Norovirus es el nombre que recibe un grupo de virus, que es la causa común de los brotes de gastroenteritis viral (“infección estomacal”). Aunque las personas que tienen la infección del norovirus se puedan sentir muy enfermas durante varios días, la enfermedad raramente es seria.

Los síntomas con frecuencia comienzan repentinamente entre 12 a 48 horas después de la exposición al norovirus. La mayoría de las personas se mejora en uno o dos días y no tienen efectos de salud a largo plazo debido a la enfermedad, aunque puede haber deshidratación (pérdida de líquidos) y lo que puede dar como resultado la hospitalización.

Los síntomas incluyen:

• Náusea y vómitos
• Diarrea acuosa
• Calambres estomacales
• Fiebre, escalofríos, dolor de cabeza, dolores musculares

El norovirus se encuentra en las heces y los vómitos de las personas infectadas. Es muy contagioso y usualmente se propaga de persona a persona o a través de alimentos contaminados. Las personas pueden infectarse con el virus por:

• Tomar alimentos o beber líquidos contaminados con el norovirus.
• Tocar superficies u objetos contaminados con el norovirus y luego llevarse las manos a la boca.
• Tener contacto directo con una persona infectada y que muestra síntomas, tal como cuidar a alguien con la enfermedad o compartir alimentos o utensilios para comer con alguien que esté enfermo.

El norovirus se puede propagar rápidamente en lugares con áreas comunes cercanas, tales como los centros de cuidado infantil, centros de atención a largo plazo y barcos de cruceros. Las personas que trabajan en este tipo de instalaciones deben seguir cuidadosamente los pasos para prevenir la propagación de la infección cuando están al cuidado de niños o residentes que podrían tener una infección de norovirus. Las personas infectadas con norovirus pueden contagiar a otros desde el momento en que comienzan a sentirse enfermos hasta, por lo menos, 3 días después de que los síntomas terminen.

• El diagnóstico usualmente se realiza en base a los síntomas de la persona.
• El diagnóstico de laboratorio para el norovirus usualmente se realiza únicamente para ayudar a determinar la causa de un brote. El Departamento de salud pública puede solicitar muestras de heces o vómitos para buscar el norovirus en el laboratorio.
• El tratamiento consiste en tomar abundantes líquidos y descanso adecuado. Los antibióticos no son efectivos contra el norovirus.

Usted puede disminuir sus posibilidades de enfermarse con el norovirus o de transmitirlo a otros, siguiendo estas recomendaciones:

• Lávese las manos, especialmente después de ir al baño, cambiar pañales, antes de comer y antes de preparar alimentos.
• Lave o deseche cualquier vómito o heces en el inodoro. Limpie y desinfecte el área circundante según sea necesario.
• Limpie y desinfecte rápidamente las superficies duras, que no tienen poros (por ejemplo: mostradores, inodoros, pisos) contaminados con vómitos o heces. Limpie con un paño lo más que se pueda, lave con jabón y agua, luego desinfecte con una solución de 1/3 de tasa de cloro mezclado con un galón de agua. Déjela en la superficie por 10 minutos, enjuáguela con agua y luego deje secar al aire. Las alfombras pueden desinfectarse mediante limpieza con vapor.
• Quite y lave inmediatamente las prendas de vestir y la ropa de cama contaminada con norovirus, después de un episodio de diarrea o vómitos. Utilice agua caliente y jabón para lavar.
• Evite preparar alimentos o tener contacto con personas saludables por lo menos tres días después de que hayan ocurrido los últimos síntomas.
• Lave las frutas y vegetales crudos y cocine las ostras antes de comerlas.