¿Cómo se diagnostica el ataque
cardíaco?
El diagnóstico de un ataque cardíaco
se basa en los síntomas del paciente, sus antecedentes médicos
personales y familiares, y los resultados de las pruebas diagnósticas
que le hagan.
Electrocardiograma (ECG)
Esta prueba detecta y registra la actividad
eléctrica del corazón. Ciertos cambios en el aspecto de las ondas
eléctricas de un ECG son pruebas sólidas de que el paciente tiene
un ataque cardíaco. El ECG también puede mostrar si usted
está teniendo arritmias (latidos anormales), que pueden deberse a un
ataque cardíaco y a otras enfermedades.
Pruebas de sangre
Durante un ataque cardíaco las células
del músculo cardíaco mueren y estallan, dejando salir ciertas
proteínas al torrente sanguíneo. Existen pruebas de sangre para
medir la cantidad de estas proteínas en la sangre. Si las
concentraciones de estas proteínas en la sangre son más altas que
lo normal, se comprueba que hubo un ataque cardíaco.
Entre las pruebas de sangre que se usan con
frecuencia están la troponina, la CK (creatinaquinasa), la CK-MB
(fracción MB de la creatinaquinasa) y las pruebas de mioglobina
sérica. A menudo las pruebas de sangre se repiten para ver los cambios
de estas sustancias a través del tiempo.
Angiografía coronaria
La angiografía coronaria es un examen
especial de radiología del corazón y los vasos sanguíneos.
A menudo se realiza durante un ataque cardíaco para poder ubicar los
bloqueos de las arterias coronarias.
El médico introduce un catéter (que es
un tubo delgado y flexible) por una arteria del brazo o la ingle (la parte
superior del muslo) y lo hace pasar hasta el corazón. Este
procedimiento, que se llama cateterismo cardíaco, forma parte de la
angiografía coronaria.
Por el extremo del catéter se inyecta en la
sangre un medio de contraste o líquido que se puede ver en una
radiografía. El medio de contraste le permite al médico estudiar
el flujo de sangre que pasa por el corazón y los vasos
sanguíneos.
Si se encuentra un bloqueo se puede usar otro
procedimiento llamado angioplastia para restablecer el flujo de sangre por la
arteria. A veces durante la angioplastia el médico pone dentro de la
arteria una endoprótesis vascular (stent), que es un tubo
pequeño de malla que sirve para mantener la arteria abierta. |