Los sistemas de pozos sépticos se usan para tratar y eliminar las aguas negras, por lo general, provenientes de las casas, empresas y edificaciones comerciales, que se encuentran agrupados en sitios cercanos. Se usan ampliamente en las zonas rurales y en otras zonas donde las casas carecen de acceso a una instalación local de tratamiento de aguas negras. El sistema típico tiene un tubo proveniente de la instalación de tubería de la casa; un tanque séptico, donde las bacterias digieren la materia orgánica y las sustancias sólidas se separan de las aguas negras; un campo de desagüe o de filtración; y suelo. El líquido de las aguas negras fluye del tanque a los tubos enterrados en el campo de desagüe. El suelo del campo de desagüe filtra el agua y el de sus alrededores repite la operación. Las sustancias sólidas se mantienen en el tanque y son bombeadas regularmente por compañías especializadas en mantenimiento de esta clase de sistemas. Un sistema en debido estado de funcionamiento devuelve agua limpia y apta para consumo al medio ambiente a través del suelo.

Las aguas negras pueden contener nitrógeno, fósforo, bacterias y virus. Un sistema de pozos sépticos con averías puede contaminar el agua subterránea y las fuentes de agua potable con aguas cloacales sin tratar, y causar enfermedad e infección a las personas y a los animales. Los olores fétidos que despiden los sistemas sépticos con averías pueden ser nauseabundos. Las aguas cloacales sin tratar pueden contaminar los lagos, arroyos, represas y ríos. Un sistema de pozos sépticos con averías puede contaminar las aguas costeras vulnerables, aumentar la producción de flores de algas, reducir la concentración de oxígeno en el agua y contaminar los lechos de producción de mariscos y las playas.

Si ciertos materiales como sustancias químicas, petróleo, gas, pesticidas o pinturas entran a un sistema de pozos sépticos, pueden ser nocivos para el medio ambiente. Estos líquidos tóxicos nunca deben eliminarse en el sistema de desagüe. En las zonas húmedas donde las aguas negras llegan a la superficie pueden proliferar moscas y mosquitos portadores de enfermedades.

Los sistemas de pozos sépticos protegen el medio ambiente y la salud pública cuando se localizan, construyen y mantienen en forma apropiada. Su reglamentación está a cargo de los gobiernos estatales y locales.

Enlaces virtuales desde MedlinePlus (Biblioteca Nacional de Medicina)
Agua potable
Contaminación del agua
Enfermedades parasitarias
Hepatitis A
Infecciones por E. coli (Escherichia coli)
Infecciones por Giardia

Enlaces adicionales
Guía del dueño de hogar para sistemas sépticos (Agencia de Protección Ambiental)

Última actualización: 05 diciembre 2007