La Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU.Los Institutos Nacionales de la Salud
Omita y vaya al Contenido
MedlinePlus Información de Salud para Usted MedlinePlus Información de Salud para Usted MedlinePlus Información de Salud para Usted
Contáctenos FAQs - Preguntas más frecuentes Índice Sobre MedlinePlus
English
Logo de HealthDay

La furia de la naturaleza hace del sur la región más peligrosa de los EE. UU.

Sin embargo, un nuevo "mapa de mortalidad" señala que ninguna región está realmente libre del calor y del tiempo extremos
Versión para imprimir Enviar esta página a un amigo

Traducido del inglés: miércoles, 17 de diciembre, 2008

Imagen de noticias HealthDayMIÉRCOLES 17 de diciembre (HealthDay News/Dr. Tango) -- Los estadounidenses preocupados por resultar atrapados en una ola de calor mortal o desastre natural quizá deseen evitar los estados del sur y de las grandes llanuras, según un reciente "mapa de muerte" de los EE. UU.

El mapa, preparado por investigadores de la Universidad de Carolina del Sur, halla que la mayoría de las muertes por riesgos ambientales no son el resultado de eventos dramáticos como huracanes y terremotos.

"Son los peligros cotidianos, como el tiempo extremo, tanto en verano como en invierno, y el calor lo que causa la mayoría de las muertes provocadas por la naturaleza. No se trata de eventos brutales como un terremoto o Katrina lo que contribuye al patrón a largo plazo", señaló Susan Cutter, investigadora líder y directora del Instituto de investigación de peligros y vulnerabilidades de la universidad.

En ese sentido, "ningún lugar es seguro", anotó. "No hay ningún lugar con pocas muertes. Cualquier lugar tiene sus riesgos, solo que esos riesgos cambian", asegura Cutter.

Aún así, algunas regiones podrían ser más peligrosas que otras. "Por ejemplo, en algunas regiones de las grandes llanuras y en los estados montañosos, es más probable morir por causa de la naturaleza que en el noreste", señaló Cutter.

En el sureste, el tiempo extremo, como los huracanes, siguen siendo la causa principal de muertes por desastres naturales. La costa oeste de los EE. UU. también tiene tiempo extremo y es más propensa a los terremotos que causan muertes, agregó Cutter.

El informe fue publicado en la edición del 16 de diciembre de la revista en línea International Journal of Health Geographics.

Para el estudio, Cutter y su colega Kevin Borden compararon informes sobre muertes y sobre el tiempo desde 1970 hasta 2004 para hacer el mapa.

Según los datos, poco menos de 20,000 estadounidenses murieron por desastres naturales durante las más de tres décadas estudiadas.

El equipo halló que las muertes por desastres naturales tenían más posibilidades de ocurrir en el sur. Aquí, la gente generalmente cae víctima de tiempo fuerte y tornados. Además, los residentes de las grandes llanuras a veces mueren por el calor extremo del verano. En los estados montañosos, el frío y las inundaciones son responsables de la mayoría de las muertes por desastres naturales, mientras que las inundaciones y los tornados encabezan la lista de las mayores amenazas del centro-sur de los EE. UU.

Cutter y Borden hallaron que, en general, el calor extremo sigue siendo la causa principal de muerte por desastres naturales en los EE. UU. y representa cerca del veinte por ciento de la mortalidad total. El informe halló que, clasificados por estaciones, el tiempo extremo del verano fue responsable por el 18.8 por ciento de las muertes, mientras que el frío invernal del 18.1.

Eventos más dramáticos, como los terremotos, los incendios forestales y los huracanes podrán ser noticia de primera plana, pero en conjunto, constituyen apenas el cinco por ciento de las muertes por desastres naturales, anotó Cutter.

De hecho, las muertes por huracanes y terremotos continúan reduciéndose, según el investigador. Sin embargo, Cutter anotó que "sigue habiendo bastantes muertes por oleadas de tormentas, la gente no entiende qué pasa con el agua y la marea".

A los EE. UU. en realidad le va mejor con los desastres naturales que a otros lugares del mundo, en donde eventos como terremotos, inundaciones y maremotos resultan catastróficos. Cutter considera que la disparidad es el resultado de que los EE. UU. están mejor preparados para enfrentar esas calamidades. Además de estar mejor preparado en general, los códigos de construcción de los EE. UU. tienen en cuenta las amenazas de los terremotos y del viento, anotó.

De todos modos, siempre se puede mejorar ", señaló el Dr. David L. Katz, director del Centro de Investigación sobre la Prevención de la Facultad de Medicina de la Universidad de Yale.

"Algunos ambientes son más propensos a las catástrofes que otros, como sugieren los grupos de parches rojos en el sur y el centro", aseguró Katz. "Podría ser que los que pueden pagar lugares menos propensos a los desastres lo hacen", especuló.

La muestra útil del mapa sobre la distribución de los peligros es una invitación a la acción, aseguró Katz. "Tenemos la oportunidad de aprender lecciones de los peligros pasados y evitar la necedad de esperar pasivamente a que sucedan", dijo.


Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
HealthDay

(c) Derechos de autor 2008, ScoutNews, LLC

Noticias relacionadas:
Más noticias desde esta fecha

Temas relacionados: