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Cese del hábito de fumar y riesgo persistente en el paciente de cáncer (PDQ®)
Versión Paciente   Versión Profesional De Salud   In English   Actualizado: 08/22/2008



Propósito de este sumario del PDQ






Información general






Fumar como factor primario de riesgo






Respuesta más deficiente al tratamiento de los pacientes de cáncer






El hábito de fumar como riesgo de una segunda neoplasia






Efectos de un diagnóstico de cáncer sobre el dejar de fumar y permanecer abstemio






Intervención en el hábito de fumar del paciente de cáncer






Tratamiento farmacológico






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Modificaciones a este sumario (08/22/2008)






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El hábito de fumar como riesgo de una segunda neoplasia

Las personas que al principio se presentan con cánceres relacionados y no relacionados con el hábito fumar se enfrentan con un riesgo mayor riesgo de contraer una segunda neoplasia maligna en el mismo sitio o en otro sitio si continúan fumando.[1,2] Cuando el cáncer inicial tiene un pronóstico más favorable, los datos probatorios son aún más sólidos con respecto a que el continuar fumando aumenta el riesgo de padecer de nuevos cánceres primarios hasta 20 años después del diagnóstico original. En dos estudios de sobrevivientes de cáncer de pulmón de células pequeñas (SCLC, por sus siglas en inglés) (principalmente, en estadios I y II),[3-5] el riesgo de padecer otro cáncer, casi siempre cáncer no-SCLC [NSCLC, por sus siglas en inglés]) fue de 3,5 a 4,4 veces mayor que en la población general. Para los que siguieron fumando, el riesgo fue mucho mayor, particularmente para aquellos que también recibían irradiación torácica (riesgo relativo [RR] = 21,0) y fármacos alquilantes (RR =19,0).[4] En los individuos que dejaron de fumar en el momento del diagnóstico, el riesgo no fue mayor que en los que habían dejado de fumar al menos seis meses antes del diagnóstico. En un estudio de sobrevivientes de cáncer de mama que subsiguientemente contrajeron cáncer de pulmón,[6] el riesgo de contraer posteriormente cáncer de pulmón en aquellas que fueron tratadas con radioterapia torácica sola (XRT, por sus siglas en inglés) fue insignificante, mientras que el riesgo atribuible al hábito de fumar fue substancial (razón de posibilidad ajustada [¥] = 5,6) y más alto aún en la combinación de XRT y el hábito de fumar (¥ sin ajustar = 9,0, P < 0,05; ¥ ajustada = 8,6, P = 0,08). En un estudio de sobrevivientes de la enfermedad de Hodgkin, se identificó un riesgo multiplicador aún mayor para el cáncer de pulmón posterior a causa de la radioterapia y el hábito de fumar (RR = 20,2). Este estudio [7] encontró efectos multiplicadores mayores (RR = 49,1) para una combinación de radiación y fármacos alquilantes en fumadores moderados a empedernidos equiparados con los casos de comparación. Otro estudio realizado en Japón confirmó que los pacientes con SCLC que sobreviven por lo menos dos años redujeron enormemente la probabilidad de padecer de cáncer si dejan de fumar.[8]

Los fumadores que padecen de cáncer de la cavidad oral y la faringe también tienen una tasa excepcionalmente elevada de contraer segundos cánceres primarios. Un estudio de seguimiento de más de 1.000 pacientes con cáncer de la cavidad oral encontró que el riesgo de contraer otro cáncer aumentaba hasta casi cinco veces si el paciente seguía fumando (¥ = 4,7) para los cánceres aerodigestivos entre fumadores empedernidos (dos paquetes o más al día), incluso después de controlar para el alcohol, que tiene su propio exceso de riesgo. No se observó ningún efecto si se cesaba de fumar dentro de los dos años, pero el riesgo disminuyó significativamente después de haber dejado de fumar durante cinco años.[9] Otro estudio [10] confirmó este aumento en el riesgo, aunque en un nivel algo inferior. Se examinaron más de 1.000 pacientes de carcinoma de células escamosas de la cabeza y el cuello para ver los efectos conjuntos del tabaco y el alcohol en segundos tumores primarios (SPT, por sus siglas en inglés) hasta seis años después del diagnóstico inicial. Los casos de SPT tenían mayores probabilidades de pertenecer a fumadores actuales (27,5% frente a 18,8%), quienes fumaron más y durante más tiempo y consumieron otros tipos de tabaco en vez de cigarrillos o en combinación con cigarrillos. El riesgo general para SPT fue aproximadamente el doble para los fumadores. El mayor riesgo estuvo relacionado con el hábito de fumar continuo (RR = 2,1) e ingesta de alcohol (RR = 1,3) después del diagnóstico, aunque no fue evidente ningún efecto de interacción.

