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Hierro

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Historia

El hierro es un mineral esencial y un importante componente de proteínas que está presente en el transporte del oxígeno y en el metabolismo. El hierro es también un cofactor esencial en la síntesis de los neuro-transmisores, como la dopamina, norepinefrina y serotonina. Cerca del 15 por ciento del hierro del cuerpo se almacena para futuras necesidades y se activa si la ingestión en la dieta es inadecuada. Por lo general, el cuerpo mantiene el estado del hierro normal mediante la cantidad de hierro que se absorbe de los alimentos.

Existen dos formas de hierro en la dieta: heme y no-heme. Dentro de las fuentes de hierro heme se encuentran las siguientes: carnes, pescado y aves. Dentro de las fuentes de hierro no-heme, el cual no se absorbe tan bien como el hierro heme, se encuentran los siguientes alimentos: frijoles, lentejas, harinas, cereales y productos de granos. Dentro de otras fuentes de hierro se incluyen los siguientes alimentos: frutas secas, arvejas, espárragos, vegetales de hojas verdes, fresas y nueces.

La Organización Mundial de la Salud considera que la deficiencia por falta de hierro es el más grande trastorno nutricional a nivel internacional. Aunque gran parte de la disparidad étnica en la anemia por deficiencia de hierro sigue sin una explicación, es posible que incidan factores socioeconómicos.

La deficiencia de hierro se puede determinar al medir los niveles de hierro en del cuerpo, sobre todo los niveles de ferritina sérica, la cual puede ayudar a distinguir entre la anemia por deficiencia de hierro y la anemia asociada a una enfermedad crónica.

Se pueden usar preparaciones a base de hierbas, como la raíz de dársena amarilla, para combatir la deficiencia de hierro, aunque puede haber ausencia de evidencias científicas.

Sinónimos

Número atómico 26, hierro carbonilo, hierro-dextrán, hierro elemental, FE, Fer, carbonato ferroso anhidro, fumarato ferroso, gluconato ferroso, pirofosfato ferroso, sulfato ferroso, hierro dextrán, hierro polisacárido, hierro sorbitol, hierro sacarosa, gluconato férrico de sodio.

Nombres de marcas seleccionadas de Estados Unidos : DexFerrum®, Femiron®, Feosol Caplets®, Feosol Tablets®, Feostat®, Feostat Drops®, Feratab®, Fer-gen-sol®, Fergon®, Fer-In-Sol Drops®, Fer-In-Sol Syrup®, Fer-Iron Drops®, Fero-Gradumet®, Ferospace®, Ferralet®, Ferralet Slow Release®, Ferralyn Lanacaps®, Ferra-TD®, Ferretts®, Ferrlecit®, Fumasorb®, Fumerin®, Hemocyte®, Hemofer®, Hytinic®, InFeD®, Ircon®, Mol-Iron®, Nephro-Fer®, Niferex®, Niferex-150®, Nu-Iron®, Nu-Iron 150®, Simron®, Slow Fe®, Span-FF®, Venofer®.

Evidencia

Se han sometido a prueba los siguientes usos en humanos o animales. La seguridad y eficacia de los mismos no siempre se han demostrado. Algunas de estas afecciones son potencialmente serias y las debe evaluar un proveedor médico calificado.

Uso basado en evidencia científicaGrado*
Anemia como enfermedad crónica

La administración de hierro por vía oral con alfa epoyetina (eritropoyetina, EPO, Epogen®, Procrit®) es efectiva en el tratamiento de anemia asociada a la insuficiencia renal crónica y a la quimioterapia.
A
Anemia por deficiencia de hierro

El sulfato ferroso (Feratab®, Fer-Iron®, Slow-FE®) es el tratamiento estándar para combatir la anemia por deficiencia de hierro. Los proveedores médicos administran el hierro-dextrán (INFeD®) por vía intravenosa para restaurar los niveles adecuados de hierro en la médula espinal en caso de que no funcione la terapia de hierro por vía oral.
A
Tos asociada con el inhibidor ACE

Tomar hierro por vía oral parece inhibir la tos asociada con los inhibidores (ACE) de la enzima convertidota de angiotensina, tales como captopril (Capoten®), enalapril (Vasotec®) y lisinopril (Prinivil®, Zestril®).
B
Prevención de deficiencia de hierro en mujeres que menstrúan

