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Fig. P1. Adulto del picudo de la alfalfa, Hypera postica. |
Fig. P2. Huevos del picudo de la alfalfa dentro de un tallo de alfalfa. |
Fig. P3. Las larvas del picudo de la alfalfa prefieren alimentarse de
los terminales de alfalfa. |
Fig. P4. Primer plano del picudo de la alfalfa y del daño que causa. |
Fig. P5. Pupas del picudo de la alfalfa en la basura de la superficie
del suelo. Los picudos de la alfalfa también pueden empupar en la planta. |
Fig. P6. Saltahojas de la papa, Empoasca fabae (Homoptera:
Cicadellidae) es la plaga más importante de la alfalfa en la mayor parte
del norte centro de los E.E.U.U. Los adultos inviernan a lo largo del
Golfo de México y cada año son transportados hacia el norte en
corrientes de aire de gran altura. |
Fig. P7. Áfido del guisante, Acythosiphon pisum (Homoptera:
Aphididae) es uno de los tres áfidos que pueden causar pérdidas
económicas en alfalfa. |
Fig. P8. Áfidos manchados de la alfalfa, Therioaphis maculata (Homoptera:
Aphididae), pueden ser extremadamente dañinos a la alfalfa. Los
fitomejoradores han desarrollado cultivares que son resistentes a este
insecto. |
Fig. P9. Saltón de tres esquinas de la alfalfa, Spissistilus festinus
(Homoptera: Membracidae), es una importante plaga de la alfalfa en
el sureste de los Estados Unidos. La alimentación de estos insectos
puede resultar en una circunferencia que rodea la base del tallo de la
alfalfa. En los campos donde abunda el saltón de tres esquinas de la
alfalfa es más severa la pudrición de corona por Fusarium. |
Fig. P10. Gusano ejército del otoño, Spodoptera frugiperda
(Lepidoptera: Noctuidae), es uno de varios noctúideos que pueden
defoliar la alfalfa en el sureste. |
Fig. P11. Escarabajo picudo de la alfalfa, Otiorhynchus ligustici
(Coleoptera: Curculionidae) (izquierda) es una de cuatro especies de
picudos Otiorhynchus ápteras y partenogenéticas que se alimentan
de raíces, las cuales llegaron a los Estados Unidos como polizones en
los barcos procedentes de Europa que traían balasto. Las cuatro especies
son de importancia económica. Hasta la fecha, el escarabajo picudo de la
alfalfa se encuentra solo en el norte del Estado de Nueva York y en el
sur de Ontario. |
Fig. P12. Daño a raíces de alfalfa por larvas del escarabajo picudo de
la alfalfa. Los escarabajos picudos de la alfalfa son capaces de matar
virtualmente todas las plantas de alfalfa de un campo en un solo año.
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Fig. P13. Escarabajos
de ampollas (Coleoptera: Meloidae) contienen substancias que son
extremadamente tóxicas para caballos y otras clases de ganado.
Importantes Agentes de Control Biológico
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Fig. B1. Microctonus aethiopoides (Hymenoptera: braconidae)
adulto, persiguiendo un adulto del picudo de la alfalfa. El parasitoide es
raro, porque pone los huevos sobre el estado adulto. Fig. B2. Larva de
primer estado de Microctonus aethiopoides, disectada de un adulto del
picudo de la alfalfa. Las pequeñas partículas redondas que rodean la larva
son teratocitos.
Fig. B3. Larva completamente desarrollada de Microctonus aethiopoides
(abajo), disectada de un adulto de picudo de la alfalfa poco antes de
abandonar su hospedero para empupar. Note la falta de teratocitos. Los
escleritos abdominales del adulto del picudo de la alfalfa (arriba) se
incluyen para indicar el tamaño.
Fig. B4. Bathyplectes curculionis (Hymenoptera: Ichneumonidae) los
adultos son parasitoides de las larvas del picudo de la alfalfa.
Fig. B5. Larva de primer estado de Bathyplectes curculionis,
disectada de una larva del picudo de la alfalfa.
