicos como los insecticidas y solventes, y algunos medicamentos también ha estado asociada con trastornos de olfato. Las personas con cáncer en la cabeza y cuello que reciben tratamiento con radioterapia también experimentan problemas con su sentido del olfato.

Arriba

¿Cómo se diagnostican los trastornos de olfato?

Los doctores y los científicos han desarrollado pruebas para determinar el grado y la naturaleza de los trastornos del olfato en las personas. Las pruebas están diseñadas para medir la menor cantidad de olor que los pacientes pueden detectar, así como la exactitud para identificar diferentes olores. En realidad, una prueba fácilmente aplicada es la de "raspar y oler", en la cual la persona debe raspar muestras de papel tratado para liberar diferentes aromas que deberá oler e identificar dentro de una lista de posibilidades. De esta forma, los doctores podrán determinar fácilmente si los pacientes tienen hiposmia, anosmia u otra clase de trastorno del olfato.

Arriba

¿Son graves los trastornos de olfato?

Sí. Como todos nuestros sentidos, el sentido del olfato desempeña un papel importante en nuestras vidas. El sentido del olfato a menudo es la primera señal que nos alerta sobre el humo de un incendio o el olor de una fuga de gas natural y gases peligrosos. Quizás lo más importante es que nuestros quimiosensores también son a veces los que dan la primera señal sobre problemas graves en la salud. La obesidad, diabetes, hipertensión, malnutrición, la enfermedad de Parkinson, la enfermedad de Alzheimer, la esclerosis múltiple y la psicosis de Korsakoff están todas acompañadas o dan como señal problemas quimiosensoriales como trastornos del olfato.

Arriba

¿Pueden ser tratados los trastornos de olfato?

Sí. Algunas personas experimentan alivio de los trastornos de olfato. Ya que ciertos medicamentos pueden causar problemas, al ajustar o cambiar la medicación se puede aliviar su efecto sobre el sentido del olfato. Otros recuperan la capacidad para oler cuando se resuelve la enfermedad que causa los problemas olfativos. Para los pacientes con obstrucciones nasales como los pólipos, la cirugía puede eliminar las obstrucciones y restaurar el flujo de aire. Muchas veces, las personas gozan de una recuperación espontánea porque las neuronas olfativas pueden regenerarse después del daño.

Arriba

¿Qué investigación se está haciendo?

NIDCD apoya las investigaciones básicas y clínicas de los trastornos de los quimiosensores en las instituciones en todo el país. Algunos de estos estudios se realizan en varios centros de investigación de quimiosensores, donde los científicos están haciendo adelantos que les ayuden a comprender el olfato y éstos pueden conducir a nuevos tratamientos para los trastornos del olfato.

Alguna de la investigación más reciente sobre nuestro sentido del olfato es también la más apasionante. Aunque una comprensión completa del sentido del olfato, que es muy complejo, está todavía en desarrollo, estudios recientes sobre cómo los receptores reconocen los olores, junto con nueva tecnología, han revelado algunos secretos de cómo el olfato maneja la detección y discrimina entre los muchos compuestos químicos que forman los olores. Además de revelar los mecanismos físicos que usa nuestro cuerpo para identificar los olores, estos resultados están ayudando a los científicos a considerar el olfato como un modelo para otros sistemas sensoriales moleculares del cuerpo. Aún más, los científicos están seguros de que están ahora en posición de entender los detalles más sutiles acerca de nuestro sentido del olfato, una investigación que puede ayudarles a comprender cómo el olfato afecta e interactúa con otros procesos fisiológicos.

Desde que los científicos empezaron a estudiar el sistema olfativo, mucho se ha descubierto acerca de cómo funcionan los quimiosensores y cómo son afectados por el envejecimiento. Al igual que otros sentidos de nuestro cuerpo, el olfato puede resultar muy afectado por el envejecimiento. En realidad, los científicos han encontrado que el sentido del olfato empieza a disminuir después de los 60 años de edad. Las mujeres, a todas las edades, son en general más exactas que los hombres al identificar los olores, aunque el tabaquismo puede perjudicar esa capacidad en hombres y mujeres.