Se ha mostrado que la suplementación de hierro mejora el estado del hierro en las mujeres que menstrúan.
B
Prevención de anemia por deficiencia de hierro durante el embarazo

Se ha mostrado que los suplementos de hierro ayudan a evitar la anemia por deficiencia de hierro en mujeres embarazadas. La anemia en mujeres embarazadas se ha asociado con repercusiones adversas, como bajo peso en el nacimiento, nacimiento prematuro y mortalidad materna. Se necesita la supervisión de un proveedor médico calificado. Generalmente, las dosis bajas se toleran bien y se asocian con un mejor funcionamiento.
B
Prevención de la anemia asociada con el parto prematuro/ infantes con bajo peso en el nacimiento

Se necesitan estudios adicionales de la suplementación de hierro prenatal antes de hacer una recomendación firme con respecto a los efectos de la anemia en el parto prematuro/ infantes con bajo peso en el nacimiento.
C
Prevención de la deficiencia de hierro en mujeres que practican ejercicios

Estudios preliminares indican que la suplementación de hierro puede revertir la anemia leve después del ejercicio, mejorar las energías y el rendimiento. Sin embargo, otros estudios discrepan de esta idea. Se necesitan investigaciones adicionales en esta área antes de hacer una recomendación firme.
C
Tratamiento de la anemia prediálisis

Una adecuada suplementación de hierro puede ayudar como tratamiento adjunto a la terapia con eritoproteína para la anemia prediálisis. Un proveedor médico calificado es quien debe tratar la anemia prediálisis. Se requieren estudios adicionales en esta área.
C
Mejoramiento del rendimiento cognitivo relacionado con la deficiencia de hierro

Tomar hierro por vía oral parece mejorar la función cognitiva relacionada con la deficiencia de hierro en niños y adolescentes que presentan deficiencia de hierro. Se necesita de investigaciones adicionales para confirmar el potencial beneficio de esta indicación. No se recomiendan suplementos de hierro para mejorar el rendimiento cognitivo en personas que no presentan deficiencia de hierro.
C
Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD)

Con base en datos preliminares, tomar hierro por vía oral podría mejorar los síntomas del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD). Se necesitan estudios adicionales antes de llegar a una conclusión.
C
Toxicidad por plomo

La deficiencia de hierro puede aumentar el riesgo de envenenamiento por plomo en los niños. Sin embargo, el uso de la suplementación de hierro en el envenenamiento por plomo se debe reservar para aquellas personas que ciertamente presentan deficiencia de hierro o para aquellas personas que se ven expuestas al plomo de forma continua, como los residentes de viviendas con exposición al plomo.
C
Fatiga en mujeres con bajos niveles de ferritina

El sulfato ferroso puede mejorar la fatiga, sobre todo en mujeres que tienen bajas concentraciones de ferritina sérica o están a punto de llegar a ese nivel. Se necesita de investigaciones adicionales para confirmar estos resultados.
C
Prevención de la deficiencia de hierro después de una donación de sangre

Los resultados preliminares reportan que el hierro elemental puede compensar de forma adecuada la pérdida de hierro en hombres y mujeres que donan sangre entera por un máximo de cuatro veces al año en el caso de las mujeres y por un máximo de seis veces al año en el caso de los hombres.
C
Prevención de la anemia por deficiencia de hierro causada por sangrado gastrointestinal

Una dosis intravenosa alta de terapia de hierro sacarosa en pacientes con anemia por deficiencia de hierro por pérdida de sangre gastrointestinal parece ser segura y, por tanto, es una opción terapéutica que puede ahorrar tiempo y mejorar el cumplimiento del paciente con el tratamiento. Se requiere investigación adicional en esta área.
C
Terapia para la anemia posterior a una cirugía ortopédica

La evidencia preliminar reporta que la ingesta de hierro que después de una cirugía opcional de reemplazo de rodilla o cadera no produce mayor hemoglobina después de la cirugía ni acelera el nivel de aumento de la hemoglobina más que un placebo.
D

*Referencia para los grados:
A: Sólida evidencia científica para este uso;
B: Buena evidencia científica para este uso;
C: Dudosa evidencia científica para este uso;
D: Aceptable evidencia científica contra este uso;
F: Sólida evidencia científica contra este uso.

