Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades (ATSDR)
Resumen de Salud Pública
Selenio (Selenium)
CAS#: 7782-49-2
septiembre de 2003
Este Resumen de Salud Pública es el capítulo sumario de la Reseña Toxicológica para el selenio. El mismo
forma parte de una serie de Resúmenes de Reseñas Toxicológicas relacionados a sustancias peligrosas y sus efectos sobre la salud.
Una versión más breve, ToxFAQs™, también
está disponible. Esta información es importante para usted debido a que esta sustancia podría causar efectos nocivos a su salud.
Los efectos a la salud de la exposición a cualquier sustancia peligrosa van a depender de la dosis, la duración, la manera de exposición,
las características y los hábitos personales, y si están presentes otras sustancias químicas. Si desea información
adicional, puede comunicarse con el Centro de Información de la ATSDR al 1-888-422-8737.
Este resumen de salud pública le informa acerca del selenio y de los efectos de la exposición a esta sustancia.
La Agencia de Protección del Medio Ambiente de EE. UU. (EPA) identifica los sitios de desechos peligrosos
más serios en la nación. Estos sitios constituyen la Lista
de Prioridades Nacionales (NPL, por sus siglas en inglés) y son los sitios designados para limpieza
a largo plazo por parte del gobierno federal. Se ha encontrado selenio en por lo menos 508 de los 1,636 sitios actualmente en la NPL o
que formaron parte de la NPL en el pasado. Sin embargo, el número total de sitios de la NPL en
los que se ha buscado esta sustancia no se conoce. A medida que se evalúan más sitios, el número de sitios en que se encuentre
selenio puede aumentar. Esta información es importante porque la exposición a esta sustancia puede perjudicarlo y estos sitios pueden
constituir fuentes de exposición.
Cuando una sustancia se libera desde una área extensa, por ejemplo desde una planta industrial, o desde un recipiente como un barril o
una botella, la sustancia entra al ambiente. Esta liberación no siempre conduce a exposición. Usted está expuesto a una sustancia
solamente cuando entra en contacto con ésta. Usted puede estar expuesto al inhalar, comer o beber la sustancia, o por contacto con la piel.
Si usted está expuesto al selenio, hay muchos factores que determinan si le afectará adversamente. Estos factores incluyen la dosis
(la cantidad), la duración (por cuánto tiempo) y de la manera como entró en contacto con esta sustancia. También debe considerar
las otras sustancias químicas a las que usted está expuesto, su edad, sexo, dieta, características personales, estilo de vida
y condición de salud.
Es selenio es una sustancia natural, sólida, ampliamente distribuida, aunque irregularmente, en la corteza terrestre. También se encuentra
comúnmente en rocas y en el suelo. El selenio, en forma pura, con apariencia gris-metálica a cristales negros, se conoce a menudo como
selenio elemental o polvo de selenio. El selenio elemental es producido en forma comercial, principalmente como producto secundario en la refinación
del cobre. En el ambiente, el selenio generalmente no se encuentra en forma elemental, pero a menudo está combinado con sulfuro o con minerales
de plata, cobre, plomo o níquel. El selenio también se combina con oxígeno para formar
varias sustancias con la apariencia de cristales blancos o incoloros. Algunos de los compuestos de selenio son gases. El selenio y sus compuestos
se usan en artículos fotográficos, en líquidos para limpiar las partes metálicas de armas de fuego, plásticos, pinturas,
champús para la caspa, vitaminas y suplementos nutricionales, fungicidas y ciertos tipos de vidrios. Por ejemplo, el sulfuro de selenio
se usa en champús para la caspa con el nombre comercial de Selsun Blue. El selenio también se usa para preparar medicamentos y como
suplemento nutricional para aves de corral y el ganado.