Otra área del descubrimiento ha sido la reacción del sistema olfativo a diferentes medicamentos. Igual que el sentido del gusto, el sentido del olfato puede ser dañado por ciertos medicamentos. Sorprendentemente, otros medicamentos, especialmente aquellos prescritos para las alergias, han sido asociados a una mejoría en el sentido del olfato. Los científicos están trabajando para determinar por qué esto es así, y desarrollar medicamentos que puedan usarse específicamente para ayudar a restaurar el sentido del olfato en los pacientes que lo han perdido. Además, las células de olfato (junto con las células del sabor) son las únicas células sensoriales que regularmente se reemplazan a lo largo de toda la vida. Los científicos están examinando estos fenómenos, que pueden proporcionar formas de reemplazar éstas y otras células sensoriales y nerviosas dañadas.

Las metas de los programas de investigación de NIDCD para las ciencias quimiosensoriales incluyen:

  • La promoción de la regeneración de las células sensoriales y nerviosas.
  • El impacto de los efectos del ambiente (como emisiones de gasolina, productos químicos y condiciones extremas de humedad relativa y temperatura) sobre el olfato y el gusto.
  • La prevención de los efectos del envejecimiento.
  • La prevención de que los agentes infecciosos y las toxinas alcancen al cerebro a través del nervio olfativo.
  • El desarrollo de nuevas pruebas de diagnóstico.
  • El conocimiento de las asociaciones entre los trastornos quimiosensoriales y la alimentación alterada en el envejecimiento, así como en diversas enfermedades crónicas.
  • La mejora de los métodos de tratamiento y las estrategias de rehabilitación.

Arriba

¿Qué puedo hacer para ayudarme?

La mejor cosa usted puede hacer es ver a un doctor. El diagnóstico adecuado por un profesional especializado, como un otorrinolaringólogo, es importante. Estos médicos se especializan en los trastornos de la cabeza y el cuello, especialmente aquellos que se relacionan con el oído, la nariz y la garganta. El diagnóstico puede conducir a un tratamiento efectivo de la causa subyacente de su trastorno del olfato. Muchos tipos de trastornos del olfato son curables, y para aquellos que no lo son, existen programas de orientación para ayudar a los pacientes a que hagan frente a la situación.

Arriba

¿Cómo puedo obtener mayor información?

El NIDCD mantiene un directorio de organizaciones que pueden responder sus preguntas y proporcionarle información, por escrito o en formato electrónico, acerca de este tema. La lista de organizaciones está localizada en www.nidcd.nih.gov/directory. Actualmente, el directorio por Internet está disponible solamente en inglés.

Use las siguientes palabras claves para ayudarle a localizar las organizaciones de mayor relevancia:

En la casilla titulada “browse by topic” (“Busque por tema”) haga clic en “Smell and Taste” (“Olfato y Gusto”) para localizar organizaciones relevantes con los trastornos del olfato.

Para mayor información, direcciones y números telefónicos adicionales o para recibir una lista de las organizaciones por escrito, contacte a:

NIDCD Information Clearinghouse
1 Communication Avenue
Bethesda, MD 20892-3456
Número de Teléfono Gratuito: (800) 241-1044
Número Gratuito de TTY: (800) 241-1055
Fax: (301) 770-8977
Correo electrónico: nidcdinfo@nidcd.nih.gov



Publicación de NIH No. 01-3231
Actualizada en marzo de 2004


letter Envíe este enlance
printer
publications Solicite publicaciones gratuitas
magnifying glass Encuentre otras organizaciones
 
Temas Relacionados:
El gusto y los trastornos del gusto
 
También Disponible En:
Ingles

National Institute on Deafness and Other Communication Disorders. Celebrating 20 years of research: 1988 to 2008