Usos basados en la tradición o teoría
Los siguientes usos están basados en la tradición, teorías científicas o investigación limitada. A menudo no se han probado completamente en humanos y no siempre se han demostrado su seguridad y eficacia. Algunas de estas afecciones son potencialmente serias y las debe evaluar un proveedor médico calificado. Podría haber otros usos propuestos que no están señalados a continuación.

Anemia en anorexia nerviosa, temblor en el brazo, enfermedad de Crohn, fibrosis quística, depresión, infertilidad femenina, crecimiento, mejoramiento del desempeño atlético, menorragia (sangrado menstrual anormalmente abundante), pagofagia (acción de comer hielo de forma convulsiva), prevención de la anemia en donantes de sangre, síndrome de piernas inquietas, mejoramiento del sistema inmunológico, úlceras bucales.

Seguridad

The U.S. Food and Drug Administration does not strictly regulate herbs and supplements. There is no guarantee of strength, purity or safety of products, and effects may vary. You should always read product labels. If you have a medical condition, or are taking other drugs, herbs, or supplements, you should speak with a qualified healthcare provider before starting a new therapy. Consult a healthcare provider immediately if you experience side effects.

Alergias
El hierro es una traza mineral y no es probable la hipersensibilidad. Evítese en caso de presentarse algún tipo de alergia conocida/ hipersensibilidad a los productos que contienen hierro.

Efectos secundarios y advertencias
En general, las personas con antecedentes de enfermedades renales, enfermedades intestinales, enfermedad de úlcera péptica, enteritis, colitis, pancreatitis, hepatitis, que consumen alcohol en exceso, que piensan quedar en embarazo o tienen más de 55 años y tienen antecedentes familiares de enfermedad cardiaca, deben consultar con un doctor y un farmacólogo antes de comenzar a consumir hierro.

Es posible que las preparaciones de hierro en líquido por vía oral negreen los dientes.

Los síntomas de sobredosis aguda o acumulación de hierro pueden incluir artritis, signos de insuficiencia gonadal (amenorrea, menopausia prematura, pérdida del libido, impotencia) y falta de respiración/disnea. Dosis muy altas pueden causar vómito y diarrea y posteriormente toxicidad metabólica o cardiovascular y la muerte. No está claro si los altos niveles están asociados con el cáncer, la enfermedad cardiaca coronaria y los infartos del miocardio (o ataque al corazón).

Se ha reportado un desequilibrio gastrointestinal con náuseas, vómito, estreñimiento, diarrea y heces oscuras. Los efectos secundarios del desequilibrio gastrointestinal son relativamente comunes y se podrían recomendar regímenes intestinales correctivos, como un incremento de fibras en la dieta o medicamentos de venta libre a fin de balancear estos efectos secundarios. Se recomienda la supervisión de un proveedor médico calificado.

Las personas con trastornos en la sangre que necesitan frecuentes transfusiones sanguíneas están también en riesgo de sobrecarga de hierro y no deben tomar suplementos de hierro sin la orientación de un proveedor médico calificado. El uso de altas dosis de hierro a largo plazo pueden provocar hemosiderosis que en términos clínicos se asemeja a la hemocromatosis. La sobrecarga de hierro se asocia con varias enfermedades genéticas que incluyen la hemocromatosis (un defecto del metabolismo del hierro con acumulación de hierro en el cuerpo). Los síntomas tempranos de hemocromatosis más comúnmente asociados incluyen fatiga, debilidad, pérdida de peso, dolor abdominal y artralgia (dolor de articulaciones). La sobrecarga de hierro en niños con peso muy bajo al momento de nacer es posible luego de múltiples trasfusiones de sangre debido al incremento de la concentración de hierro en el hígado. La sobrecarga de hierro antes de nacer podría contribuir a la patogénesis de la enfermedad, pero se requieren estudios adicionales para confirmar esta afirmación. La acumulación de exceso de hierro se investiga como posible contribuyente a enfermedades neurodegenerativas tales como las enfermedades de Alzheimer y Parkinson.

La infección del virus de la hepatitis C y la carga de hierro pueden agravar la tensión oxidativa en los pacientes con diálisis.

Se ha reportado un caso de hipersiderosis (sudoración incontrolable) con una suplementación de hierro a largo plazo en pacientes urémicos tratados con diálisis periódica.

Un estudio indica que un mayor consumo de carnes rojas totales, especialmente los diversos tipos de carnes procesadas, pueden aumentar el riesgo de desarrollar la diabetes tipo 2 en las mujeres.

Embarazo y lactancia
Las mujeres embarazadas o lactantes deben buscar orientación de un proveedor médico calificado antes de tomar cualquier suplemento en la dieta. El estado del hierro en las mujeres embarazadas se debe medir pronto (antes de la semana 15 de gestación) y se deben administrar suplementos de hierro como una profilaxis selectiva con base en el nivel de ferritina sérica.

Embarazo categoría B según la FDA: A menudo es seguro, pero los beneficios deben sobrepasar los riesgos.

Embarazo categoría C según la FDA: No se ha establecido la seguridad del uso durante el embarazo para reabastecer las reservas agotadas de hierro en la médula espinal, de donde se incorpora a la hemoglobina.

Interacciones

La mayoría de las hierbas y suplementos no se han probado completamente en cuando a la interacción con otras hierbas, suplementos, drogas o alimentos. Las interacciones que se señalan a continuación se basan en informes y publicaciones científicas, experimentos de laboratorio o uso tradicional. Siempre debe leer las etiquetas del producto. Si usted padece de alguna afección, o si está tomando otras drogas, hierbas o suplementos, deberá consultar con un proveedor médico calificado antes de iniciar una terapia nueva.

Interacciones con drogas
Se receta el ácido acetohidroxámico (AHA, Lithostat®)para disminuir el amoníaco en la orina y puede ayudar a que funcionen los antibióticos o ayuden a otro tratamiento de cálculos renales. El uso con suplementos de hierro puede hacer que cualquier medicina sea menos efectiva.

El alopurinol (Zyloprim®) es un medicamento que se usa para el tratamiento de gota, puede aumentar las reservas de hierro en el hígado y no se debe usar en combinación con suplementos de hierro.

El ácido aminosalicílico (ácido para-aminosalicílico, PAS, Paser) puede provocar el síndrome de mala absorción: pérdida de peso, agotamiento de vitamina y hierro, grasa excesiva en las heces (esteatorrea). En caso de que se presente cualquiera de estos síntomas, se debe contactar a un proveedor médico calificado inmediatamente.

Los antiácidos pueden reducir la absorción de hierro y en ocasiones han provocado una menor eficacia. No es probable obtener efectos de significado clínico con la ingestión adecuada de hierro en la dieta. Sin embargo, se recomienda evitar antiácidos o separar las dosis de antiácidos y hierro.

La aspirina y las drogas antiinflamatorias no esteroides pueden provocar daño en la mucosidad y sangrado a través del tracto gastrointestinal. La pérdida de sangre crónica asociada con el uso a largo plazo de estos agentes puede contribuir a la anemia por deficiencia de hierro. Dado que los suplementos pueden irritar el tracto gastrointestinal urinario, los pacientes no los deben usar concurrentemente con las drogas antiinflamatorias no esteroides a menos que así lo indique el doctor. Se puede recomendar la ingestión de alimentos abundantes en hierro como una alternativa.

El hierro puede disminuir la absorción de bisfosfonatos de drogas por prescripción al formar complejos insolubles. Dentro de los bisfosfonatos se incluyen los siguientes: alendronato (Fosamax®), etidronato (Didronel®), risedronato (Actonel®) y tiludronato (Skelid®). Se deben separar las dosis de bisfosfonatos por lo menos dos horas de las dosis de todos los otros medicamentos e incluso de suplementos como el hierro.

El clororamfenicol (Chloromycetin®) puede reducir la respuesta de la terapia de hierro en la anemia por deficiencia de hierro.

