Hoja informativa: vacuna de la hepatitis B
Primera vacuna contra
el cáncer
- La vacuna
contra la hepatitis B previene la enfermedad de la hepatitis
B y las graves consecuencias que esta enfermedad genera
como el carcinoma hepatocelular (cáncer del hígado). Por
esta razón, esta es la primera vacuna contra el cáncer.
Segura y efectiva
- Las comunidades
médicas, científicas, y de salud pública favorecen firmemente
el uso de la vacuna contra la hepatitis B como un modo
seguro y efectivo para prevenir la enfermedad y la muerte.
- Los datos
científicos muestran que la vacuna contra la hepatitis
B es segura para bebés, niños y adultos.
- No hay
evidencias confirmadas que indiquen que la vacuna
contra la hepatitis B causa enfermedades crónicas.
- Para asegurar
un estándar alto de seguridad con las vacunas, varias
agencias federales constantemente evalúan e investigan
los efectos que pudieran
estar asociados con las vacunas.
Calendario de vacunación
- Calendarios imprimibles de inmunización para niños y adolescentes,
2003 (página en
inglés) Programa Nacional de Inmunización, CDC
- Si
se interrumpe la serie de vacunaciones después de la primera
dosis, la segunda dosis debe ser administrada la más pronto
posible. La segunda y tercera dosis deben ser separadas
por intervalos de por lo menos 2 meses. Si sólo la tercera
dosis es retrasada, debe ser administrada cuando sea conveniente.
Dosis de refuerzo
- Los
datos actuales demuestran que los niveles de anticuerpos
superficiales de hepatitis B inducidos por la vacuna (anti-HBs)
pueden disminuir con el paso del tiempo; sin embargo,
la memoria inmune (respuesta anti-HBs anamnésica) permanece
intacta en forma permanente después de la vacunación.
Las personas con niveles de anticuerpos disminuibles todavía
están protegidos contra la enfermedad clínica y la enfermedad
crónica.
- Para
los empleados de salud con estados inmunes normales que
han demostrado una repuesta a los anti-HBs después de
ser vacunados, las dosis de refuerzo no son recomendadas
así como tampoco lo es la prueba periódica para los anti-HBs.
Resultados posvacunación
- Después de la vacunación de rutina para los bebés, niños,
adolescentes o adultos, no es necesaria la prueba posvacunatoria
para verificar la respuesta adecuada de los anticuerpos.
- Sí
se recomienda la prueba posvacunatoria para las personas
cuyos cuidados médicos normales incluyen el monitoreo
de su estado inmune.
Esto incluye
personas que:
- están inmunocomprometidas (por ejemplo, pacientes bajo tratamiento
de hemodiálisis)
- recibieron la vacuna en la nalga
- son
bebés nacidos de madres HBsAg positivas (antígeno de superficie
de la hepatitis B)
- son
trabajadores de salud que tienen contacto con sangre
- son
parejas sexuales de personas que tienen infección crónica
con el virus hepatitis B
La prueba de posvacunación debe ser completada 1-2 meses
después de la tercera dosis de la vacuna para que los resultados
sean significativos. Una respuesta adecuada de protección
contra los anticuerpos es 10 o más unidades milinternacionales
(>=10mIU/mL).
Incidentes negativos
- Los casos reportados
de enfermedades poco comunes luego de la vacunación tienen
que ver, por lo general, con otras causas no relacionadas
con la vacuna. Siempre que se administra un grupo considerable
de vacunas, ocurrirán algunos efectos negativos después
de la vacuna como simple coincidencia y se acusará falsamente
a la vacuna por estos efectos.
- Cualquier persona que piense que ha tenido una posible reacción
negativa o un efecto adverso de salud como consecuencia
de una vacuna, debe de reportarla a su médico. El Vaccine
Adverse Events Reporting System (1-800-822-7967) recibe
reportes de los médicos y otros especialistas de salud
sobre efectos secundarios de la vacuna.
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