Los Estados Unidos y el Estado de Alaska le presentaron hoy a ExxonMobil Corporation un plan detallado para un proyecto de recuperación propuesto que tiene como objetivo restaurar el hábitat en el área afectada por el derrame de petróleo de Exxon Valdez de 1989. El plan de recuperación presentado hoy acata los requisitos de un grupo de disposiciones conocidas como "Reapertura por daños desconocidos" en el decreto por consentimiento que concilió las reclamaciones civiles de los gobiernos contra Exxon Corporation (ahora denominada ExxonMobil), Exxon Shipping Company y Exxon Pipeline Company a raíz del derrame. El proyecto se concentra en eliminar gran parte del petróleo que sigue estando presente en el ambiente en una forma que resulta potencialmente dañina para los recursos naturales y perjudicial a las actividades humanas. Los fiduciarios federales y estatales se han comprometido a ejercer la disposición de Reapertura si la ciencia actual apoya los requisitos de la Reapertura. Esta acción constituye la culminación de una profunda evaluación por parte de los gobiernos de las bases científicas y jurídicas para reclamaciones potenciales bajo la Reapertura.
La Disposición de Reapertura:
Al momento del acuerdo conciliatorio, Exxon acordó pagarles a los gobiernos 900 millones de dólares en cuotas por costos y daños a los recursos naturales que ya se conocían o, con cierta lógica, se anticipaban al momento de la firma del acuerdo. El acuerdo también incluyó una disposición sin precedentes que permitía que fiduciarios federales y estatales solicitaran hasta 100 millones de dólares en dinero adicional por daños que cumplieran con los siguientes criterios:
Una pérdida o disminución sustancial en una o más poblaciones, hábitats o especies en el área del derrame, como resultado del derrame, cuando la pérdida o disminución fueran desconocidas y no hubieran podido ser previstas por los gobiernos; uno o más proyectos que ayudarían a recuperar los daños a la población, el hábitat o las especies y cuyos gastos no fueran muy desproporcionados con respecto a su(s) beneficios.
Cualquier demanda bajo la disposición de Reapertura debe realizarse antes del 1º de septiembre de 2006, y los gobiernos deben brindarle a Exxon planes detallados para la realización de cualquier plan de recuperación propuesto al menos 90 días antes de presentar la demanda—antes del 2 de junio de 2006.
El plan propuesto:
El proyecto propuesto tiene dos objetivos principales: (1) determinar la ubicación, las cantidades aproximadas y los estados químicos de todos los depósitos residuales significativos de petróleo en el área del derrame; (2) acelerar los procesos naturales de degradación y dispersión del petróleo remanente, o recuperar de alguna otra manera las zonas con petróleo, en la mayor medida posible dentro de lo establecido por la ciencia teniendo en cuenta factores como el tamaño y la distribución de manchas remanentes de petróleo, las condiciones en las zonas con petróleo, los recursos naturales o actividades humanas afectadas, y los beneficios y costos relativos (incluyendo los potenciales efectos adversos) de la reparación activa. El plan solicita expresamente participación pública y programas de alcance exterior en etapas clave del proceso.
El costo final del proyecto depende de factores como la cantidad de lugares con petróleo que requieren reparación y el enfoque de reparación seleccionado. Actualmente se calcula que costará alrededor de 92 millones de dólares.
Antecedentes del derrame de petróleo de Exxon Valdez:
El buque petrolero de Exxon Valdez se hundió en el arrecife Bligh en Prince William Sound, Alaska, en las primeras horas del 24 de marzo de 1989. Se estima que se derramaron once millones de galones de petróleo crudo, que terminaron por derramar petróleo en alrededor de 1,750 kilómetros de costa en el Golfo de Alaska. El petróleo tuvo efectos devastadores en la flora y fauna marina y otros recursos naturales en el área del derrame y afectó la vida de los residentes del área del derrame durante muchos años.
El daño provocado por el derrame fue de gran magnitud. Según las estimativas científicas del gobierno, murieron aproximadamente 250,000 aves marinas por exposición directa al petróleo, junto con alrededor de 2,800 nutrias de mar y gran cantidad de focas comunes. Mariscos como las almejas y los mejillones, y otros animales y plantas que conforman comunidades entre mareas sufrieron mucho a raíz del derrame y algunas de las medidas de limpieza. Dos manadas de orcas sufrieron grandes pérdidas en los dos años posteriores al derrame y se sospecha fuertemente que la exposición al petróleo haya sido el factor determinante. Se han realizado y se siguen realizando bajo el acuerdo original estudios sobre los efectos del derrame en muchas de estas especies.
Los acuerdos conciliatorios con el gobierno:
El 8 de octubre de 1991, el Tribunal Federal de Distrito en Anchorage aceptó declaraciones de culpabilidad por parte de Exxon Corporation y Exxon Shipping Company respecto de delitos ambientales federales y, además, aprobó un acuerdo conciliatorio civil que puso fin a reclamaciones del gobierno federal y Alaska por gastos anteriores de limpieza y daños a recursos naturales. El acuerdo de declaración de culpabilidad penal implicaba una multa de 150 millones de dólares, de los cuales 125 millones fueron condonados, y el pago de 100 millones de dólares en pagos de restitución, que se dividieron equitativamente entre los Estados Unidos y el Estado de Alaska. El acuerdo conciliatorio civil exigía que Exxon pagara 900 millones de dólares a ambos gobiernos a lo largo de diez años. Ese dinero se ha usado y se sigue usando en proyectos de recuperación a corto y largo plazo realizados en Prince William Sound y el Golfo de Alaska, así como también en investigaciones exhaustivas sobre los recursos. El propósito de esos fondos es rehabilitar y recuperar los recursos dañados hasta el momento de la firma de los acuerdos conciliatorios.
El Concejo Fiduciario (formado por los Departamentos del Interior y de Agricultura, la Oficina Nacional de la Administración Oceánica y Atmosférica y el Estado de Alaska) adoptó un Plan de Recuperación formal para los procedimientos de acuerdo conciliatorio en 1994, después de un extenso proceso público. Desde 2004, el Concejo Fiduciario posee 145 millones de dólares restantes luego de gastos por diversas actividades de recuperación, investigación y control de recursos dañados, adquisición y protección de hábitat, y actividades de evaluación de daños.
La presentación de un plan a ExxonMobil realizada hoy es el primer paso para ejercer la disposición de Reapertura del decreto por consentimiento.
Próximos pasos:
De acuerdo con la Disposición de Reapertura, recién se le podrá exigir pagar o responder a ExxonMobil después de un periodo de 90 días a partir de la presentación del plan de recuperación propuesto. Esta disposición garantiza un período de negociaciones para resolver una reclamación de Reapertura sin litigio.
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