MARTES, 9 de septiembre (HealthDay News/Dr. Tango) -- Menos estudiantes universitarios de EE. UU. que nunca (1 de 5) fuman, pero los líderes universitarios tienen que declararse contra las tácticas de mercado agresivas del sector tabacalero para asegurar que los índices de tabaquismo entre estudiantes no aumente, encuentra un informe reciente de la American Lung Association.

"Las universidades tienen la responsabilidad de ofrecer espacios seguros en donde sus estudiantes puedan aprender y vivir. Esto debe incluir un ambiente libre de humo de segunda mano y de publicidad que exhorte a los adultos jóvenes a usar los letales productos de tabaco", afirmó en un comunicado de prensa publicado el 8 de septiembre Bernadette A. Toomey, presidenta y directora ejecutiva de la American Lung Association.

Los autores del informe analizaron investigaciones publicadas, encuestas y documentos del sector tabacalero para evaluar el impacto que tiene el tabaco sobre los estudiantes universitarios.

Los índices de estudiantes universitarios que fumaban en 1989 eran casi tan bajos como ahora, pero aumentaron en la siguiente década hasta alcanzar el 30.6 por ciento, según el informe. El sector tabacalero tiene muchísimo que ver con los índices fluctuantes de tabaquismo entre estudiantes universitarios. Por ejemplo, en 2005, el sector tabacalero gastó más de $1 millón al día patrocinando eventos y regalos dirigidos a estudiantes universitarios. Un estudio encontró que 109 de 119 escuelas encuestadas informaron ver promociones de tabaco en un eventos en el campus, según el informe.

"El retorno del sector sobre la inversión es increíble. Casi el veinte por ciento de los estudiantes universitarios actuales son fumadores habituales. Lo que es peor aún es la campaña continua (del sector tabacalero) para aumentar esas cifras. En lo tocante al sector tabacalero, todo estudiante universitario de los EE. UU. tiene una diana en la espalda", advirtió Toomey.

Los documentos del sector tabacalero revelaron campañas dirigidas a adultos jóvenes durante etapas de transición de la vida, como pasar de la secundaria a la universidad. Las compañías tabacaleras consideran que esas etapas de la vida son un momento perfecto para desarrollar y fijar nuevas conductas, como fumar. En un intento por explotar esta vulnerabilidad, las compañías tabacaleras patrocinan promociones en bares y clubes nocturnos para que los adultos jóvenes perciban fumar como una norma social. El informe advertía que eso podría llevarlos de experimentar con cigarrillos a volverse fumadores de un paquete al día.

La American Lung Association urgió a los líderes universitarios a unirse al Desafío de aire libre de humo 2010, un programa nacional que busca eliminar la exposición al humo de segunda mano en lugares públicos y de trabajo para 2010 y reducir las enfermedades relacionadas con el tabaquismo.

Las universidades pueden ser parte del programa al implementar las siguientes pólizas e iniciativas este año escolar:

• Prohibir el uso de tabaco bajo techo y al aire libre, oficinas privadas, residencias estudiantiles y dormitorios.
• Prohibir la venta y promoción de productos de tabaco en el campus y en las publicaciones, propiedades y eventos controlados por la universidad.
• Rechazar toda financiación para investigación y patrocinio del sector tabacalero.
• Ofrecer programas de cesación del tabaquismo para todos los estudiantes, profesores y el personal.
• Implementar y hacer cumplir políticas contundentes para ayudar a la prevención, cesación y eliminación del uso de tabaco en todo el campus.
• Educar a estudiantes y profesores sobre los efectos nocivos de los productos de tabaco, los recursos para dejar de fumar y las políticas del campus.
• Promover y financiar investigaciones para desarrollar e implementar intervenciones contra fumar y el uso de tabaco que se dirijan específicamente a estudiantes universitarios.
• Presionar a las legislaturas estatales para que creen leyes que prohíban el uso de tabaco en los campus.

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