La colestiramina (Questran®) y el colestipol (Colestid®) pueden unir el hierro en el intestino, reduciendo así la absorción. No se ha reportado deficiencia de hierro con significado clínico por inducción de estas drogas y no es probable que se necesiten suplementos. Si está tomando suplementos de hierro para otras causas de deficiencia, se recomienda que las dosis de hierro y colestiramina o colestipol se separen por al menos cuatro horas.

La desferrioxamina (DFO) es una droga quelante de hierro que baja los niveles de hierro.

Los suplementos de hierro y el dimercaprol pueden combinarse en el cuerpo para formar un químico peligroso.

Se ha mostrado que los depósitos de hierro en la médula espinal se disminuyen de forma significativa en pacientes tratados con EPO-R.

El hierro disminuye la absorción de antibióticos fluoroquinolones. Dentro de los fluoroquinolones se incluyen ciprofloxacín (Cipro®), levofloxacín (Levaquin®), ofloxacín (Floxin®) y otros. Se recomienda tomar estos antibióticos al menos dos horas antes o dos horas después de los suplementos que contienen hierro.

El ácido gástrico es importante para la absorción del hierro, sobre todo en el hierro no heme (de origen vegetal) en la dieta. Se recomienda la ingestión adecuada de hierro en la dieta cuando se toman bloqueadores H2 como la cimetidina, (Tagamet®), ranitidina (Zantac®), famotidina (Pepcid®) o nizatidina (Axid®). No siempre se necesitan suplementos de hierro a menos que éstos se usen para otra indicación.

Existen algunas evidencias en personas sanas de que el hierro forma quelados con levodopa (Sinemet®), reduciendo así la cantidad de levodopa que se absorbe en aproximadamente 50%. Hasta que existan investigaciones adicionales disponibles, separe las dosis de levodopa y hierro como sea posible.

El hierro puede disminuir la absorción y eficacia de la levotiroxina (Levoxyl®, Synthroid®) al formar complejos insolubles en el tracto gastrointestinal. Es recomendable separar las dosis de hierro de la levotiroxina al menos por dos horas.

El hierro puede reducir la absorción de metildopa (Aldomet®), lo que da como resultado un mayor aumento en la presión sanguínea. Se recomienda separar las dosis de metildopa al menos por dos horas.

Los suplementos de hierro por vía oral reducen marcadamente la absorción de micofenolato mofetil (CellCept®). Se recomienda administrar el hierro cuatro a seis horas antes y dos horas después del micofenolato mofetil.

Existen algunas evidencias de que los suplementos de la enzima pancreática (como Cotazym®, Creon®, Pancrease®, Ultrase®, Viokase®), pueden reducir la absorción de hierro, posiblemente al unir el hierro o al alterar el pH. No es posible ningún significado clínico, salvo en las personas que sufren de fibrosis quística que necesitan suplementos de enzima pancreática por largos períodos y que tengan otros factores que contribuyan a la deficiencia de hierro. Un proveedor médico calificado debe controlar el estado del hierro.

Los suplementos de hierro por vía oral pueden reducir la absorción de penicilamina (Cuprimine®, Depen®) de 30% a 70%; probablemente por la formación de quelados. La eficacia de la penicilamina se ve reducida en la enfermedad de Wilson. No se ha determinado el significado clínico en las personas que sufren artritis reumatoide. A los pacientes se les debe recomendar tomar penicilamina al menos dos horas antes o después de los suplementos que contienen hierro.

El ácido gástrico es importante en la absorción del hierro. Sin embargo, el tratamiento a largo plazo, por un máximo de 12.5 años con inhibidores de la bomba de protones como esomeprazol (Nexium®), lansoprazol (Prevacid®), omeprazol (Prilosec®), rabeprazol (Aciphex®), pantoprazol (Protonix®, Pantoloc®) no se ha asociado con el desgaste de hierro o anemia en personas con reservas normales de hierro. Se recomienda mantener una adecuada ingestión de hierro en la dieta.

El uso concurrente puede disminuir la absorción de antibióticos tetraciclinas de 50% a 90%. A los pacientes se les debe recomendar tomar tetraciclinas al menos dos horas antes o después de los suplementos que contienen hierro. Algunas de estas drogas incluyen doxiclina (Vibramycin®), minociclina (Minocin®), tetraciclina (Achromycin®) y otras.