Fig. B6. Capullos de Bathyplectes curculionis. Note las bandas
blancas alrededor del capullo: anchas, aplanadas y algo irregulares. |
Fig. B7. Capullos de Bathyplectes anurus. Note las bandas blancas
alrededor del capullo: ligeramente elevadas, angostas y de bordes lisos. |
Fig. B8. Bathyplectes anurus (Hymenoptera: Ichneumonidae) los adultos
son parasitoides de las larvas del picudo de la alfalfa. En muchas partes
del país este parasitoide ha desplazado a B. curculionis como el
parasitoide larval más importante. |
Fig. B9. Adultos de Oomyzus (Hymenoptera: Eulophidae)
atacando una larva del picudo de la alfalfa. |
Fig. B10. Larvas de Oomyzus incertus, disectadas de una larva del
picudo de la alfalfa. Este parasitoide es gregario. Posiblemente una sola
larva del parasitoide no podría matar una larva del picudo. |
Fig. B11. Pupas de Oomyzus incertus, disectadas de una momia formada
por el integumento de la larva del picudo de la alfalfa. |
Fig. B12. Zoophthora phytonomi (Entomophthora: Entomophthoraceae) es
un importante patógeno del picudo de la alfalfa en Ontario y partes del
norte centro de los Estados Unidos. |
Fig. B13. Momias del áfido del guisante. En la mitad norte de los Estados
Unidos, parasitoides tales como Aphidius ervi (Hymenoptera:
Aphidiidae) usualmente impiden que los áfidos del guisante excedan los
niveles de daño económico. Aquí se muestran momias del áfido, en las cuales
empupa el parasitoide. Note el agujero de salida en la momia de la izquierda,
cortada por el parasitoide adulto que emerge. |
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La alfalfa, Medicago sativa, es el cultivo forrajero más
importante del mundo entero. En los Estados Unidos se la cultiva
aproximadamente en 10 millones de hectáreas (25 millones de acres) y tiene
un valor a puerta de la finca de más de $5 millardos. Minnesota y los
estados adyacentes de Dakota del Sur, Iowa y Wisconsin producen 1/4 de toda
la alfalfa de los Estados Unidos. La alfalfa es única entre los cultivos de
campo porque representa un ecosistema perenne de duración relativamente
larga (típicamente 3-4 años), que existe virtualmente en todas partes del
país. La alfalfa está adaptada a un amplio rango de condiciones climáticas:
prospera en ambientes fríos, húmedos y en la mayoría de las áreas áridas con
riego. En el medio oeste, la alfalfa comúnmente se produce en sistemas
alfalfa-maíz-soya, en el oeste, a menudo en sistemas alfalfa-remolacha
azucarera, y en el este los sistemas generalmente son alfalfa-huerto o
alfalfa-pradera.
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La alfalfa sostiene una diversa fauna de artrópodos. En la alfalfa en
los Estados Unidos por lo menos 1.000 especies han sido reportadas y tal vez
unas 100-150 de ellas causan algún grado de daño. Sin embrago, pocas de
estas pueden ser llamadas especies plagas claves, el resto son solo de
importancia local o esporádica, o son herbívoros accidentales, entomófagos (parásitos
y predatores), o polinizadores.
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Las pérdidas anuales debido a los insectos plagas de la alfalfa llegan a
los cientos de millones de dólares. Las reducciones de rendimiento en el
rango de 10-15% son estimados típicos (USDA 1965), pero probablemente son
bajos porque usualmente la cuestión de la calidad del forraje no es
considerada. En el sentido usual la alfalfa no tiene un valor de mercado
porque la producción generalmente es usada por los mismos productores para
alimentar su ganado. El verdadero valor es determinado por su valor como
alimento, v.gr., en producción de leche.
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Con plagas homópteras a menudo no es posible demostrar pérdidas en peso
seco (porque la mayor parte del peso está compuesta por los tallos), pero
uno aun puede tener una significativa pérdida de hojas o pérdida de
proteínas y digestibilidad de la materia seca in vitro (DMSIV). Los insectos
también pueden perjudicar la persistencia (v. gr., mortalidad en el invierno)
y la longevidad de las poblaciones de alfalfa.
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Las plagas claves incluyen el picudo de la alfalfa, Hypera postica
(una especie que consideramos, incluye el picudo egipcio de la alfalfa,
H. brunneipennis), lo mismo que un complejo de plagas homópteras, de las
cuales las más importantes son el saltahojas de la papa, Empoasca fabae,
el áfido manchado de la alfalfa, Therioaphis maculata, el áfido del
guisante, Acyrthosiphon pisum, el áfido azul de la alfalfa, A.
kondoi, el saltón de tres esquinas de la alfalfa Spissistilus
festinus, y el salivita (o mión o salivazo) de las praderas,
Philaneus spumarius. En producción de semilla los míridos, especialmente
Lygus hesperus, y L. elisus, y el chálcido de la semilla de
trébol, Bruchophagus roddi (Eurytomidae) pueden causar pérdidas
serias. En el sur, los gusanos ejército, Spodoptera spp.,
(Lepidoptera: Noctuidae) y los gusanos tejedores, Loxostege spp. y
Achyra spp. (Lepidoptera: Pyralidae) son plagas importantes. El
escarabajo picudo de la alfalfa, Otiorhynchus ligustici (Coleoptera:
Curculionidae), una plaga seria, hasta ahora está limitado en su
distribución al norte del Estado de Nueva York y el sur de Ontario. Los
escarabajos de ampollas, Epicauta spp. (Coleoptera: Meloidae), no
dañan la alfalfa, pero causan preocupación porque son venenosos para el
ganado.
