Es una rara afección que involucra inflamación de las paredes de los vasos sanguíneos.

La vasculitis necrosante, que es muy poco común en niños, se puede presentar en los casos de artritis reumatoidea y se observa con frecuencia en casos de lupus eritematoso sistémico, poliarteritis nodosa y esclerodermia.

Se desconoce la causa de dicha inflamación, pero es probable que esté relacionada con factores inmunitarios. Los tejidos se necrosan (mueren) y la pared del vaso puede cicatrizar y engrosarse. El vaso puede cerrarse, interrumpiendo el flujo de sangre a los tejidos irrigados por éste. La falta de flujo sanguíneo causará la muerte de los tejidos.

La vasculitis necrosante puede afectar cualquier vaso sanguíneo del cuerpo.

• Lesiones cutáneas
  • pápula (lesión pequeña, sólida y levantada)
  • de color rojo a púrpura
  • localizadas en piernas, manos u otras partes del cuerpo
• Dedos de la mano que cambian de color (coloración azulada de los dedos de manos y pies)
• Muerte tisular debido a la falta de oxígeno
  • dolor o sensibilidad en el área
  • enrojecimiento de la piel
  • úlceras que no sanan
• Dolor articular
• Dolor abdominal
• Dolor, entumecimiento, hormigueo en un brazo, pierna u otra área del cuerpo
• Cambios o disminución del funcionamiento de un brazo, pierna u otra área del cuerpo
• Fiebre

Los síntomas adicionales que pueden estar asociados con esta enfermedad son:

• Debilidad
• Dificultad para deglutir
• Dificultad en el habla
• Dolor de pierna
• Contracciones musculares
• Atrofia muscular
• Dificultad en el movimiento
• Menstruación dolorosa
• Ronquera o cambio de voz
• Fatiga
• Pupilas de diferente tamaño
• Párpado caído

Nota: los síntomas varían dependiendo de la ubicación de los vasos afectados.

El médico llevará a cabo un examen físico. Una evaluación neurológica puede revelar daño a los nervios.

Los exámenes que se puede realizar abarcan:

• Biopsia de músculo, biopsia de nervio o biopsia de un órgano o tejido
• Radiografía de tórax
• Tasa de sedimentación
• Análisis de orina
• Examen de sangre para hepatitis
• Examen de sangre para anticuerpos contra neutrófilos (anticuerpos ANCA)

Los corticosteroides (administrados en dosis bajas) u otros medicamentos que inhiban el sistema inmunitario pueden reducir la inflamación de los vasos sanguíneos.

El resultado varía de acuerdo con la ubicación de la vasculitis y la gravedad del daño a los tejidos.

• Daño permanente a la estructura o función del área afectada
• Infecciones secundarias de tejidos necrosados

Se debe consultar con el médico si se presentan síntomas de vasculitis necrosante.

Los síntomas de emergencia son, entre otros: debilidad, dificultad para deglutir, dificultad en el habla, cambios en el tamaño de las pupilas y pérdida del funcionamiento de un brazo, pierna u otra parte del cuerpo.

Se desconoce la forma de prevenir este trastorno.