Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades (ATSDR)
Resumen de Salud Pública
HMX
CAS#: 2691-41-0
septiembre de 1997
Esta publicación es un resumen de la Reseña Toxicológica del HMX y forma parte de una serie de resúmenes
de salud pública sobre sustancias peligrosas y sus efectos sobre la salud. También hay una versión abreviada, ToxFAQs™,
disponible. Esta información es importante porque se trata de una sustancia que podría ser nociva para la salud. Los efectos sobre
la salud de la exposición a cualquier sustancia peligrosa van a depender de la dosis, la duración y el tipo de exposición, la
presencia de otras sustancias químicas, así como de las características y los hábitos de la persona. Si desea información
adicional, comuníquese con el Centro de Información de la ATSDR al 1-888-422- 8737.
Este resumen de salud pública le informa acerca del HMX y de los efectos de la exposición a esta sustancia.
La Agencia
de Protección del Medio Ambiente de EE. UU. (EPA, por sus siglas en inglés) identifica
los sitios de desechos peligrosos más serios en la nación. La EPA luego coloca estos sitios en
la Lista
de Prioridades Nacionales (NPL, por sus siglas en inglés) y los designa para limpieza a largo
plazo por parte del gobierno federal. El HMX se ha encontrado en por lo menos 10 de los 1,416 sitios actualmente en la NPL o que formaron parte
de la NPL en el pasado. Aunque el número total de sitios de la NPL en los que se ha buscado esta sustancia no se conoce, el número
de sitios en que se encuentre HMX puede aumentar a medida que se evalúan más sitios. Esta información es importante porque estos
sitios pueden constituir fuentes de exposición, y la exposición a esta sustancia puede perjudicarlo.
Cuando una sustancia se libera desde un área extensa, por ejemplo desde una planta industrial, o desde un recipiente como un barril o una
botella, la sustancia entra al ambiente. Esta liberación no siempre conduce a exposición. Usted puede exponerse a una sustancia solamente
cuando entra en contacto con ésta-al inhalar, comer o beber la sustancia, o por contacto con la piel.
Hay muchos factores que determinan si la exposición al HMX lo perjudicará. Estos factores incluyen la dosis (la cantidad), la duración
(por cuánto tiempo) y la manera como entró en contacto con esta sustancia. También debe considerar las otras sustancias químicas
a las que usted está expuesto, su edad, sexo, dieta, características personales, estilo de vida y condición de salud.
El nombre HMX proviene de las siglas en inglés High Melting eXplosive.
También se le conoce como octógeno y ciclotetrametilentetranitramina, además de otros nombres. Es un sólido incoloro que
se disuelve muy poco en agua. Sólo una cantidad muy pequeña se evaporará al aire. Sin embargo, se le puede encontrar suspendido
en el aire adherido a partículas de polvo. No se conocen ni el sabor ni el olor del HMX.
El HMX es un compuesto sintético que no ocurre naturalmente en el ambiente. Se manufactura a partir de otras sustancias químicas:
hexamina, nitrato de amonio, ácido nítrico y ácido acético. El HMX explota violentamente a altas temperaturas (534 ºF
o más). Debido a esta propiedad, el HMX se usa en dispositivos nucleares, explosivos plásticos, combustibles para cohetes y cargas
explosivas. Una cantidad pequeña de HMX se forma también durante la manufactura del RDX (ciclotrimetilentrinitramina), otro explosivo
de estructura similar al HMX. La cantidad de HMX que se fabrica y usa en Estados Unidos actualmente no se conoce, pero se cree que es de más
de 30 millones de libras al año.
La mayor parte del HMX que entra al ambiente es liberado a agua residuales desde lugares que fabrican o usan HMX. Una cantidad pequeña
de HMX puede ser liberada al aire en forma de polvo o ceniza desde facilidades que incineran residuos contaminados con HMX. Una cantidad de HMX
puede ser liberada al suelo como consecuencia de derrames accidentales, de la deposición de partículas de polvo que contienen HMX o
de la disposición de residuos que contienen HMX en vertederos.
Las partículas de polvo que contienen HMX pueden ser movilizadas larga distancia por el viento. La distancia depende de un número
de factores, entre los que se incluyen el tamaño de la partícula, la velocidad del viento y las condiciones climáticas. Eventualmente,
estas partículas se depositarán en el suelo o el agua. El tiempo que el HMX permanece en el aire no se conoce.
El HMX no se evapora del agua de superficie ni se adhiere a sedimentos en cantidades significativas. En los cuerpos de agua superficial, la
luz solar degrada la mayor parte del HMX a otras sustancias en días o semanas. El tiempo que el HMX permanece en el agua de superficie depende
de la cantidad de material que absorbe luz presente en el agua. Una cantidad pequeña de HMX puede ser degradada por bacterias en el agua.