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En los estados del norte, el uso de insecticidas en alfalfa generalmente
no ha sido grande. Típicamente, en un año dado se asperja 1-5% del cultivo
de Minnesota. En algunas partes del país, a causa de la mayor presión de
plagas, el tratamiento con insecticidas es más generalizado y algunas veces
de rutina. En Georgia, cada año 85% de la alfalfa es tratada con
insecticidas. En general, el cultivo está en la posición 18 de 87 cultivos
en la cantidad de kilos de pesticidas (insecticidas, herbicidas y fungicidas)
aplicados en los Estados Unidos (4,25 millones de kilos de un total de 348,8
millones de kilos usados anualmente). Gran parte de los insecticidas
aplicados a la alfalfa forrajera está dirigida contra el picudo de la
alfalfa. En años recientes, los agentes de control biológico y la
resistencia de la planta hospedera han disminuido el impacto de este insecto
y en consecuencia la necesidad de control químico.
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La alfalfa tiene varios atributos que la hacen una excelente candidata
para la aplicación de enfoques de manejo integrado de plagas. Las vacas
tienden a tolerar el daño causado por los insectos y/o partes de los
insectos en su dieta de modo que no hay razón para no establecer umbrales
económicos que sean realistas. Más aun, la alfalfa es, en su mayor parte,
bastante tolerante a moderadas densidades de plagas. Esto permite una mayor
confianza en métodos alternativos de control. Como el cultivo es
semipermanente y sostiene una diversa fauna de artrópodos, el control
biológico tiene un potencial considerable. En gran parte de los Estados
Unidos los agentes de control biológico tales como los parasitoides
Aphidius ervi y Praon pequodorum, y predatores generalistas tales
como los escarabajos coccinélidos, mantienen las poblaciones del áfido del
guisante por debajo de los niveles de daño económico. Los parasitoides
introducidos son importantes agentes de control biológico del picudo de la
alfalfa.
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La alfalfa ofrece considerables oportunidades para manejos culturales.
El cultivo es diferente de muchos en que típicamente es cosechado varias
veces por año: 2-4 veces en el norte de los Estados Unidos y 6-10 veces en
el sur de los Estados Unidos. La cosecha puede reducir la población de
plagas en 95-98%. En Minnesota, si la primera cosecha se demora en hasta que
hay 1/10 de floración (aproximadamente el 15 de junio) se le da suficiente
tiempo al saltahojas de la papa para que realice su oviposición. Estos
huevos (insertados en los tallos) después son cosechados con el cultivo,
eliminando virtualmente esa generación. Por el contrario, si la alfalfa se
cosecha temprano, cuando las poblaciones del picudo de la alfalfa están
cerca de su pico, se puede eliminar la necesidad de una aplicación de
insecticida. Para matar los huevos del picudo de la alfalfa en invernación
se han usado: podar bajo y quemar. Sembrar la alfalfa en mezcla con pasto
puede reducir la presión tanto del saltahojas de la papa como del picudo de
la alfalfa. Se han desarrollado variedades resistentes al pastoreo que le
permiten al ganado pastar continuamente la alfalfa. En el futuro, el
pastoreo puede convertirse en una práctica viable de manejo.
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Gracias a los esfuerzos de los fitomejoradores es común en cultivares de
alfalfa la resistencia de la planta hospedera al áfido manchado de la
alfalfa. El desarrollo de cultivares de alfalfa con resistencia al picudo de
la alfalfa demostró ser uno de los problemas de fitomejoramiento más
difíciles jamás emprendidos en alfalfa. Un programa de selección recurrente
fue emprendido por investigadores en el laboratorio del USDA de Beltsville.
Más de 2 millones de plántulas fueron expuestas a infestaciones masivas de
picudos. De este material, se hicieron selecciones que eventualmente
llevaron a crear el cultivar, Team, liberado en 1969. Team tiene resistencia
parcial al picudo. Esta resistencia se basa en tolerancia y cierto grado de
antibiosis. En áreas donde Team está bien adaptada se le ha dado crédito por
una significativa contribución en la reducción de la presión de plaga del
picudo. Se ha liberado germoplasma con tricomas pilosos glandulares
derivados de cruzamientos con especies silvestres de Medicago por
ejemplo, KS 224 y KS108GH5, que tienen resistencia al saltahojas de la papa
y al picudo de la alfalfa. Las variedades "pilosas" de alfalfa derivadas de
estas líneas pronto estarán disponibles.
