La Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU.Los Institutos Nacionales de la Salud
Omita y vaya al Contenido
MedlinePlus Información de Salud para Usted MedlinePlus Información de Salud para Usted MedlinePlus Información de Salud para Usted
Contáctenos FAQs - Preguntas más frecuentes Índice Sobre MedlinePlus
English

Logo de Reuters Health

Estudio revela que curar el cáncer es más difícil de lo pensado

Versión para imprimir Versión para imprimir

Traducido del inglés: jueves, 4 de septiembre, 2008

Por Maggie Fox

WASHINGTON (Reuters) - Un grupo de expertos que analizó cada uno de los genes tumorales de dos de los tipos de cáncer más difíciles de tratar halló que la enfermedad es mucho más compleja de lo pensado y dijo haber descubierto por qué es tan improbable curar un tumor después de que se ha diseminado.

Sin embargo los investigadores también revelaron una posible nueva forma de tratar un tipo común y letal de cáncer cerebral y abrieron la puerta para descubrir la enfermedad antes de que se haya expandido, es decir cuando aún puede curarse quirúrgicamente, informó el jueves la revista Science.

"El cáncer es muy complejo, más de lo que creíamos. No va a ser fácil desarrollar terapias", dijo el doctor Bert Vogelstein, de la Johns Hopkins University en Baltimore y el Instituto Médico Howard Hughes.

"Si se tienen 100 pacientes, se tienen 100 enfermedades diferentes", agregó el especialista.

Los hallazgos sugieren que las terapias nuevas populares, como Gleevec de Novartis, no funcionarían ampliamente, dado que afectan solamente a un gen mutado, mientras que el cáncer es provocado por docenas de ellos.

Un enfoque mejor sería encontrar los recorridos o senderos, es decir las redes de genes, que controlan el crecimiento y la expansión tumoral descontrolada, dijeron los investigadores a periodistas en una conferencia telefónica.

El equipo internacional de expertos secuenció los más de 20.000 genes presentes en las células de 24 pacientes con cáncer pancreático avanzado y de 22 personas con glioblastoma multiforme.

El tumor típico en el páncreas tenía 63 mutaciones genéticas, mientras que el que se alojaba en el cerebro presentada, en promedio, 60 variaciones en los genes, revelaron los autores.

La buena noticia es que los científicos hallaron sólo 12 senderos anormales en la mayoría de los tumores. Algunos estaban en zonas esperadas, como el de la regulación del suicidio celular programado o apoptosis, que es el proceso anormal por el cual las células se autodestruyen.

RECORRIDOS COMUNES

"Con frecuencia, lo que parecen ser mutaciones en genes separados resulta estar funcionando en recorridos comunes", expresó el doctor Kenneth Kinzler, de la Johns Hopkins, quien trabajó en el estudio.

Un descubrimiento sorprendente fue el de un nuevo gen, llamado IDH1, encontrado en el glioblastoma multiforme, que es la forma más común de tumor cerebral y que suele provocar la muerte de los pacientes en el lapso de un año, indicó el doctor Victor Velculescu, de la misma universidad.

Los pacientes con esas mutaciones eran más jóvenes y vivían más que aquellos con el tumor cerebral típico. El senador por Massachusetts Edward Kennedy, de 76 años, fue diagnosticado en mayo con este tipo de cáncer cerebral.

"Los glioblastomas multiformes solían considerarse como una sola enfermedad. Pero ahora está claro que son dos", dijo Velculescu en la conferencia.

Además, Vogelstein señaló que los resultados sugieren que las compañías farmacéuticas deberían cambiar su enfoque para el desarrollo de nuevos medicamentos contra el cáncer.

Mientras que la píldora Gleevec transformó el tratamiento de un cáncer sanguíneo denominado leucemia mieloide crónica (LMC), "nuestro trabajo sugiere que la mayoría de los tumores sólidos no tiene nada que ver con la LMC", manifestó Vogelstein.

"Es extremadamente improbable que los medicamentos que apuntan a un solo gen, como Gleevec, funcionen contra una gran mayoría de los tumores sólidos", dijo el experto.

"En lugar de buscar que los fármacos apunten a proteínas simples, (...) sería más productivo hacer que actúen contra los recorridos centrales", añadió Vogelstein.

Según el investigador, los resultados del estudio también sugieren mejores modos de controlar los cánceres.

"Nuestro grupo, al igual que otros, halló que se pueden detectar mutaciones fuera de las células, simplemente flotando en el plasma, en prácticamente todos los pacientes con cáncer colorrectal avanzado y en alrededor dos tercios de aquellos con tumores relativamente tempranos", dijo Vogelstein.

"Pronto será posible identificarlas en muchas otras muestras de pacientes, como por ejemplo en la sangre, aún cuando los tumores sean de estadio inicial. Casi todos los cánceres, incluidos los del cerebro y el páncreas, serían curables si son detectados antes", agregó el experto.


Reuters Health

(c) Reuters 2008. All rights reserved. Republication or redistribution of Reuters content, including by caching, framing or similar means, is expressly prohibited without the prior written consent of Reuters. Reuters and the Reuters sphere logo are registered trademarks and trademarks of the Reuters group of companies around the world.

Noticias relacionadas:


Más noticias desde esta fecha

Temas relacionados: