Uno de los primeros descubrimientos de los subtipos de cáncer ocurrió en un
cáncer de la sangre conocido como linfoma de célula B grande difusa (el subtipo
más común de linfoma no de Hodgkin). Utilizando un chip que contenía fragmentos
de 18,000 genes, los investigadores encontraron dos subtipos de cáncer
distintos. Estos cánceres se veían iguales bajo el microscopio, pero tenían
patrones diferentes de actividad genética.
Los subtipos también eran diferentes en otras maneras. Para empezar, ellos se
originaron de diferentes tipos de células. Las células tumorales de un subtipo
de cáncer se originaron de linfocitos menos diferenciados ("jóvenes"), mientras
que el otro subtipo se originó de linfocitos más diferenciados ("viejos").
También hubo una diferencia en la supervivencia entre los dos tipos. Alrededor
de un 60 por ciento de las personas con el subtipo "joven" respondieron a la
quimioterapia, comparado con sólo un 30 por ciento de las personas con el
subtipo "viejo".
< Anterior | Índice | Siguiente Diapositiva > |