Algunos de los productos de degradación del HMX (nitrito, nitrato, formaldehído, 1,1-dimetilhidrazina) también son dañinos
para la salud, aunque las cantidades a las que usted puede exponerse a raíz de la presencia de HMX en el agua son pequeñísimas.
Los estudios de laboratorio han demostrado que es probable que el HMX se movilice desde el suelo al agua subterránea, especialmente en
suelos arenosos. Sin embargo, se estima que en la mayoría de los suelos, la movilización del HMX al agua subterránea será lenta.
La degradación del HMX por bacterias en el suelo tiene poca importancia. No se sabe con certitud cuanto tiempo permanece el HMX en el ambiente;
sin embargo, se estima que el HMX permanecerá largo tiempo en el suelo y el agua subterránea.
No se sabe si las plantas, peces u otros animales que habitan áreas contaminadas con HMX acumulan HMX en sus tejidos.
No hay ninguna información acerca de cuán frecuente e intensa puede ser la exposición al HMX en el ambiente. Sin embargo, la
mayoría de la población probablemente no se expondrá al HMX en el ambiente. Las personas que trabajan en facilidades que fabrican
o usan HMX o RDX, por ejemplo personal del ejército, pueden sufrir exposición. Estos trabajadores pueden estar expuestos al inhalar
polvos que contienen HMX o por contacto de la piel con líquidos que contienen HMX.
La gente que vive cerca de facilidades que fabrican o usan HMX, o cerca de un sitio de desechos peligrosos que contiene HMX, también puede
estar expuesta. Para estas personas, la exposición (si ocurre del todo) será probablemente a través de agua subterránea contaminada.
Sin embargo, también es posible que ocurra exposición a cantidades pequeñas de HMX a través del agua de superficie, el suelo
y el aire.
El HMX puede entrar a su cuerpo si usted respira aire contaminado, ingiere agua o tierra contaminada o por contacto de la piel con sustancias
que contienen HMX. Se sabe muy poco acerca de cuanto HMX y con que velocidad entra al cuerpo después de haber estado expuesto.
La escasa información de estudios en animales sugiere que si usted traga HMX, solamente una pequeña porción (menos del 5%) pasará a
la sangre. La cantidad de HMX que no se absorbe abandona el cuerpo en las heces, generalmente uno o dos días después de la exposición.
La sangre transporta la pequeña fracción de HMX que fue absorbida a los tejidos. Los estudios en animales sugieren que las concentraciones
de HMX en los pulmones, el hígado, el corazón y los riñones son ligeramente más altas que las concentraciones en otros tejidos.
El HMX no permanece mucho tiempo en ninguno de los tejidos. Los estudios en animales sugieren que el cuerpo puede transformar al HMX a otros
compuestos llamados metabolitos. Al presente, no se conocen ni la identidad ni toxicidad de estos metabolitos. La mayoría de estos metabolitos
abandonan el cuerpo en la orina, generalmente en unos pocos días después de haber estado expuesto. Cantidades más bajas de estos
metabolitos pueden ser eliminadas en las heces o en el aliento.
Los científicos usan una variedad de pruebas para proteger al público de los efectos perjudiciales de sustancias químicas tóxicas
y para encontrar maneras para tratar a personas que han sido afectadas.
Una manera para determinar si una sustancia química perjudicará a una persona es averiguar como el cuerpo absorbe, usa y libera la
sustancia. En el caso de algunas sustancias químicas puede ser necesario experimentar en animales. La experimentación en animales puede
ayudar a identificar problemas de salud tales como cáncer o defectos de nacimiento. Sin el uso de animales de laboratorio, los científicos
perderían un método importante para tomar decisiones apropiadas para proteger la salud pública. Los científicos tienen la
responsabilidad de tratar a los animales de investigación con cuidado y compasión. Los científicos deben adherirse a estrictos
reglamentos para el cuidado de los animales porque actualmente hay leyes que protegen el bienestar de los animales de investigación.
Hay escasa información acerca de los efectos del HMX sobre la salud. En un estudio en trabajadores expuestos al HMX en el aire no se describió ningún
efecto adverso. Sin embargo, las concentraciones de HMX en el aire del trabajo no se describieron, y solamente se investigó un grupo pequeño
de trabajadores y un pequeño número de efectos.
