La violencia doméstica es todo hecho de violencia física o psicológica que ocurre dentro del ámbito familiar. En el caso de la violencia física, se trata de una acción no accidental que produce o es capaz de producir daño físico. Por su parte, la violencia psíquica es la que se ejerce mediante agresiones verbales y comportamientos que buscan humillar a la víctima para alterar su estabilidad emocional. Además, también existe la posibilidad de que estos dos tipos de violencia se conjuguen durante episodios de violencia sexual, en los cuales la víctima es forzada a mantener relaciones sexuales sin su consentimiento. Las mujeres son víctimas cada año de aproximadamente 4.8 millones de agresiones físicas a manos de su cónyuge o pareja sentimental. En 2004, la violencia doméstica en Estados Unidos produjo la muerte de 1,544 personas, de las cuales el 75% eran mujeres y el 25% restante eran hombres.

La violencia juvenil es la segunda principal causa de muerte en Estados Unidos entre los jóvenes de 10 y 24 años. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, en 2005 fueron asesinados 5,686 jóvenes de edades entre 10 y 24 años, lo cual se traduce en un promedio de aproximadamente 16 asesinatos por día. Por otra parte, en 2006 también hubo 720,000 jóvenes de edades entre 10 y 24 años que fueron atendidos en salas de emergencia tras haber resultado heridos en un hecho violento. Las estadísticas también indican que aproximadamente 30% de los alumnos de entre sexto y décimo grado fueron víctimas o victimarios de hechos de hostigamiento o intimidación (bullying).