El selenio ocurre naturalmente en el ambiente. El selenio como elemento no puede ser manufacturado o destruido, sólo puede cambiar de forma
en el ambiente. El desgaste de las rocas y el suelo puede producir niveles bajos de selenio en el agua, los que pueden ser incorporados por las
plantas. El desgaste de rocas y del suelo también libera selenio al aire en forma de partículas similares a polvo fino. Las erupciones
volcánicas pueden liberar selenio al aire. El selenio generalmente entra al aire al quemar carbón o petróleo. El selenio que puede
estar presente en combustibles fósiles se combina con oxígeno cuando el combustible se quema, y el producto formado luego puede reaccionar
con agua para formar compuestos solubles de selenio. Las partículas de selenio en el aire, por ejemplo en ceniza, pueden depositarse en
el suelo o en agua superficial. La disposición de selenio contenido en productos comerciales y en desechos también puede aumentar la
cantidad de selenio en el suelo. Las formas de selenio en el suelo, como también el destino de estas formas depende en gran parte de la
acidez del suelo y de la interacción con oxígeno. En la ausencia de oxígeno cuando el suelo es ácido, la cantidad de selenio
que puede entrar a plantas y a organismos es baja. El selenio elemental y otras formas insolubles de selenio se movilizan menos y generalmente
permanecerán en el suelo, constituyendo un riesgo menor de exposición. Los compuestos de selenio que pueden disolverse en agua son
a veces muy móviles. De esta manera, la probabilidad de exposición a estos compuestos es más alta. El selenio puede entrar al
agua superficial en el drenaje de aguas de regadío. Hay cierta evidencia que indica que el selenio puede ser incorporado en los tejidos
de organismos acuáticos y aumentar en concentración a medida que pasa a través de la cadena alimentaria. Las concentraciones de
selenio en organismos acuáticos se han convertido en un problema a causa del flujo de aguas en ciertas áreas áridas de Estados
Unidos .
La población general está expuesta al selenio diariamente a través de los alimentos, el agua y el aire. El selenio también
es un elemento nutritivo esencial para seres humanos y animales. Por otra parte, el selenio puede producir daño si se ingiere regularmente
en cantidades más altas que las que se requieren para mantener buena salud. La población general recibe la mayor parte de la ingesta
diaria de selenio a través de los alimentos, y un porcentaje menor en el agua potable. Se estima que la ingesta promedio de selenio a través
de los alimentos en la población general de EE. UU. varía entre 71 y 152 millonésimas de gramo al día por persona. Pequeñas
cantidades de selenio también pueden encontrarse en el agua potable. Los niveles de selenio en 99.5% de las muestras de agua que fueron
analizadas tueron menores de 10 partes de selenio por un billón de partes de agua (10 ppb). Las personas pueden estar expuestas a niveles
de selenio más altos que lo normal si toman agua o comen tierra, o respiran polvo en sitios de desechos peligrosos. En algunas partes de
Estados Unidos , especialmente en los estados del oeste, algunos suelos tienen niveles naturales más altos de compuestos de selenio. Algunas
plantas pueden acumular niveles de selenio que son dañinos para el ganado que se alimenta de estas plantas. En estas áreas, la gente
puede estar expuesta a demasiado selenio si consumen una gran cantidad de cereales y hortalizas o productos animales que han acumulado altos
niveles de selenio. La gente también puede exponerse al selenio proveniente de fuentes industriales. Normalmente los seres humanos no están
expuestos a grandes cantidades de selenio en el aire, a menos que polvo de selenio o compuestos volátiles de selenio se formen en sus lugares
de trabajo. Algunas ocupaciones en las cuales puede ocurrir exposición al selenio en el aire son las industrias metalúrgicas, procesos
de recuperación de selenio, manufactura de pintura y oficios especiales.
El selenio del ambiente entra al cuerpo principalmente cuando la gente come alimentos que contienen selenio. El cuerpo absorbe fácilmente
los compuestos orgánicos de selenio (por ejemplo amino ácidos con selenio) cuando se ingieren y los hace disponibles a donde se necesitan
en el cuerpo. El selenio en el agua potable está generalmente en forma inorgánica de selenato de sodio y selenita de sodio. Estas formas
de selenio son también fácilmente absorbidas desde el tubo digestivo. El cuerpo puede transformar estas formas inorgánicas de
selenio a formas que éste puede usar. El selenio en el aire también puede entrar al cuerpo cuando usted lo inhala.
Los sitios de desechos peligrosos en los cuales se encuentra selenio pueden representar una fuente de exposición importante. La manera
a través de la cual el selenio puede entrar al cuerpo desde un sitio específico depende de factores tales como la presencia de hortalizas
en el suelo en el cual se ha depositado selenio; si el agua en el sitio contiene selenio y fluye hacia suministros de agua potable y si polvo
de selenio se esparce al aire. Como se mencionó anteriormente, las condiciones específicas de un sitio pueden influenciar profundamente
que compuestos de selenio se forman y si éstos se movilizarán hacia lugares donde la gente puede exponerse. Por lo tanto, es importante
saber que la presencia de selenio en un sitio no significa necesariamente que habrá exposición. Para determinar si hay exposición,
se deben llevar a cabo pruebas específicas de alimentos cultivados localmente, y de agua y aire de la localidad. Usted también debe
estar consciente de que los compuestos de selenio, incluso los que se usan en champús para la caspa, no son absorbidos muy fácilmente
a través de la piel.
La mayor parte del selenio que entra al cuerpo abandona el cuerpo rápidamente, generalmente en 24 horas. Aparte del selenio que el cuerpo
necesita, el selenio es eliminado principalmente en la orina. Las heces y el aliento son rutas de eliminación de menor importancia. A medida
que la exposición al selenio aumenta, la cantidad de selenio en la orina aumenta. Sin embargo, el selenio puede acumularse en el cuerpo
si los niveles de exposición son muy altos o si la exposición es prolongada. La cantidad que se acumula en el cuerpo depende de la
forma química de selenio. El selenio se acumula principalmente en el hígado y los riñones, pero también en la sangre, los
pulmones, el corazón y los testículos. Dependiendo de la duración y la magnitud de la exposición, el selenio puede acumularse
en las uñas y el cabello.
Para proteger al público de los efectos perjudiciales de sustancias químicas tóxicas, y para encontrar maneras para tratar a
personas que han sido afectadas, los científicos usan una variedad de pruebas.
Una manera para determinar si una sustancia química perjudicará a una persona es averiguar si la sustancia es absorbida, usada y liberada
por el cuerpo. En el caso de ciertas sustancias químicas puede ser necesario experimentar en animales. La experimentación en animales
también puede usarse para identificar efectos sobre la salud como cáncer o defectos de nacimiento. Sin el uso de animales de laboratorio,
los científicos perderían un método importante para obtener información necesaria para tomar decisiones apropiadas con el
fin de proteger la salud pública. Los científicos tienen la responsabilidad de tratar a los animales de investigación con cuidado
y compasión. Actualmente hay leyes que protegen el bienestar de los animales de investigación, y los científicos deben adherirse
a estrictos reglamentos para el cuidado de los animales.
El público en general raramente respira niveles altos de selenio, aunque alguna gente puede estar expuesta a polvo de selenio y a compuestos
de selenio en el aire del trabajo. En personas expuestas en el trabajo a niveles de selenio por sobre los niveles permitidos se han descrito
mareo, fatiga e irritación de las mucosas. En casos extremos se han descrito acumulación de líquido en los pulmones (edema pulmonar)
y bronquitis grave. Los niveles de exposición a los cuales podrían ocurrir estos efectos no se conocen, pero la probabilidad de que
ocurran aumenta a medida que aumenta la concentración de selenio y la frecuencia de exposición.
La ingesta normal de selenio a través de los alimentos es suficiente para satisfacer la ración diaria que se recomienda (conocida
como RDA) para este elemento esencial. Sin embargo, los compuesto de selenio pueden causar daño si se ingieren en niveles diarios más
altos que los necesarios. La seriedad de los efectos del exceso de selenio depende de la cantidad de selenio que se ingiere y de la frecuencia
con que se ingieren. Tragar una gran cantidad de selenato de sodio o de selenita de sodio (por ejemplo una gran cantidad de píldoras de
suplemento de selenio) puede ser fatal si no se da tratamiento médico de inmediato. Aun el consumo de cantidades moderadamente altas de
selenio durante un tiempo prolongado puede causar cabello quebradizo y deformidades de las uñas. En casos extremos, se puede perder la sensación
y el control de los brazos y las piernas. Estos efectos, conocidos como selenosis, se observaron en varias aldeas en China, en donde la gente
estaba expuesta a alimentos con altas cantidades de selenio durante meses o años. En Estados Unidos no se ha descrito envenenamiento a largo
plazo con selenio en ningún grupo de la población. Esto incluye a grupos de la población en el oeste del país en donde los
niveles de selenio en el suelo son naturalmente altos. Debido a que la mayoría de la gente en Estados Unidos consume alimentos producidos
en muchas áreas diferentes, es improbable que ocurra exposición excesiva a selenio a través de los alimentos.