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El picudo de la alfalfa y sus enemigos naturales |
El picudo de la alfalfa fue descubierto primero en los Estados Unidos en
1904 cerca de la Ciudad de Salt Lake. Se asume que probablemente fue
introducido del sur de Europa. Durante los siguientes 50 años, el picudo de
la alfalfa gradualmente expandió su rango hasta que ocupó la mayor parte de
la región al oeste del meridiano 100. Una segunda introducción, la cual
durante muchos años fue considerada como una especie diferente pero
estrechamente relacionada, el picudo egipcio de la alfalfa, invadió Arizona
y el sur de California en 1939. Ese insecto aparentemente ha permanecido
confinado a las regiones calientes de los valles del suroeste. En 1952, el
picudo de la alfalfa fue descubierto cerca de Baltimore y de allí se
dispersó rápidamente por todos los estados del este, sur y medio oeste. La
población oriental del picudo demostró ser mucho más agresiva que la del
picudo del oeste y causó grandes pérdidas económicas. En la parte sureste de
los Estados Unidos la alfalfa virtualmente fue eliminada como cultivo
agrícola. En 1970, el picudo de la alfalfa (población oriental) fue
descubierto en Minnesota y antes de 3 años había cruzado todo el estado. Sin
embargo, las poblaciones de Minnesota han permanecido en niveles
subeconómicos. Las poblaciones del oriente y del occidente ahora se han
unido al oeste del río Mississippi y el picudo de la alfalfa se encuentra en
todos los 48 estados contiguos.
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Hasta hace poco, se consideraba que el picudo de la alfalfa del este y
el picudo de la alfalfa del oeste representaban dos "líneas" (= subespecies)
claramente diferentes de H. postica, mientras que se consideraba
que el picudo egipcio de la alfalfa, H. Brunneipennis, era una
especie diferente. Las poblaciones del este y el oeste no están
completamente aisladas, pero difieren en detalles de biología, por ejemplo:
en el otoño los picudos del este regresan a la alfalfa de sus sitios de
estivación mientras que los picudos del oeste no regresan hasta la
primavera. Ahora los entomó/img/ reconocen que el picudo de la alfalfa del
este realmente está más estrechamente relacionado con el picudo egipcio de
la alfalfa que con el picudo de la alfalfa del oeste. La comparación de
isoenzimas (Hsiao) tiende a apoyar este punto de vista. |
En el viejo mundo, el picudo de la alfalfa es una especie que tiene un
notable rango de distribución, y ocurre desde Escandinavia hasta Egipto e
Irán. Por tanto, no es sorprendente que existan biotipos diferentes. Aun
dentro de las poblaciones hay considerable plasticidad biológica, por
ejemplo, en el sur, el picudo de la alfalfa puede llegar a la madurez sexual
y comenzar a poner huevos en el otoño, mientras que en el norte, la postura
de huevos está confinada a la primavera. Esto hace mucho más difícil de
controlar al picudo de la alfalfa en la porción sur de su rango.
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El control biológico del picudo se intentó primero en 1911 con la
introducción del parásito ichneumónido, Bathyplectes curculionis
traído desde Italia. El parásito demostró ser moderadamente efectivo en
climas más fríos, pero ha sido menos exitoso en climas calientes. Por
ejemplo en el valle de San Joaquín. B. curculionis también ataca al
picudo egipcio de la alfalfa, pero las introducciones iniciales no fueron
efectivas, presumiblemente debido al clima caliente de los hábitats
favorecidos por el picudo egipcio de la alfalfa y a encapsulación de los
huevos del parasitoide por el hospedero. Se hizo la introducción de una
nueva línea de B. curculionis de Irán para vencer estas limitaciones,
pero el éxito no se logró hasta hacer la introducción de una segunda especie,
B. anurus.
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De una manera similar en el oriente de los Estados Unidos, el picudo de
la alfalfa tiende a encapsular a B. curculionis reduciendo la
efectividad de los parásitos. Se han hecho intentos de establecer especies
parásitas adicionales contra el picudo de la alfalfa del este y por lo menos
5 de ellas ahora están ampliamente distribuidas: B. anurus,
Oomyzus incertus, Microctonus aethiopoides y M. colesi
y Patasson luna. Recientemente, el predator de huevos Peridesmia
discus ha sido recuperado, años después de que se hicieron las
liberaciones iniciales.
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En áreas donde se han establecido 3 o más parásitos, el picudo de la
alfalfa rara vez es de importancia económica, aun en áreas donde antes se
requerían múltiples aplicaciones de insecticidas. A menudo, cuando B.
anurus se ha establecido, ha tenido la tendencia a desplazar a B.
curculionis y O. incertus. Este proceso en más probable en
situaciones donde el patógeno fungoso Zoophthora (=Erynia, =Entomophthora)
phytonomi causa epizootias matando gran número de picudos de la
alfalfa. Bathyplectes anurus tiene una ventaja cuando ocurren
epizootias porque él ataca larvas del picudo de la alfalfa ligeramente más
temprano en la estación de lo que lo hace B. curculionis y
apreciablemente más temprano que O. incertus. Entonces, es
más probable que B. anurus haya completado su desarrollo antes que
las larvas comiencen a morir. También, B. anurus tiene solo una
generación por año, mientras que B. curculionis y O. incertus
tienden a ser multivoltinos. Bathyplectes curculionis ha estado en
Minnesota desde la llegada del picudo de la alfalfa en 1970, pero B.
anurus solo ha estado establecido desde 1991. Hasta la fecha, no hay
evidencia de que B. anurus haya desplazado a B. curculionis
en Minnesota, pero B. anurus ahora predomina en Iowa.
