El virus de inmunodeficiencia humana (HIV, por sus siglas en inglés) es el virus que causa el SIDA (síndrome de inmunodeficiencia adquirida) y puede transmitirse de una persona a otra cuando la sangre, el semen o las secreciones vaginales infectadas, entran en contacto con la piel abierta o membranas mucosas del individuo no infectado.
Además, las mujeres embarazadas portadoras de VIH pueden contagiar a sus bebés durante el embarazo, parto, o por medio de la leche materna. Las personas con VIH tienen lo que se llama la infección del VIH y algunas de ellas desarrollarán el SIDA como resultado de la infección provocada por el virus.
El VIH puede infectar a cualquier individuo que practique comportamientos de riesgo, como por ejemplo compartir agujas y jeringas para el uso de drogas intravenosas, tener relaciones sexuales sin el uso correcto del condón (incluyendo sexo oral) y tener contacto sexual con alguien que no sabe si es o no es portador del virus.
Muchas personas infectadas con el VIH no presentan síntomas por muchos años. Para establecer si una persona tiene SIDA no se puede tomar como referencia a los síntomas ya que son similares a los de otras enfermedades.
Sin embargo, existen algunas señales de advertencia que requieren ser consideradas con seriedad.
- Pérdida acelerada de peso.
- Tos seca.
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- Inflamación de las glándulas linfáticas en la axila, ingle o cuello.
- Diarrea por más de una semana.
- Manchas blancas o erupciones inusuales en la lengua, la boca o garganta.
- Ronchas rojas, marrones, rosadas o moradas en la piel, debajo de la piel o dentro de la boca, la nariz o los párpados.
- Pérdida de la memoria, depresión y otros trastornos neurológicos.
La única manera de determinar si uno está infectado es realizarse el examen del VIH. Para obtener más información sobre los lugares donde puede hacerse la prueba del VIH, visite la página de Internet de los Recursos Nacionales para la Prueba del VIH:
http://www.hivtest.org/index.cfm.
También puede llamar las 24 horas a la línea de información de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades: 1-800-CDC-INFO (232-4636) y 1-800-232-6348 (TTY para las personas discapacitadas de la audición) en inglés y en español.
Cuando el VIH apareció por primera vez en Estados Unidos, no había medicamentos para combatir el deterioro del sistema inmunológico y existían muy pocos tratamientos disponibles para las enfermedades oportunistas desatadas por la infección. Sin embargo, en la actualidad los investigadores han desarrollado fármacos para contrarrestar la infección del VIH y otras infecciones y cánceres relacionados con el virus.