Estudios en ratas, ratones y conejos indican que el HMX puede causar daño del hígado y el sistema nervioso si se traga o hay contacto
de esta sustancia con la piel. La dosis diaria más baja de HMX que produjo efectos en animales fue 100 miligramos por kilogramo de peso
(mg/kg/día) administrada en forma oral y 165 mg/kg/día aplicada en la piel. Hay evidencia que indica que en conejos, una sola exposición
a estas dosis produce daño. El mecanismo a través del cual el HMX produce efectos adversos en el hígado y el sistema nervioso
no está esclarecido.
Los efectos del HMX sobre la reproducción y el desarrollo de seres humanos y animales no se han estudiado en detalle. Al presente, la información
de que se dispone para determinar si el HMX produce cáncer es inadecuada. Debido a la falta de información, la EPA ha
determinado que el HMX no es clasificable en cuanto a carcinogenicidad en seres humanos.
Usted puede averiguar si ha estado expuesto al HMX a través de análisis de HMX en la sangre, la orina o las heces. Debido a que una
fracción muy pequeña del HMX que se traga se absorbe, después de ingerir HMX los niveles de HMX en la sangre y la orina serán
probablemente más bajos que los en las heces. Para obtener resultados confiables, las pruebas para el HMX deben realizarse dentro de unos
días de ocurrida la exposición. Estas pruebas no pueden utilizarse para determinar a que cantidad de HMX se expuso o si sufrirá efectos
adversos. Estas pruebas generalmente no se realizan en el consultorio del doctor, pero éste puede tomar muestras para mandarlas a un laboratorio
especial.
El gobierno federal desarrolla reglamentos y recomendaciones para proteger la salud pública. Los reglamentos pueden ser impuestos
por ley. La EPA, la Administración
de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA), por sus siglas en inglés) y la FDA son
algunas agencias federales que desarrollan reglamentos para sustancias tóxicas. Las recomendaciones proveen instrucciones valiosas para
proteger la salud pública, pero no pueden imponerse por ley. La Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades
(ATSDR) y el Instituto
Nacional de Salud y Seguridad Ocupacional (NIOSH, por sus siglas en inglés) del CDC son
dos agencias federales que desarrollan recomendaciones para sustancias tóxicas.
Los reglamentos y recomendaciones pueden ser expresados como «niveles que no deben excederse» -en otras palabras, niveles de la
sustancia tóxica en el aire, agua, suelo o alimentos que no sobrepasen los niveles críticos que se basan generalmente en niveles que
afectan a los animales. Estos niveles luego se ajustan para la protección de seres humanos. En algunas ocasiones estos «niveles que no deben excederse» difieren entre organizaciones federales debido a las diferentes duraciones de exposición (una jornada de 8 horas
al día o de 24 horas al día), el uso de diferentes estudios en animales u otros factores.
Las recomendaciones y los reglamentos son actualizados periódicamente a medida que se dispone de información adicional. Para obtener
la información más reciente, consulte a la organización o agencia federal que la otorga. Los siguientes son algunos reglamentos
y recomendaciones para el HMX:
La EPA recomienda que la concentración de HMX en el agua potable que bebe un adulto de por vida no
sobrepase 0.40 miligramos por litro (0.40 mg/L). La EPA regula los residuos que contienen HMX como residuos
peligrosos y ha establecido restricciones para la disposición de HMX en vertederos. El Departamento de Estado reglamenta la exportación
de HMX, mientras que el Departamento de Transporte reglamenta el transporte. La Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego regula la importación,
manufactura, distribución y almacenamiento de HMX.
Si usted tiene preguntas o preocupaciones, por favor comuníquese con el departamento de salud y calidad ambiental de su comunidad o estado o con la ATSDR a la dirección y número de teléfono que aparecen más abajo.
La ATSDR también puede indicarle la ubicación de clínicas de salud ocupacional y ambiental. Estas clínicas se especializan en la identificación, evaluación y el tratamiento de enfermedades causadas por la exposición a sustancias peligrosas.
Las Reseñas Toxicológicas también están disponibles (en inglés) en Internet en www.atsdr.cdc.gov y en CD-ROM. Usted puede solicitar una copia del CD-ROM que contiene las Reseñas Toxicológicas de la ATSDR llamando
libre de cargos al número de información y asistencia técnica al 1-800-CDCINFO (1-800-232-4636), a través
de correo electrónico al cdcinfo@cdc.gov o escribiendo a:
Agency for Toxic Substances and Disease Registry
Division of Toxicology and Environmental Medicine
1600 Clifton Road NE
Mail Stop F-32
Atlanta, GA 30333
Fax: 1-770-488-4178
Las organizaciones con fines de lucro pueden solicitar copias de las Reseñas Toxicológicas finalizadas a:
National Technical Information Service (NTIS)
5285 Port Royal Road
Springfield, VA 22161
Phone: 1-800-553-6847 or 1-703-605-6000
Website: http://www.ntis.gov/
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