En ciertas regiones de China donde los niveles de selenio en el suelo son muy bajos, la falta de selenio ha producido efectos adversos. En el
cuerpo, el selenio es usado en enzimas antioxidantes para proteger a los tejidos del daño producido por el oxígeno y en una enzima
que afecta el desarrollo y el metabolismo. El consumo de cantidades de selenio insuficientes puede producir problemas del corazón y dolor
muscular. También se ha descrito dolor muscular en personas alimentadas durante largo tiempo en forma intravenosa con soluciones que no
contenían selenio. Los bebés nacidos prematuramente pueden ser más susceptibles a la falta de selenio, y esto puede contribuir
a alteraciones del pulmón.
Cuando entran en contacto con la piel, los compuestos industriales de selenio han causado salpullidos, enrojecimiento, calor, hinchazón
y dolor. La exposición breve de los ojos al dióxido de selenio en forma de polvo o vapor en el aire del trabajo puede producir quemaduras,
irritación y lagrimeo. Sin embargo, solamente la gente que trabaja en industrias que procesan o usan compuestos de selenio corre el riesgo
de entrar en contacto con niveles de selenio que causan irritación de los ojos.
Los estudios en animales de laboratorio y en seres humanos han demostrado que la mayoría de los compuestos de selenio probablemente no
producen cáncer. De hecho, algunos estudios de cáncer en seres humanos sugieren que niveles de selenio en la dieta más bajos que
lo normal pueden aumentar el riesgo de desarrollar cáncer. Otros estudios sugieren que los niveles más altos que lo normal de selenio
en la dieta pueden reducir el riego de desarrollar cáncer en seres humanos. Sin embargo, la ingestión diaria en la dieta de cantidades
de selenio mayores que las requeridas puede aumentar el riesgo de intoxicación con selenio.
Basado en estudios conducidos hasta el año 1987, la Agencia
Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés) determinó que
el selenio y los compuestos de selenio no son clasificables en cuanto a su habilidad para producir cáncer en seres humanos. Sin embargo,
desde esa fecha, la EPA ha determinado que una forma de selenio específica, el sulfuro de selenio,
probablemente es carcinogénica en seres humanos. El sulfuro de selenio es el único compuesto de selenio que se ha demostrado produce
cáncer en animales. Las ratas y ratones a las que se les dió diariamente altas cantidades de sulfuro de selenio en forma oral desarrollaron
cáncer. El sulfuro de selenio no se encuentra en alimentos, y es químicamente muy diferente a los compuestos orgánicos e inorgánicos
de selenio que se encuentran en los alimentos y en el ambiente. Además, si se introduce al ambiente, el sulfuro de selenio no se disuelve
fácilmente en agua, y probablemente se adheriría fuertemente al suelo, reduciendo aun más cualquier posibilidad de exposición.
Debido a que el sulfuro de selenio no se absorbe a través de la piel, se considera que el uso de champús para la caspa que contienen
esta sustancia generalmente es seguro.
Cantidades muy altas de selenio han producido una disminución del número de espermatozoides y un aumento de espermatozoides anormales
en ratas machos, alteraciones del ciclo reproductivo en ratas hembras y alteraciones del ciclo menstrual en monos. La importancia de los efectos
reproductivos de la exposición al selenio en animales relativo a posibles efectos en seres humanos no se conoce.
Esta sección discute los posibles efectos sobre la salud en seres humanos expuestos durante el período desde la concepción a
la madurez a los 18 años de edad. Los posibles efectos en los niños causados por exposición de los padres también se consideran.
Es probable que los niños que viven cerca de sitios de desechos de selenio o de plantas que queman carbón estén expuestos a niveles
más altos de selenio en el ambiente al inhalar aire contaminado y tocar o comer suelo contaminado. Los niños que viven en áreas
en China con altos niveles de selenio en el suelo tienen niveles de selenio en la sangre más altos que los adultos de esas áreas. Los
niños necesitan pequeñas cantidades de selenio para un crecimiento y desarrollo normales. Es probable que la exposición al selenio
produzca en niños efectos similares a los observados en adultos. Sin embargo, algunos estudios sugieren que los niños pueden ser menos
susceptibles a los efectos del selenio que los adultos.