Interacciones con hierbas y suplementos dietéticos
La acacia forma un gel insoluble con hierro férrico. Se desconoce el significado clínico.

Se ha mostrado que los suplementos de calcio inhiben absorción de los suplementos de hierro si se toman con las comidas. Sin embargo, en las personas con adecuadas reservas de hierro, esto no parece tener ningún significado clínico. Si hay algún riesgo de deficiencia de hierro, se recomienda tomar suplementos de calcio a la hora de dormir y no con las comidas, para evitar inhibir la absorción de hierro en la dieta.

Los suplementos de hierro pueden alterar el metabolismo del cobre, pero no se conoce la importancia clínica de esta observación.

Los ácidos málicos, lácticos, tartáricos y cítricos poseen ciertos efectos de aumento en la absorción del hierro no heme.

El ácido fítico se encuentra en legumbres, granos y arroz y es un inhibidor de absorción de hierro no heme. Pequeñas cantidades de ácido fítico pueden reducir el hierro no heme en 50%. Se ha demostrado que la absorción de hierro en legumbres, como soya, frijoles negros, frijoles mung y arvejas es tan solo 2%.

Los polifenoles que se encuentran en algunas frutas, vegetales, cafés, tés, vinos y especias pueden inhibir marcadamente la absorción de hierro no heme. La presencia de vitamina C reduce este efecto.

Los suplementos de riboflavina (vitamina B2) pueden mejorar la respuesta hematológica a los suplementos de hierro en algunas personas con anemia.

Con base en datos preliminares, el hierro puede disminuir los niveles de selenio. Se necesitan de investigaciones adicionales para confirmar estos resultados.

La proteína de soya reduce la absorción del hierro no heme (de origen vegetal) en la dieta, probablemente por la unión del hierro por el fitato y el calcio que hay en la soya. Los productos de soya fermentados parecen inhibir la absorción de hierro en menor proporción.

La vitamina A parece estar involucrada en la movilización del hierro desde las reservas de los tejidos hacia el lugar de entrega para desarrollar células de glóbulos rojos en la médula espinal. La vitamina A también puede estar involucrada en la diferenciación y proliferación de las células madres en la médula espinal y en la síntesis de la eritropoyetina. Las evidencias preliminares indican también que la vitamina A y el betacaroteno pueden aumentar la absorción de hierro no heme del trigo, harina de maíz y arroz con hierro fortificado. No es probable que los suplementos de vitamina A tengan efectos significativos en el estado del hierro en personas que no tienen deficiencia de vitamina A.

La cantidad de vitamina C en la dieta es un factor en la absorción del hierro en la dieta y en el estado del hierro. La vitamina C puede contrarrestar los efectos de las sustancias, que inhiben la absorción del hierro. La vitamina C en suplementos o en la dieta mejora la absorción del hierro no heme (de origen vegetal) en suplementos o en la dieta que se ingesta al mismo tiempo. Probablemente no sea necesario tomar un suplemento de vitamina C para mejorar la absorción del hierro en suplementos o en la dieta para la mayoría de las personas, sobre todo si las dietas contienen adecuadas cantidades de vitamina C.

El uso de preparaciones de hierro por vía oral en infantes prematuros con bajos niveles séricos de vitamina E puede producir hemólisis o anemia hemolítica. La deficiencia de vitamina E se debe corregir antes de administrar el suplemento de hierro.

El hierro puede disminuir la absorción de cinc, pero no parece que sea una interacción de gran significado clínico entre el hierro y el cinc adquiridos en la dieta, o entre el suplemento de hierro y las fuentes de cinc en la dieta.

Metodología

Esta información está basada en una monografía a nivel profesional editada y revisada por colaboradores del Natural Standard Research Collaboration (www.naturalstandard.com): Ethan Basch, MD (Memorial Sloan-Kettering Cancer Center); Dawn Costa, BA, BS (Natural Standard Research Collaboration); Shaina Tanguay-Colucci, BS (Natural Standard Research Collaboration); Catherine Ulbricht, PharmD (Massachusetts General Hospital); Christine Ulbricht, PharmD (University of Massachusetts); Wendy Weissner, BA (Natural Standard Research Collaboration); Marilyn Zeledón (New England Translations).

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01 Enero de 2008.

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