Los virus ECHO (del inglés Enteric Cytopathic Human Orphan virus) son un grupo de enterovirus que producen diversos síntomas, incluyendo erupciones, enfermedades respiratorias, síndromes similares al crup y fiebres inespecíficas.

Las infecciones por virus ECHO son comunes y usualmente se manifiestan en forma de infecciones gastrointestinales y erupciones cutáneas.

Las infecciones más graves se observan con menos frecuencia, pero tienen una importancia significativa. Se cree que uno de cinco casos de meningitis aséptica (una infección cerebral no provocada por bacterias) es causada por un virus ECHO.

Los virus ECHO ocasionan una gran variedad de enfermedades. Los síntomas varían de acuerdo con el tipo de enfermedad producida y se pueden encontrar bajo diagnósticos específicos:

• Gastroenteritis aguda
• Faringitis viral
• Herpangina (úlceras bucales)
• Crup
• Infección de las vías respiratorias altas
• Neumonía
• Pericarditis
• Miocarditis
• Meningitis aséptica
• Encefalitis

Los virus ECHO se pueden identificar a partir de frotis o muestras faríngeas, fecales y rectales, al igual que del líquido cefalorraquídeo.

Las infecciones por virus ECHO tienden a resolverse espontáneamente y no se dispone de medicamentos antivirales específicos para tratarlas.

Un refuerzo inmunitario, llamado IVIG, puede ayudar a pacientes inmunocomprometidos con infecciones graves por este virus.

En pacientes con los tipos de la enfermedad menos severos, se puede esperar una recuperación sin necesidad de tratamiento. Las infecciones de órganos como el corazón (pericarditis y miocarditis) pueden ocasionar una enfermedad grave y pueden ser mortales.

Las complicaciones varían de acuerdo con el tipo de infección y su localización. La miocarditis y la pericarditis pueden ser mortales, mientras que infecciones de otro tipo mejoran espontáneamente.

Se debe buscar asistencia médica, si se presentan síntomas indicadores de algunas de las enfermedades antes mencionadas.

En este momento no se dispone de vacunas ni de ninguna medida preventiva específica para las infecciones causadas por el virus ECHO, excepto por el lavado de las manos, especialmente cuando se tiene contacto con personas enfermas.