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Zoophthora phytonomi primero fue identificado de larvas del
picudo de la alfalfa en Ontario en 1973. El patógeno es similar, pero se
presume que diferente, del que ocurre en el picudo de la hoja del trébol,
Hypera punctata. El patógeno ahora es un factor clave de mortalidad natural
en mucho del oriente del Canadá y el oriente y sur de los Estados Unidos.
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Saltahojas de la papa y áfido del guisante |
Muchos de nuestros propios esfuerzos en Minnesota se han preocupado por
establecer umbrales económicos para los dos insectos: saltahojas de la papa
y áfido del guisante. Hemos realizado gradientes de las densidades de cada
uno de los insectos por separado o en combinación mediante la aplicación de
tratamientos insecticidas selectivos (por ejemplo, variando las dosis, el
momento de aplicación, o la escogencia del insecticida), y con las técnicas
de manejo usadas en la alfalfa que bordea las parcelas de alfalfa con los
tratamientos (por ejemplo, cortando franjas, fechas de cosecha más tempranas
o más tardías, o tratándolas con insecticidas). Por ejemplo, en nuestros
experimentos, las parcelas de alfalfa rodeadas con alfalfa no cortada
tuvieron 4 veces más adultos y 10 veces más ninfas del saltahojas de la
papa, que la alfalfa que tenía bordes que habían sido cortados en las mismas
fechas que la parcelas mismas.
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De esta manera, pudimos establecer y mantener gradientes de presión de
plagas en las parcelas. Medimos un número de parámetros de rendimiento
incluyendo rendimiento de materia seca, altura de los tallos, madurez, % de
proteína, y digestibilidad de la materia seca in-vitro. Se encontró que cada
uno era influenciado por las densidades de las plagas. Sobre esta base
pudimos calcular los niveles de daño económico y los umbrales económicos.
Para tener en cuenta los efectos sobre la calidad del forraje calculamos
estos valores tomando como base una ración de maíz equivalente (de
substitución) y torta de soya a los precios del momento.
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Para el saltahojas de la papa, se encontró que los niveles de daño
económico, para máquinas de muestreo de vacío (aspiradoras) estaban en el
rango de 30 saltahojas/0.48 m2/semana de muestreo o 37 saltahojas
por 25 batidos de 180 grados de una red de muestreo por semana de muestreo.
Se encontró que el momento crítico en el cual el saltahojas de la papa es
capaz de causar el mayor daño a la planta era en la soca (rebrotes)
inmediatamente después de la cosecha. Los umbrales económicos (=umbrales de
acción) variaron de 0.3 a 0.5 saltahojas/por batido pendular (de la red)
para alfalfa con rebrote de 5-17 cm.
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Para el áfido del guisante, Cuperus et al. calcularon que los niveles de
daño económico estaban en el rango de 3.850 días-áfido/muestra de vacío,
3.950 días-áfido/batido de la red, o 114 días-áfido/tallo, respectivamente.
El momento crítico para el control pareció estar 2 semanas antes de la
cosecha. Los umbrales económicos 2 semanas antes de la cosecha fueron 58
áfidos/muestra de vacío, 70 áfidos/batido de red, o 1.2 áfidos/tallo,
respectivamente.
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A partir de estos datos parece evidente que el saltahojas de la papa y
el áfido del guisante son muy diferentes en su potencial para causar daño.
Números muy bajos del saltahojas de la papa pueden causar pérdida económica,
mientras que el umbral para el áfido del guisante es muy alto.
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En un estudio subsiguiente, Stucker y Radcliffe, calcularon niveles de
daño económico de 284 días-áfido acumulados asumiendo un costo de control de
$16/ha y $110/ton de heno. Este umbral es 80% más bajo que el reportado por
Cuperus et al., pero fue determinado en experimentos con presiones del áfido
del guisante mucho más bajas. No tenemos suficientes datos sobre el áfido
del guisante para saber la relación entre los niveles de daño económico y
las densidades de los áfidos, pero puede ser que la relación sea curvilínea,
como sucede con el saltahojas de la papa, en cuyo caso habría un
aplanamiento en la curva de respuesta a altas densidades de la plaga.
