Comentarios preparados del
Secretario de Justicia de los Estados Unidos Alberto R. Gonzales
en la
"Noche de Gala"
de la Fundación Nacional Hispana para las Artes
Washington, D.C.
Martes, 13 de septiembre de 2005 – 8:00 PM
Buenas noches, damas y caballeros.
Es un gusto para mí estar nuevamente con ustedes en nombre del Presidente Bush para esta celebración anual. Hace tres años, tuve el privilegio de hablarles en mi cargo de Consejero del Presidente.
En el tiempo que ha transcurrido desde entonces, tuve el honor de iniciar tareas nuevas como Secretario de Justicia de los Estados Unidos. Sin embargo, Jimmy Smits me sigue de cerca. Ha pasado de policial de ronda a candidato potencial a la Presidencia de los Estados Unidos.
Los éxitos ficticios de Jimmy en The West Wing - y sus verdaderos éxitos como actor - son ambos señales maravillosas para los hispanos de nuestra nación. Por supuesto, también lo son los éxitos reales de innumerables artistas hispanos, tales como Sonia Braga y Esai Morales, y los de algunos de mis colegas en la Administración Bush, entre los que se encuentran el Secretario de Comercio, Carlos Gutierrez, el Administrador de la SBA, Hector Barreto, la Tesorera de EE.UU., Anna Cabral, y el Asistente Adjunto de la Presidencia, Ruben Barrales.
Digo estos nombres en voz alta con orgullo, pues deseo que el pueblo de los Estados Unidos, especialmente los niños hispanos, escuchen y vean que, independientemente de sus antecedentes o herencia, ellos también pueden ser actores y artistas exitosos; que algún día, ellos también pueden ser un Secretario de Gabinete o asesor presidencial.
Un día no demasiado lejano, habrá un Secretario de Estado hispano y un Secretario de Defensa hispano a cargo de la protección de nuestra nación. Un día, habrá un hispano decidiendo casos en la Corte Suprema de los Estados Unidos. Y un día, un hispano encabezará este país como nuestro Presidente.
Es inevitable que estos hechos ocurran. Ocurrirán no porque la comunidad hispana tenga derecho a ello, sino porque personas calificadas habrán merecido estos cargos de confianza con la enorme ayuda de muchas otras.
Cada vez que un niño hispano ve a Mel Martinez o Richard Carmona tomando una decisión en el escenario nacional, o ve a Edward James Olmos o Jennifer Lopez actuar en películas, la idea de que ellos, también, podrían ser un Senador de los Estados Unidos, el Director General de Salud Pública de los Estados Unidos o un actor de Hollywood no le parece tan imposible.
La última vez que les hablé, hace tres años, lamenté la escasez de personajes hispanos en las pantallas del cine y de la televisión. Ha habido algún progreso en estos años, pero no es suficiente.
Sé que ustedes están trabajando arduamente en este reto, y espero que continuemos mejorando las oportunidades disponibles para actores y actrices hispanos talentosos. Me gustaría agradecer especialmente a Jimmy Smits, Sonia Braga, Esai Morales y Felix Sanchez por sus esfuerzos en nombre de la entera Fundación Nacional Hispana para las Artes.
Si bien tal vez tengamos que esperar algunos meses más para enterarnos de si el personaje televisivo de Jimmy se mudará al Ala Oeste, no podemos desperdiciar un único momento y debemos continuar proporcionando ejemplos positivos para la juventud hispana actual.
El sueño estadounidense puede rápidamente convertirse en una pesadilla - especialmente cuando parecería ser que las únicas opciones son unirse a una pandilla o cometer delitos violentos. Es por eso que los modelos a seguir, tales como Elizabeth Vargas y Eva Longoria, son tan importantes. Se trate de una conversación con un padre, la orientación de un adulto con mucha influencia, o un ejemplo de una estrella de televisión o personaje de película, necesitamos modelos a seguir que contrarresten el temor y las opciones falsas que enfrenta la juventud hispana de hoy.
Estoy seguro de que un joven que se encuentra aquí esta noche estaría de acuerdo - y no solo por ser mi coterráneo de Texas. Edward Valdez eligió evitar las pandillas a favor de una educación. Está logrando eso y más como guardiamarina en la Academia Naval de EE.UU. Él es uno de los líderes futuros de nuestra nación, y necesitamos más personas con la fuerza de carácter y las influencias positivas en las que se apoyó Edward para llegar donde se encuentra hoy.
A propósito, Edward es fácil de ubicar esta noche...¡Es la persona mejor vestida en mi mesa!
***
Mientras nos reunimos esta noche para esta celebración, es importante recordar que la ardua labor de la recuperación continúa a lo largo de la Costa del Golfo. Sé que los pensamientos y oraciones de todos aquí acompañan a los afectados y desplazados por el huracán Katrina.
Es un consuelo saber que nuestra nación se une en momentos de crisis. En esta más reciente tragedia, ha llegado ayuda en todas las formas y de todos los rincones del país.
En momentos de unión como estos, muchos dicen que los estadounidenses olvidan sus diferencias y se concentran en nuestra experiencia compartida. Si bien esto es verdad, también creo que debemos recordar que dichas diferencias - nuestra diversidad - hacen de este país una gran nación. Nuestras diferencias tienen tanta relación con el contenido del carácter de nuestra nación como las similitudes de la experiencia estadounidense.
Por lo tanto, resulta apropiado que nos reunamos en todo el país - especialmente durante este mes de septiembre tan difícil - para celebrar el Mes Nacional de la Herencia Hispana.
Los hispanos han contribuido grandemente a la cultura de esta nación; por lo tanto, la celebración de nuestra herencia es una celebración de los Estados Unidos.
Nuestro amado Estados Unidos es el país más fantástico del mundo. No debemos darlo por sentado. Hay una razón por la que millones de personas, muchas de ellas de origen hispano, arriesgan sus vidas para cumplir el sueño de venir aquí.
La historia de Estados Unidos es una historia de renovación y reafirmación constantes de nuestros ideales fundadores y nuestros valores imperecederos: la fe, la familia y la libertad. Son valores que requieren que cada estadounidense dé lo mejor de sí.
Sea usted un ciudadano nuevo que acaba de jurar proteger y defender la Constitución, o un ciudadano que rastrea sus raíces hasta la primera ola de inmigrantes que llegaron a este Nuevo Mundo, todos debemos valorar las oportunidades que abundan en esta tierra prometida.
Es el apuntalamiento fundamental del Mes de la Herencia Hispana: un compromiso de respetar, valorar y aprovechar las oportunidades de nuestro gran país. Además, es un compromiso de hacer todo lo posible para garantizar que las mismas oportunidades estén disponibles para los demás.
Es por eso que el Mes de la Herencia Hispana es un buen momento no solo para la reflexión, sino también para la acción. Ya sea ayudando a los necesitados en Nueva Orleans, o compartiendo la inspiración de su trabajo con un líder futuro hispano, permitamos que esta celebración sea un catalizador del éxito en nuestra comunidad.
Los incentivo a que sigan llevando el orgullo asociado a este mes de conmemoración especial a su labor diaria como representantes de la esperanza y la oportunidad con que cada estadounidense hispano ha sido agraciado.
En nombre del Presidente, agradezco nuevamente la labor de la Fundación Nacional Hispana para las Artes. Que Dios bendiga a sus miembros, que los guíe en sus decisiones y que siga bendiciendo a los Estados Unidos de América.
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