También se ha documentado la relación entre el hábito de fumar y la evolución del cáncer de próstata. Un estudio encontró una tasa de mortalidad tumoral específica más alta a los cinco años en fumadores con enfermedad en estadio D2 (88% frente a 63%) y con enfermedad A sin estadio (39% frente a 17%), que se atribuyó a los efectos inmunodepresores del hábito continuo de fumar.[11] Por último, se ha demostrado la repercusión que tiene el fumar sobre el riesgo de padecer de un cáncer de pulmón secundario en los sobrevivientes del linfoma de Hodgkin.[7,12]

Bibliografía

  1. Wynder EL, Mushinski MH, Spivak JC: Tobacco and alcohol consumption in relation to the development of multiple primary cancers. Cancer 40 (4 Suppl): 1872-8, 1977.  [PUBMED Abstract]

  2. Blum A: Cancer prevention: preventing tobacco-related cancers. In: DeVita VT Jr, Hellman S, Rosenberg SA, eds.: Cancer: Principles and Practice of Oncology. 5th ed. Philadelphia, Pa: Lippincott-Raven Publishers, 1997, pp 545-557. 

  3. Richardson GE, Tucker MA, Venzon DJ, et al.: Smoking cessation after successful treatment of small-cell lung cancer is associated with fewer smoking-related second primary cancers. Ann Intern Med 119 (5): 383-90, 1993.  [PUBMED Abstract]

  4. Tucker MA, Murray N, Shaw EG, et al.: Second primary cancers related to smoking and treatment of small-cell lung cancer. Lung Cancer Working Cadre. J Natl Cancer Inst 89 (23): 1782-8, 1997.  [PUBMED Abstract]

  5. Johnson BE: Second lung cancers in patients after treatment for an initial lung cancer. J Natl Cancer Inst 90 (18): 1335-45, 1998.  [PUBMED Abstract]

  6. Ford MB, Sigurdson AJ, Petrulis ES, et al.: Effects of smoking and radiotherapy on lung carcinoma in breast carcinoma survivors. Cancer 98 (7): 1457-64, 2003.  [PUBMED Abstract]

  7. Travis LB, Gospodarowicz M, Curtis RE, et al.: Lung cancer following chemotherapy and radiotherapy for Hodgkin's disease. J Natl Cancer Inst 94 (3): 182-92, 2002.  [PUBMED Abstract]

  8. Kawahara M, Ushijima S, Kamimori T, et al.: Second primary tumours in more than 2-year disease-free survivors of small-cell lung cancer in Japan: the role of smoking cessation. Br J Cancer 78 (3): 409-12, 1998.  [PUBMED Abstract]

  9. Day GL, Blot WJ, Shore RE, et al.: Second cancers following oral and pharyngeal cancers: role of tobacco and alcohol. J Natl Cancer Inst 86 (2): 131-7, 1994.  [PUBMED Abstract]

  10. Do KA, Johnson MM, Doherty DA, et al.: Second primary tumors in patients with upper aerodigestive tract cancers: joint effects of smoking and alcohol (United States). Cancer Causes Control 14 (2): 131-8, 2003.  [PUBMED Abstract]

  11. Daniell HW: A worse prognosis for smokers with prostate cancer. J Urol 154 (1): 153-7, 1995.  [PUBMED Abstract]

  12. Abrahamsen JF, Andersen A, Hannisdal E, et al.: Second malignancies after treatment of Hodgkin's disease: the influence of treatment, follow-up time, and age. J Clin Oncol 11 (2): 255-61, 1993.  [PUBMED Abstract]

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