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Proyectos Regionales de Investigación sobre Manejo de Insectos Plagas de
la Alfalfa - El Pasado y el Presente. |
El subproyecto de alfalfa de Huffaker se concentró principalmente en el
picudo de la alfalfa en el este y el medio oeste, y en el picudo egipcio de
la alfalfa en el oeste. La universidad de Cornell se encargó del desarrollo
de un modelo descriptivo de la planta de alfalfa (Fick), el desarrollo del
modelo del picudo de la alfalfa y su principal parásito, B. curculionis
fue hecho en Illinois (Ruesink). Los modelos para hacer óptimo el manejo de
plagas de la alfalfa fueron desarrollados en Cornell (Shoemaker). La
investigación sobre el picudo egipcio de la alfalfa fue hecha en la
Universidad de California (Regev y Gutierrez).
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Se dijo que el ejercicio tenía 3 beneficios principales: 1) le ayudaba a
los investigadores a comprender cómo operaban los sistemas cultivo/plaga, 2)
identificaba las necesidades de investigación (deficiencias), y 3)
suministraba una imitación útil del sistema que permitía la derivación de
umbrales económicos "dinámicos". Los umbrales son descritos como dinámicos
porque varían con el estado de rebrote en cada época del año.
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Desde el momento de su descubrimiento en el este, el picudo de la
alfalfa dominó tanto la atención de los entomó/img/ de plantas forrajeras
que otras plantas solo recibieron escasa atención. Con los éxitos eventuales
logrados al reducir la situación de plaga del picudo, nuevamente se hizo
aparente la necesidad de considerar otras plagas. Para considerar el
complejo de plagas de la alfalfa, finalmente en 1974 se llegó a la formación
de un proyecto regional de manejo de plagas de la alfalfa, el NC-149 (administrado
como un Proyecto Regional del Norte Centro, pero realmente es de alcance
nacional). Desde 1979-1988, este grupo concentró sus atenciones en las
plagas homópteras de la alfalfa, por ejemplo, el saltahojas de la papa, el
salivita de las praderas y las 3 especies de áfidos: el áfido del guisante,
el áfido manchado de la alfalfa, y el áfido azul de la alfalfa. En 1989, el
enfoque de este proyecto fue cambiado a la dinámica espacial de los
saltahojas, y renumerado como NC-193. Esto fue debido a un creciente
reconocimiento de las pérdidas de rendimiento debidas al saltahojas de la
papa en la alfalfa.
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Programas de Manejo de Insectos Plagas
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Se ha implementado cierto número de programas de manejo de plagas de la
alfalfa. El primero fue el Programa de Acción de Manejo de Plagas de
Indiana. Éste incluía monitoreo regular de los campos de los productores
participantes y entrar los datos de las evaluaciones en un terminal de
computador para su procesamiento en un computador central grande. Los
resultados (recomendaciones) ofrecían a los productores opciones
alternativas de manejo dependiendo del estado de crecimiento de las plantas,
la fecha en la cual se esperaba cortarlas y las posibles aplicaciones de
insecticidas. Hoy, la mayoría de los estados tienen alguna forma de manejo
de insectos plagas en alfalfa. Éstas van desde recomendaciones de cómo
plaguear para el picudo de la alfalfa hasta sistemas expertos que hacen
modelos de la planta de alfalfa y sus plagas asociadas.
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Las plagas claves de los ecosistemas de la alfalfa difieren en distintas
regiones del país. El manejo del cultivo mismo varía tremendamente: el
número de cosechas por año varía de 2 a 10, y el cultivo puede o no tener
riego. La alfalfa cultivada para semilla tiene sus propios problemas de
plagas. Por esta razón, difieren las estrategias de manejo integrado de
plagas. A continuación presentamos discusiones sobre las estrategias de
manejo para Minnesota, el norte del Estado de Nueva York, Pennsylvania,
Alabama, Oklahoma y Arizona. Damos gracias especiales a Michael Rethwisch,
Richard Berberet, y Elson Shields, y Arthur Hower por la información sobre
MIP de alfalfa es sus respectivas regiones.
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Minnesota |
La
plaga clave de la alfalfa en Minnesota es el saltahojas de la papa.