No sabemos si la exposición al selenio puede producir defectos de nacimiento en seres humanos. No se ha demostrado que los compuestos de
selenio hayan producido defectos de nacimiento en animales. No tenemos ninguna información que sugiera que hay diferencias entre niños
y adultos en cuanto a la distribución del selenio en el cuerpo o a la velocidad con que entra o abandona el cuerpo. Los estudios en animales
de laboratorio han demostrado que el selenio atraviesa la placenta y entra al feto. Los estudios en seres humanos han demostrado que los niños
obtienen selenio a través de la leche materna y, por lo tanto, las mujeres que se expusieron al selenio al vivir cerca de un sitio de desechos
pueden transferir el selenio a sus bebés. Sin embargo, los bebés en áreas de China con altos niveles de selenio en el suelo no
exhibieron ninguna señal de efectos adversos atribuidos al selenio, aun cuando algunos padres sí exhibieron efectos.
Si su doctor encuentra que usted ha estado expuesto a cantidades significativas de selenio, pregunte si sus niños también podrían
haber estado expuestos. Puede que su doctor necesite pedir que su departamento estatal de salud investigue.
Debido a que el selenio ocurre naturalmente en el ambiente, la exposición a esta sustancia no se puede evitar. Ciertos suplementos dietéticos
y champús para la caspa contienen altos niveles de selenio. Usted no debe exceder las dosis recomendadas cuando usa estos productos.
Los niños que viven cerca de sitios de desechos o de plantas que queman carbón pueden estar expuestos a niveles ambientales de selenio
más altos al inhalar aire contaminado y al tocar o comer suelo contaminado. Algunos niños comen altas cantidades de tierra. Usted debe
enseñarle a sus niños a no comer tierra. Asegúrese de que se laven las manos con frecuencia y antes de comer. Evite que los niños
se lleven las manos a la boca.
La principal ruta de exposición al selenio es a través de los alimentos. Las plantas cultivadas en suelos irrigados con agua contaminada
con selenio pueden incorporar selenio en su tejido. Usted podría exponerse a altos niveles de selenio si consume estas plantas. Los pescadores
y cazadores de aves acuáticas que consumen regularmente pescados y animales silvestres capturados en aguas con alto contenido de selenio
puede que también consuman niveles de selenio por sobre lo normal. Para reducir la exposición de su familia al selenio obedezca los
avisos y advertencias sobre el consumo de animales silvestres promulgados por su estado. La información sobre avisos de consumo de pescados
y animales silvestres en su estado puede obtenerse en el departamento de salud pública o de recursos naturales de su estado.
El selenio se puede medir en la sangre, la orina y las uñas de las manos y de los pies de personas expuestas. Sin embargo, debido a que
el selenio es un elemento nutritivo esencial presente en los alimentos, normalmente se encuentran bajos niveles de selenio en los tejidos y en
la orina. Los exámenes para el selenio tienen mayor utilidad para gente que ha estado expuesta a altos niveles recientemente. Las muestras
de sangre, orina y las uñas pueden tomarse en el consultorio de un doctor para ser enviadas a un laboratorio que tiene equipo especial para
medir selenio. La orina puede usarse para determinar exposición breve. Debido a que los glóbulos rojos duran aproximadamente 120 días
antes de ser reemplazados por glóbulos rojos nuevos, la presencia de selenio en los glóbulos rojos puede demostrar si una persona se
expuso al selenio durante el período de 120 días que precedieron al examen, pero no si se expuso antes de los 120 días recién
pasados. Los recortes de uñas de los pies pueden usarse para demostrar exposición de mayor duración.
Hay muchos métodos para medir los niveles de selenio en tejidos humanos y en el ambiente. Sin embargo, ninguno de los métodos que
se usan rutinariamente pueden medir o detectar cada compuesto de selenio en un solo ensayo. De ahí la necesidad de desarrollar métodos
más sensibles que midan diferentes compuestos de selenio. Además, estos exámenes no pueden determinar los niveles exactos de selenio
a que pudo haber estado expuesto o predecir si ocurrirán efectos adversos, aun cuando niveles muy altos de selenio en la sangre sin duda
están asociados con selenosis. Algunos estudios en seres humanos y también estudios en animales sugieren que cuando la gente está expuesta
a cantidades de selenio por sobre lo normal durante un tiempo prolongado, el cuerpo se adapta a los niveles más altos.