Debido a la combinación de agentes de control biológico y factores
climáticos adversos las poblaciones del áfido del guisante y el picudo
de la alfalfa rara vez alcanzan densidades económicas. El saltahojas
de la papa usualmente es una plaga de la segunda y tercera socas de la
alfalfa. |
Norte de Nueva York |
En el
norte del estado de Nueva York y el sureste de Ontario, Canadá, el
escarabajo picudo de la alfalfa reduce significativamente la
productividad de cultivos de alfalfa y trébol. Las larvas del
escarabajo picudo de la alfalfa cortan las raíces laterales de la
alfalfa y comúnmente rompen la raíz principal. Plantas dañadas por el
escarabajo picudo de la alfalfa a menudo envejecen debido a
deshidratación y mueren durante el invierno causando dramáticas
pérdidas de población que a menudo se toman equivocadamente como
mortalidad causada por el invierno. Las aplicaciones de insecticidas
hechas en la primavera contra los adultos de los escarabajos picudos
que invaden la alfalfa no son controles confiables de las poblaciones
de esta plaga. En el área infestada por el escarabajo picudo de la
alfalfa (como unas 200.000 hectáreas), los productores de leche a
menudo se ven forzados a rotar alfalfa o trébol con cultivos que no
son hospederos del escarabajo picudo de la alfalfa (por ejemplo, maíz,
soya, trigo) o substituir leguminosas forrajeras con cultivos que
producen heno pero que son de menor rendimiento económico. La rotación
de cultivos puede reducir las poblaciones totales del escarabajo
picudo de la alfalfa, pero los campos deben ser arados en el otoño en
un cronograma del cuarto año (el tercer año de producción) y esto debe
hacerse en toda el área para impedir la rápida reinfestación del
escarabajo picudo de la alfalfa a partir de campos vecinos. Para la
mayoría de los agricultores, esta práctica es demasiado costosa de
adoptar. Nemátodos que atacan a los insectos se muestran prometedores
para el manejo de esta plaga en el futuro. |
Pennsylvania |
En
Pennsylvania la alfalfa se cosecha 3-4 veces por año. Las plagas
claves son el saltahojas de la papa y el picudo de la alfalfa. El
curculiónido de la raíz del trébol, Sitona hispidulus, contribuye
significativamente a la reducción de las poblaciones de alfalfa. |
PLEX
es un sistema experto diseñado para ayudar a manejar el saltahojas de
la papa en Pennsylvania. PLEX modela el desarrollo del cultivo de
alfalfa y al saltahojas de la papa, y hace recomendaciones que van
desde el manejo de los cortes hasta las aplicaciones de insecticidas. |
Al
alimentarse, las larvas del curculiónido de la raíz del trébol
penetran el floema y el xilema de la raíz principal y las laterales.
Las cicatrices que causa esta alimentación interfieren directamente
con el potencial que tienen las raíces de la alfalfa para transportar
agua y nutrientes y permiten la invasión de patógenos responsables por
marchitamiento y pudriciones de la raíz. En todo el noreste, los
productores pierden un estimado de $400 millones por año por el
complejo del curculiónido de la raíz del trébol/Fusarium como
consecuencia de la reducción en la productividad del cultivo y el
subsecuente aumento en los costos de resiembra. Para el manejo del
curculiónido de la raíz del trébol no se recomiendan las aplicaciones
de insecticidas porque las aplicaciones de insecticidas dirigidas
contra el curculiónido de las raíces del trébol pueden interferir con
los enemigos naturales del picudo de la alfalfa y los parásitos
establecidos. Más aun, las aplicaciones de insecticidas no son
efectivas contra los estados subterráneos o larvales del curculiónido
de la raíz del trébol. |
Alabama |
En el
norte de Alabama la alfalfa típicamente se cosecha 5 veces por año y
hasta 10 veces en el sur de Alabama. Antes de la introducción del
picudo de la alfalfa en 1958, en Alabama se sembraban 20.200 hectáreas
de alfalfa. A comienzos de los años 60 el picudo, y la disponibilidad
de fuentes baratas de nitrógeno, hicieron que la superficie sembrada
con alfalfa cayera en el estado. El interés en producir alfalfa ha
aumentado lentamente, hasta aproximadamente 6.500 hectáreas de alfalfa
que hoy se producen en Alabama. Las plagas claves son el picudo de la
alfalfa, el saltón de tres esquinas de la alfalfa, Spodoptera sp.
gusanos ejército, y gusanos tejedores. El saltahojas de la papa
también puede causar pérdidas económicas, particularmente en el norte
de Alabama. En la mayoría de los años, los agentes de control
biológico del picudo de la alfalfa no son capaces de mantener
controladas las poblaciones. Se recomienda que los campos de alfalfa
sean plagueados semanalmente para el picudo de la alfalfa y el áfido
del guisante desde marzo - abril, y luego dos veces por semana para el
saltón de tres esquinas de la alfalfa y los gusanos ejército
Spodoptera. Los gusanos ejército del otoño, el gusano ejército de la
remolacha, el gusano de la mazorca del maíz, el gusano ejército de
bandas amarilla, y el gusano verde del trébol son comedores
generalistas que pueden colonizar la alfalfa. Típicamente ellos
aparecen juntos. Los umbrales se basan en el número de gusanos de unos
2,5 cm de cualquier clase. |
Suroeste de Arizona: |
En el
suroeste de Arizona la alfalfa se cosecha 10-12 veces por año. Se
produce exclusivamente bajo riego. En Arizona la base de manejo de los
insectos es, corte por corte. La alfalfa de la primavera es de alta
calidad y mayor valor que la alfalfa de mediados del verano. Los
umbrales económicos y los niveles de daño son más bajos para los
cultivos de primavera que para los de verano. En Arizona el picudo
egipcio de la alfalfa es la plaga más importante de la alfalfa. Los
saltahojas Empoasca y el gusano ejército de la remolacha ocurren más
tarde en la estación. En muchos casos, puede no ser económico tratar,
porque esos cortes de alfalfa son de menor calidad y cantidad. |
Oklahoma |
Las
plagas claves de la alfalfa en Oklahoma son el picudo de la alfalfa y
el complejo de áfidos. Es necesario monitorear la alfalfa durante la
estación de crecimiento para poder manejar estas y otras plagas de la
alfalfa. El picudo de la alfalfa es un problema crónico en Oklahoma.
El importante agente de control biológico M. aethiopoides ocurre solo
esporádicamente en Oklahoma. Condiciones de clima seco frecuentemente
coinciden con la ocurrencia pico del picudo de la alfalfa, por tanto
las epizootias causadas por Z. phytonomi son raras. La mejor
herramienta de control del picudo de la alfalfa son los insecticidas.
Para programar apropiadamente las aplicaciones de insecticidas, se usa
un modelo de grados-día basado en los grados-día acumulados y el
desarrollo del cultivo. Se usa una red de estaciones climáticas para
calcular los grados-día de crecimiento en toda Oklahoma, y las
acumulaciones de los grados-día están disponibles para que los
productores las usen en sus decisiones de manejo. |
El
áfido azul de la alfalfa, el áfido manchado de la alfalfa, y el áfido
del guisante también son de importancia en Oklahoma. Rara vez se
encuentran presentes parasitoides efectivos contra estas plagas. Las
condiciones secas de crecimiento en la primavera desestimulan el
desarrollo de patógenos fungosos. La herramienta más importante como
táctica de manejo del áfido azul de la alfalfa y del áfido manchado de
la alfalfa ha sido la resistencia de la planta hospedera.
Recientemente, ha aparecido un biotipo del áfido azul de la alfalfa el
cual ha vencido la resistencia existente en la planta. Este biotipo es
muy virulento y, si no se lo maneja apropiadamente, puede matar
plantas de alfalfa y causar la pérdida de lotes completos de alfalfa.
Típicamente los cultivares de alfalfa en Oklahoma no son de los que
tienen latencia y crecerán siempre que las temperaturas lo permitan.
El áfido manchado de la alfalfa es una plaga de la alfalfa en invierno.
El áfido manchado de la alfalfa necesita que se lo monitoree en estos
cultivos de invierno. Hay disponibles cultivares resistentes al áfido
manchado de la alfalfa. |
En los
cortes de verano y otoño hay un complejo de plagas lepidópteras que
amenazan el cultivo. El saltahojas de la papa usualmente llega durante
el primer corte de alfalfa y necesita ser monitoreado en todos los
cortes. |
Escarabajos de ampollas,
Epicauta spp. (Coleoptera: Meloidae), pueden ser aplastados
cuando el heno de alfalfa es cortado y acondicionado y luego quedan
atrapados en las balas. Esto es preocupante porque una toxina natural
de estos escarabajos, la cantaridina, puede matar al ganado. Los
caballos son los animales más susceptibles, pero el ganado vacuno y
las ovejas también han sido envenenados. Los escarabajos de ampollas
pasan parte de su ciclo de vida como parásitos de los saltamontes. Por
tanto, las explosiones de población de los escarabajos de ampollas
están asociadas con las explosiones de población de los saltamontes. |
Información sobre Forrajes en la WWW
|
Sistema de Información sobre Forraje en la Universidad
del Estado de Oregón
para vínculos sobre forrajes en el mundo entero e información relacionada.
|
Radcliffe's IPM World Textbook
|
La North American Alfalfa Improvement Conference (NAAIC)
es una organización que promueve el intercambio de información entre
investigadores involucrados en todo el mundo.
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Midwest Biological Control News
|
Picudo de la Alfalfa,
Red Nacional de MIP, Carolina del Norte
|
Picudo de la Alfalfa,
Universidad del Estado de Ohio
|
Manejo del Picudo de la Alfalfa,
Universidad de Nebraska
|
Heno de Alfalfa -Picudo Egipcio de la Alfalfa,
University of California, Davis
|
Picudo de la Alfalfa,
Servicio Cooperativo de Extensión Wisconsin-Minnesota
|
Control Cultural, Químico y Biológico del Picudo de la
Alfalfa en el Sur-Central de Dakota del Sur
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Referencias
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Última modificación: viernes 12 de febrero de 1999
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