El tiempo que el selenio permanece en el cuerpo después que la exposición termina depende de la forma de selenio a la que una persona
se expuso. Por esta razón, es difícil predecir la utilidad de un examen si ha pasado algún tiempo desde que la exposición
cesó.
El gobierno federal desarrolla reglamentos y recomendaciones para proteger la salud pública. Los reglamentos pueden ser
impuestos por ley. Las agencias federales que desarrollan reglamentos para sustancias tóxicas incluyen a la EPA,
la Administración
de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA), por sus siglas en inglés) y la Administración
de Drogas y Alimentos de EE. UU. (FDA, por sus siglas en inglés). Las recomendaciones proveen
instrucciones valiosas para proteger la salud pública, pero no pueden imponerse por ley. Las organizaciones federales que
desarrollan recomendaciones para sustancias tóxicas incluyen a la Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades (ATSDR)
y el Instituto
Nacional de Salud y Seguridad Ocupacional (NIOSH, por sus siglas en inglés) .
Los reglamentos y recomendaciones pueden ser expresados como «niveles que no deben excederse» en el aire, agua, suelo o alimentos
y se basan generalmente en niveles que afectan a los animales.
Estos niveles luego se ajustan para la protección de seres humanos. En ciertas ocasiones estos «niveles que no deben excederse» difieren
entre organizaciones federales debido a las diferentes duraciones de exposición (una jornada de 8 horas al día o de 24 horas al día),
el uso de diferentes estudios en animales u otros factores.
Las recomendaciones y los reglamentos son actualizados periódicamente a medida que se dispone de información adicional. Para obtener
la información más reciente, consulte a la organización o agencia federal que la otorga. Los siguientes son algunos reglamentos
y recomendaciones para la selenio:
La Oficina de Agua Potable de la EPA regula la cantidad de selenio que se permite en el agua potable. La
concentración de selenio en los suministros de agua potable no debe exceder 50 ppb de selenio total.
La FDA permite un nivel de 50 ppb de selenio en agua embotellada. La OSHA es
responsable de establecer normas para los niveles de selenio que se permiten en el lugar de trabajo. El límite de exposición para los
compuestos de selenio en el aire del trabajo es 0.2 mg de selenio por metro cúbico de aire (0.2 mg/m³) durante una jornada de 8 horas
diarias.
Si usted tiene preguntas o preocupaciones, por favor comuníquese con el departamento de salud y calidad ambiental de su comunidad o estado o con la ATSDR a la dirección y número de teléfono que aparecen más abajo.
La ATSDR también puede indicarle la ubicación de clínicas de salud ocupacional y ambiental. Estas clínicas se especializan en la identificación, evaluación y el tratamiento de enfermedades causadas por la exposición a sustancias peligrosas.
Las Reseñas Toxicológicas también están disponibles (en inglés) en Internet en www.atsdr.cdc.gov y en CD-ROM. Usted puede solicitar una copia del CD-ROM que contiene las Reseñas Toxicológicas de la ATSDR llamando
libre de cargos al número de información y asistencia técnica al 1-800-CDCINFO (1-800-232-4636), a través
de correo electrónico al cdcinfo@cdc.gov o escribiendo a:
Agency for Toxic Substances and Disease Registry
Division of Toxicology and Environmental Medicine
1600 Clifton Road NE
Mail Stop F-32
Atlanta, GA 30333
Fax: 1-770-488-4178
Las organizaciones con fines de lucro pueden solicitar copias de las Reseñas Toxicológicas finalizadas a:
National Technical Information Service (NTIS)
5285 Port Royal Road
Springfield, VA 22161
Phone: 1-800-553-6847 or 1-703-605-6000
Website: http://www.ntis.gov/
Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades. (ATSDR ). 2003. Reseña Toxicológica
de los Selenio (en inglés). Atlanta, GA: Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU., Servicio de Salud Pública. |